México y Estados Unidos inician una "alianza" de seguridad como "socios iguales"

• El Entendimiento Bicentenario se llama así porque se cumplen 200 años de relaciones diplomáticas en 2022
• Entre otras cosas, ambos países se comprometen a colaborar en la lucha contra el tráfico de drogas y armas

El secretario de Estado de Estados Unidos junto al canciller mexicano durante una rueda de prensa el viernes 8 de octubre de 2021 en Ciudad de México.

Los Gobiernos de México y Estados Unidos han iniciado este viernes una "alianza" de seguridad en la que serán "socios iguales" tras reemplazar la Iniciativa Mérida con el nuevo Entendimiento Bicentenario después del Diálogo de Alto Nivel de Seguridad.

"De una cooperación limitada vamos a una alianza, que es algo muy distinto, es superior cualitativamente. Solamente te alías con alguien en quien confías y respetas", ha presumido el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, en una conferencia con Antony Blinken, secretario de Estado de Estados Unidos.

Blinken ha coincidido en que se abre "un nuevo capítulo" en la cooperación en seguridad con México en el que ambos actuarán como "socios iguales".

Una imagen de Antony Blinken.

"Marca el inicio de un nuevo capítulo en la cooperación de seguridad entre México y Estados Unidos, trabajando como socios iguales y que define y aborda las causas raíz de retos de seguridad como la desigualdad, la corrupción y la impunidad", ha aseverado.

De militar a integral

El Entendimiento Bicentenario, llamado así porque se cumplen 200 años de relaciones diplomáticas en 2022, reemplaza a la Iniciativa Mérida, estrategia de 2008 basada en un enfoque militar que impulsaron los expresidentes George W. Bush y Felipe Calderón.

El nuevo marco se basa en tres pilares: inversión en salud pública para combatir las adicciones y homicidios, prevenir la delincuencia transfronteriza al reducir el tráfico de armas, drogas y personas, y desmantelar las redes criminales al perseguir a personas vinculadas a financiamientos ilícitos.

Marcelo Ebrard ha recordado que las prioridades del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador son la reducción de los homicidios, las oportunidades para que los jóvenes no caigan en las redes del crimen y el control del tráfico de armas de Estados Unidos hacia México.

Una imagen de Marcelo Ebrard.

"(Existe) el interés por construir una relación en donde las prioridades de México tengan el mismo nivel que las prioridades de Estados Unidos. Eso no lo habíamos tenido", ha declarado el canciller mexicano.

Ebrard ha señalado que el próximo 1 de diciembre deberá presentar el plan anual de trabajo y en enero próximo uno a tres años.

Ha anunciado cuatro memorandos de entendimiento "inmediatos": uno para reducir la adicción a las drogas, la creación del Programa de Control de Contenedores Portuarios, un grupo binacional para regular precursores químicos y el último para que Washington apoye a México en buscar a los desaparecidos.

En el diálogo de seguridad participaron también han participado el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, y el fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland.

También ha estado López Obrador, quien ha invitado a su homólogo Joe Biden a México "cuando pueda" y ha destacado las coincidencias entre ambos gobiernos, aunque ha insistido en el "respeto a la soberanías".

El presidente de México durante el diálogo de seguridad.

"Considero que vamos a poder, juntos, inaugurar una etapa nueva en nuestras relaciones", ha expresado López Obrador al iniciar el encuentro.

La sombra de la migración

Aunque no era un tema oficial de la agenda, el contexto de la reunión ha estado marcado por las decenas de miles de migrantes varados en las fronteras de México y a lo largo del país en medio de la ola migratoria histórica que vive la región.

El director del Instituto Nacional de Migración (INM) de México, Francisco Garduño, también ha estado en el diálogo de seguridad.

En la conferencia posterior, Blinken y Ebrard han negado haber tratado el programa "Permanecer en México" o MPP, que obliga a solicitantes a tramitar su asilo para Estados Unidos desde territorio mexicano, o el Título 42, que permite la expulsión inmediata de migrantes con el argumento de la pandemia.

Ebrard (d) y Blinken (i) saludándose tras la rueda de prensa.

Cuestionado por la prensa, el secretario estadounidense ha aseverado que la Casa Blanca de Biden busca "atender las causas" al recordar que prometió invertir 4.000 millones de dólares en desarrollo para Centroamérica dentro de cuatro años.

Pero no ha precisado un calendario para la inversión ni ha aclarado si apoyará los programas sociales Jóvenes Construyendo el Futuro y Sembrando Vida, que López Obrador promueve para mitigar la migración.

"La colaboración que tenemos para abordar este increíblemente difícil tema de forma conjunta, pienso que nunca había sido tan sólida como ahora", ha sostenido Blinken.

El secretario ha insistido en que Estados Unidos "está determinado" a hacer cumplir sus leyes "en pleno respeto a los derechos humanos y la dignidad de todas las personas".

Mientras que Ebrard ha aseverado que México está dispuesto a dar refugio a los haitianos.

"Capacidad de refugio tenemos, somos un país de 126 millones de personas, si llegan 15.000 personas de Haití, quieren trabajar, quieren estar aquí, no es un problema para México", ha asegurado el canciller mexicano.