El arzobispo de Tarragona suspende a un sacerdote durante 15 años por abusos sexuales ya prescritos
- El cura Manuel M. Fuentes Gasó fue denunciado por haber cometido presuntamente abusos a un menor hace 30 años
- Su sanción se ha decidido "con la firme voluntad de evitar todo tipo de impunidad", pese a la prescripción civil de los hechos
El arzobispo primado de Tarragona, Joan Planellas, ha suspendido de sus responsabilidades pastorales durante 15 años al sacerdote diocesano Manuel M. Fuentes Gasó, que fue denunciado en febrero pasado por haber cometido presuntamente unos abusos sexuales a un menor hace 30 años.
En una nota de prensa, el arzobispado informa de que, aunque el caso denunciado ha prescrito para la justicia civil, ha solicitado al Vaticano que se levante la prescripción canónica y este ha aceptado, con lo que ha impuesto al cura varias penas "con la firme voluntad de evitar todo tipo de impunidad".
Si bien no han trascendido los hechos denunciados, la víctima fue abusada por el sacerdote cuando tenía 17 años.
Le prohíbe durante 15 años tener voz y voto, y ejercer responsabilidades
El arzobispo Planellas ha "ponderado la gravedad de los hechos" denunciados y ha impuesto a Fuentes, que fue el director del archivo archidiocesano de Tarragona y canónigo archivero de la Catedral de Tarragona, la prohibición durante un año del ejercicio público del ministerio presbiteral y de la docencia eclesiástica.
Asimismo, le prohíbe durante 15 años tener voz y voto como canónigo y ejercer cualquier responsabilidad en una parroquia u organismo diocesano.
Durante los próximos 15 años, según ha informado el arzobispado, el sacerdote solo podrá ser nombrado adscrito a una parroquia, comunidad u organismo diocesano, con la prohibición expresa de estar con menores de edad sin la presencia de un adulto.
Le insta a considerar una manera de "pedir perdón a la víctima"
El arzobispo también ha exhortado a Fuentes a "ponderar su comportamiento y a asumir su firme propósito de llevar una vida de acuerdo con la dignidad que corresponde a su ministerio presbiteral, y a considerar la manera más oportuna de pedir perdón a la víctima".
En su comunicado, el Arzobispado de Tarragona se reafirma en condenar cualquier tipo de abuso sexual, de poder y de conciencia, especialmente cuando haya sido cometido por un clérigo contra un menor, y anima a denunciar estos hechos a las autoridades civiles y a la Comisión de los Abusos del Arzobispado (teléfono 628 426 853, o al correo oficina.abusos@arqtgn.cat).
El arzobispo Planellas remitió el pasado mes de febrero a la Fiscalía la investigación interna que abrió contra este sacerdote tras recibir una denuncia por abusos sexuales cometidos presuntamente hace varias décadas.
El arzobispo, presidente de la Conferencia Episcopal Tarraconense, explicó entonces que el pasado mes de diciembre recibió "una información de un posible caso de abusos sexuales por parte de un sacerdote de nuestro Arzobispado hace unas décadas", por lo que activó el protocolo y abrió una investigación, cuyos resultados envió a la Santa Sede y a la Fiscalía Provincial de Tarragona aunque los hechos han prescrito judicialmente.