Elecciones generales en Japón, unos comicios en los que el partido del primer ministro espera revalidar su mandato
- Este domingo se elige a los ocupantes de los 465 escaños que componen la Cámara Baja de la Dieta (Parlamento nacional)
- La economía y las desigualdades, así como la superación de la pandemia, han sido las protagonistas de la campaña
Los japoneses acuden este domingo a votar en las primeras elecciones legislativas en cuatro años. Unos comicios donde el histórico partido gobernante del primer ministro, Fumio Kishida, espera revalidar su mandato, aunque, según los sondeos, el Partido Liberal Democrático (PLD) perdería escaños y se mantendría en el poder con una mayoría simple.
La coalición gobernante, formada por el conservador PLD de Kishida y por el budista Komeito contaba con una cómoda mayoría en la recién concluida legislatura, con 276 y 29 escaños respectivamente. Además, el Partido Liberal Democrático ha gobernado Japón de manera casi ininterrumpida desde 1955; ningún otro partido ha conseguido liderar el país durante cuatro años seguidos desde la Segunda Guerra Mundial.
Las principales fuerzas de la oposición concurren en un bloque liderado por el Partido Constitucional Democrático de Japón (PCDJ) que encabeza Yukio Edano, y en el que también se integra el Partido Comunista de Japón.
Se elige a los ocupantes de los 465 escaños de la Cámara Baja de la Dieta
Unos 105,6 millones de japoneses están llamados a depositar sus papeletas durante esta jornada para elegir a los ocupantes de los 465 escaños que componen la Cámara Baja de la Dieta (Parlamento nacional).
La Cámara Baja es el órgano legislativo más poderoso de Japón, y el partido o coalición que logre controlarlo podrá elegir al primer ministro, aprobar presupuestos estatales o ratificar tratados internacionales, entre otras competencias.
De los 465 escaños que están este domingo en juego, 289 se asignan a los candidatos más votados en cada distrito electoral y 176 se deciden por representación proporcional en once bloques regionales.
De este modo, cada votante marca a dos candidatos en sus papeletas: uno para su elegido en la representación por distrito y otro para la regional.
Los aproximadamente 46.000 centros electorales del país han abierto a las 7.00 hora local del domingo (22.00 GMT del sábado) y se cerrarán a las 20.00 de esta misma jornada (11.00 GMT), y el recuento de votos se extenderá hasta horas después.
Si bien los resultados oficiales no suelen anunciarse hasta la jornada siguiente, en las horas posteriores al cierre de los centros electorales se conocerán las primeras prospecciones basadas en sondeos a pie de urna y en las tandas iniciales de recuentos de voto.
Economía y desigualdades, protagonistas de la campaña
Las medidas para revitalizar la tercera economía mundial y para mitigar las desigualdades acrecentadas en la sociedad nipona por el impacto de la pandemia han sido los ejes de la campaña electoral, junto a la estrategia para dejar atrás la pandemia.
Kishida aspira a revalidar su mandato con un programa que aúna crecimiento económico y redistribución de la riqueza, lo que supone un giro respecto al vigente plan conocido como "Abenomics".
"Reviviremos la economía japonesa y nos aseguraremos de que sus frutos los disfruta todo el mundo, no sólo unos pocos elegidos", dijo el actual primer ministro el sábado en Saitama, al norte de Tokio, en uno de sus últimos discursos de campaña.
"La oposición sólo habla de redistribución, pero sin crecimiento no habrá nada que distribuir", señaló Kishida, quien también prometió que promoverá un incremento de ingresos para las clases medias y un aumento de la presión fiscal sobre rentas altas y ganancias de capital.
La principal fuerza de la oposición, el progresista Partido Constitucional Democrático de Japón (PCDJ), viene culpando al partido gobernante de no haber tomado las medidas que ahora promulga pese a llevar casi una década en el poder, y propone medidas fiscales y laborales más ambiciosas para paliar las desigualdades.
El efecto pandemia
Los dos máximos aspirantes a la victoria electoral también difieren en cómo superar de forma definitiva la pandemia de la COVID-19, en un momento en que Japón parece tener al virus bajo control.
Kishida ha prometido más plazas hospitalarias específicas para pacientes de coronavirus y comenzar a aplicar en diciembre la tercera dosis de la vacuna, tras haber inmunizado ya a un 71,2 % de la población y con cifras de contagios diarios inferiores al millar en todo el país desde principios de mes.
Edano, quien ha acusado al Ejecutivo de lentitud en su respuesta a la crisis sanitaria y de no escuchar las recomendaciones de los expertos, apuesta por reforzar la autoridad del Gobierno ante emergencias médicas y por aumentar las ayudas para los colectivos más castigados por la pandemia.
La cuarta y peor ola de contagios que afectó a Japón el pasado agosto, coincidiendo con la celebración de los impopulares Juegos Olímpicos de Tokio, fue uno de los factores que precipitó la salida del predecesor de Kishida como primer ministro, Yoshihide Suga, y disparó las esperanzas de la oposición.