Qué puede pasar si un padre se niega a que su hijo lleve la mascarilla en el colegio

• Si no se alcanza ningún acuerdo, los padres pueden ser sancionados por delito de abandono de familia o desobediencia
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¿A qué se enfrentan los padres que no quieren llevar a sus hijos con mascarilla al colegio?

Con apenas dos semanas desde su arranque, el tercer curso escolar marcado por la pandemia de la COVID-19 ya ha generado su primera gran polémica: la prohibición del acceso al colegio sin mascarilla para los alumnos mayores de 6 años.

Algunos padres no están de acuerdo con la medida y han optado por negarse a llevar a sus hijos a la escuela si para ello deben obligarle a llevar la mascarilla. Una situación que pone en juego, según los expertos, el derecho fundamental a la educación y el interés del menor.

Según el protocolo, en cada ayuntamiento hay una comisión de absentismo escolar y si no se alcanza ningún acuerdo con los padres, se podría dar parte a la Fiscalía de Menores para que investigue.

TVE ha consultado sobre esta incipiente polémica con Eduardo Esteban Rincón, fiscal coordinador de menores: "Si es simplemente por la voluntad de no llevar mascarilla, tendríamos que preguntarnos qué derecho prevalece", plantea Rincón.

Para él, se debe imponer "el derecho a la educación" y el caso "podría acabar en sanción". En el código penal existe un delito de abandono de familia por no prestar atención al menor o "incluso también de desobediencia", apunta Rincón, siempre y cuando "hayan recibido reiteradamente una orden de que lleven a los niños con mascarilla".

Los casos de Cáceres y Mallorca

El primer caso polémico se produjo en el colegio Alba Plata de Cáceres, donde dos hermanas no pueden recibir clases presenciales ante la negativa de sus padres de ponerles la mascarilla. En un primer momento, la Junta de Extremadura había aceptado que recibieran clases individuales aparte dentro del recinto, pero ante la negativa del profesorado y la AMPA, ha optado por establecer la educación a distancia.

En este caso aún no hay ninguna intervención judicial, aunque la presidenta del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura, María Félix, ha asegurado que "si se presenta una denuncia, el juez o la jueza competente lo estudiaría oportunamente".

El Govern de las Islas Baleares no ha sido tan contemplativo como la Junta de Extremadura y no solo ha denegado la entrada al colegio, sino que tampoco ha permitido la inclusión en el curso escolar a dos menores que se presentaron sin mascarilla en un centro de la localidad mallorquina de Costitx. Además, en ambos casos se ha puesto en marcha un expediente por absentismo, con la amenaza de llevar la situación a la Fiscalía de Menores.

Hay otro caso en estudio en un centro educativo de Alhaurín de la Torre, en Málaga. De momento, en Andalucía apelan a la responsabilidad para respetar las normas de convivencia. El consejero de Salud, Javier Imbroda, ha indicado que no va a "consentir la más mínima falta de respeto a las normas de convivencia de un centro educativo ni a los docentes".