El Gobierno busca apoyos a los presupuestos y un acercamiento al PP para desbloquear las instituciones

• Félix Bolaños inicia esta semana una ronda de reuniones con los portavoces parlamentarios de todas las fuerzas políticas
• El Ejecutivo busca "acuerdos útiles" con los grupos, a los que reclama "responsabilidad y sentido de Estado"

El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, durante una comparecencia pública.

El ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños, tiene previsto celebrar esta semana su primera ronda de reuniones presenciales con los portavoces de todas formaciones parlamentarias, con el objetivo de buscar un acercamiento al PP para la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), cuyo mandato caducó hace casi tres años, y una primera toma de contacto con los partidos para sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2022.

Según han confirmado fuentes del Gobierno a RTVE, la primera reunión tendrá lugar el martes con la portavoz del Grupo Parlamentario Popular, Cuca Gamarra, y posteriormente se irán fijando los encuentros con el resto de los grupos en orden de mayor a menor representación parlamentaria.

Esta ronda de conversaciones se cerrará con los representantes de los dos grupos que sustentan el Gobierno de coalición, PSOE y Podemos.

Bolaños ya anunció hace unos días, durante su primera comparecencia ante la Comisión Constitucional del Congreso, su intención de reunirse con los portavoces parlamentarios y pedir a todas las fuerzas políticas "responsabilidad y sentido de Estado" para lograr "acuerdos útiles" en cuestiones como los PGE o la renovación de los órganos constitucionales.

"España necesita acuerdos y yo les tiendo la mano para que podamos lograrlos", afirmó Bolaños, quien ya mantuvo en julio una ronda telefónica con los partidos tras su toma de posesión y con el objetivo de establecer un primer contacto.

Presupuestos para una "recuperación justa"

Uno de los objetivos de esta ronda es recabar apoyos de cara a sacar adelante los presupuestos, que se consideran vitales para dejar atrás la crisis ocasionada por la pandemia e iniciar una "recuperación justa". Con el respaldo que supone la inyección de los fondos europeos, el Ejecutivo confía en volver a contar con sus aliados parlamentarios habituales para aprobar las cuentas, que llegarán al Parlamento en octubre.

Hace un sacó adelante los PGE 'in extremis' tras complicadas negociaciones, pero logrando el respaldo de 188 votos y once fuerzas políticas,  una mayoría de izquierdas superior incluso a la que respaldó su investidura. Sin embargo, PP, Vox, Ciudadanos, Junts, UPN, Foro Asturias, Coalición Canaria y BNG votaron en contra.

A todos ellos, a los que votaron a favor y a los que lo hicieron en contra, les pedirá Bolaños en persona su apoyo a las nuevas cuentas, con el argumento de que se trata de un requisito fundamental para abordar la recuperación, en la que jugarán un papel esencial los 75.000 millones de euros que llegarán desde Europa.

El pasado mes de julio, el Consejo de Ministros dio luz verde al techo de gasto, que se mantiene en 196.142 millones de euros -apenas 45 millones más que un año antes-. Pero antes de llegar al Congreso, PSOE y Unidas Podemos deben terminar de negociar las cuentas en el seno de la coalición y superar sus discrepancias, como la futura ley de vivienda o la reforma laboral.

Renovación estancada del CGPJ

Otro de los temas esenciales que centrarán el encuentro entre Bolaños y, sobre todo, el Partido Popular, es la renovación del CGPJ, en un momento en el que las discrepancias entre el Gobierno y el principal partido de la oposición están más tensas que nunca.

El presidente Pedro Sánchez lleva meses sin hablar con Casado, y tampoco tiene previsto llamarle próximamente para pedirle personalmente un acuerdo para el CGPJ. Mientras sube el nivel de crispación en sus reproches mutuos, el jefe del Ejecutivo ha delegado en Bolaños la negociación para renovar el Poder Judicial, aunque ambas partes reconocen que están totalmente estancada.

Ambos partidos han logrado varias veces un acuerdo para la renovación, aunque todos las veces se ha frustrado el proceso entre reproches mutuos de querer controlar a los jueces. El resultado es que los veinte vocales que forman parte del CGPJ llevan más de mil días en funciones.