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Las mujeres afganas que desafían el regreso de los talibanes al poder: "Los tiempos han cambiado"

  • Cuatro mujeres se manifestaron este martes en Kabul por la defensa de los derechos de las afganas
  • Esta acción es el reflejo de una generación de mujeres que han podido estudiar y trabajar y no quieren perder sus derechos

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La vuelta de los talibanes supondría una limitación de los derechos de las afganas según la ley Sharía
La vuelta de los talibanes supondría una limitación de los derechos de las afganas según la ley Sharía

Armadas con cuatro folios, un pequeño grupo de mujeres afganas protagonizó la primera protesta feminista de la que se tiene constancia desde que los talibanes se hiciesen con Kabul y pusiesen fin a la guerra. Las activistas han desafiado en Kabul el retorno del régimen talibán mientras defendían sus derechos al grito de frases como "la educación y la participación política es el derecho de toda mujer afgana" y "las mujeres son la mitad de la sociedad".

La imagen de la protesta fue difundida por la agencia de prensa afgana Pajhwok Afgan News y divulgada por Basir Fitri. En la fotografía aparecen cinco mujeres, cuatro de ellas sosteniendo carteles en los que, en dos, puede leerse el mensaje en inglés de "hay mujeres afganas". La misma agencia difundió más tarde un vídeo del acontecimiento a través de su cuenta en la red social Twitter en el que aparecen las cuatro mujeres rodeadas de talibanes armados. El vídeo cuenta ya con más de dos millones y medio de reproducciones.

Este desafío es el reflejo de una generación de mujeres que vive mayoritariamente en las grandes ciudades, que ha podido ir a la escuela y a la universidad y desarrollar una carrera profesional. Y están dispuestas a luchar para no perder todo lo conseguido.

"Los tiempos han cambiado", ha afirmado a Reuters, Khadija, directora de una escuela religiosa para niñas en Afganistán. "Los talibanes son conscientes de que no pueden silenciarnos. Si apagan Internet, el mundo lo sabrá en menos de cinco minutos".

En un país sumido en el miedo y la incertidumbre, algunas mujeres ya han recibido órdenes de abandonar sus trabajos, otras han huido de sus hogares y muchas se están ocultando de los talibanes. Según ha asegurado a RTVE.es la periodista Mònica Bernabé, que fue corresponsal en Afganistán durante casi ocho años, los mensajes que le llegan desde Kabul son de "absoluta desesperación".

"En todas las guerras las mujeres son las grandes víctimas pero en esta situación más, porque aquí hay una suma de muchas cosas: de ignorancia, de desconocimiento y de violencia", ha afirmado Nadia Guhlan, educadora social y escritora, en una entrevista con RNE.

La valentía de las mujeres afganas

Alrededor de 3,5 millones de niñas asistían en el último año a la escuela, más del 25 % de los miembros del Parlamento son mujeres, y casi el 30 % de las empleadas en las instituciones de la administración pública. Pero esta mejoraría en las condiciones de vida de las afganas podría cambiar pronto con la vuelta de los talibanes, que ya dirigieron el país hace 20 años.

Desde 1996 hasta 2001, en Afganistán las mujeres se vieron privadas de realizar actividades como trabajar o asistir a la escuela y a la universidad. Durante ese período de tiempo talibán, las afganas tampoco podían salir de sus hogares con la cara descubierta y sin la compañía de un hombre. Estas son algunas de las limitaciones que las activistas, que forman parte de una generación que ha crecido con mayores libertades, temen recuperar con la vuelta al poder de los talibanes.

Si limitan Internet...Enviaré libros a las casas

La activista afgana por la educación de las niñas Pashtana Durrani no planea rendirse ante las posibles prohibiciones del nuevo régimen y ha señalado a Reuters tener una alternativa para cada una de esas limitaciones. "Si limitan el currículo, subiré más libros a una biblioteca online. Si limitan Internet, enviaré libros a las casas. Si limitan profesores, haré una escuela subterránea", ha señalado.

Khadija, directora de una escuela religiosa para niñas en Afganistán, ha mostrado a Reuters cierto optimismo respecto al futuro de las mujeres: "Los tiempos han cambiado". "Los talibanes son conscientes de que no pueden silenciarnos. Si apagan Internet, el mundo lo sabrá en menos de cinco minutos", ha afirmado a los periodistas Rupam Jain y Lucy Marks. "Tendrán que aceptar quiénes somos", ha sentenciado Khadija.

Otra de las mujeres que han demostrado no estar dispuestas a abandonar sus libertades es la renombrada directora de cine afgana Sahraa Karimi, la única mujer afgana con doctorado en cine. Karimi ha publicado diversos vídeos en las redes sociales de Instagram y Twitter en los que ofrece declaraciones sobre la situación actual en Afganistán, solicitando ayuda a la comunidad internacional. No obstante, la cineasta ha mostrado también su valentía al explicar que no abandonará su país "hasta el último momento".

La ley de Sharía limitará los derechos de las mujeres

Este martes los talibanes ofrecieron la primera rueda de prensa desde su toma de Kabul, un evento en el que los derechos de las mujeres han ocupado muchas de las preguntas de los periodistas. El portavoz de los talibanes, Zabihullah Mujahid, manifestó que las mujeres afganas podrán trabajar y estudiar, pero "dentro de los límites de la ley islámica".

No habrá dicriminación contra las mujeres, pero dentro de nuestros marcos

"Le aseguramos a la comunidad internacional que no habrá discriminación contra las mujeres, pero, por supuesto, dentro de nuestros marcos", respondió el talibán a los medios de comunicación en referencia a sharía, interpretada de forma extrema por los talibanes. "Las mujeres son una parte importante de la sociedad y vamos a garantizar todos sus derechos dentro de los límites del Islam", agregó.

Mujeres de todo el mundo unidas por Afganistán

Mujeres como la escritora y periodista Rosa Montero han redactado un llamamiento a la comunidad internacional en el que reivindican la libertad, dignidad e igualdad de las afganas. El documento, escrito en tres idiomas diferentes y al que se puede continuar accediendo para firmarlo, hace hincapié en la "crueldad intolerable y adicional" que padecen la población femenina de Afganistán por el único hecho de ser mujer.

El llamamiento se centra en tres peticiones principales: exigir al poder talibán que mantenga abiertas las fronteras para que todas las personas que deseen abandonar el país puedan hacerlo, que los gobiernos internacionales repatríen "al mayor número posible de afganos y especialmente afganas en peligro inminente" y que se preste una especial atención a las mujeres en situación de riesgo por haber desempeñado "tareas profesionales prohibidas por los talibanes" u otros motivos.

A esta petición se han sumado organizaciones como la Asociación de Mujeres Juezas de España (AMJE). Por su parte, Kobra, una activista afgana por los derechos de las mujeres que ha hablado con RTVE desde Kabul, donde reside actualmente, ha manifestado que las afganas no necesitan bonitas declaraciones, sino "acciones bonitas de la comunidad internacional".