Los palmeros piden rescatar a sus muertos de los cementerios: "No quiero que llegue la lava sin sacar a mi hija"
- Ante el riesgo de que la colada engulla todo, Oliver Martín ha pedido que le permitan exhumar a su hija
- A los palmeros también les preocupa el cierre del único crematorio de la isla, que les obligará a trasladarse a Tenerife
La erupción en La Palma ha dejado en los cementerios de la zona una gruesa capa de ceniza que cubre todo e incluso impide leer las lápidas. Cerrados por el riesgo que supone el volcán, algunos camposantos han decidido abrir finalmente sus puertas por el día de Todos los Santos a los familiares de quienes están allí enterrados para poder limpiar las tumbas y llevar flores a sus seres queridos ante la incógnita de que pasará con ellos si la lava llega hasta allí y lo devora todo.
Oliver Martín es uno de los palmeros que ven con miedo la proximidad de la lava. En 2018, perdió a su pequeña hija Violeta y desde entonces ha ido a visitarla cada día al cementerio de Tazacorte. Sin embargo, el 19 de septiembre dejó de poder hacerlo por culpa del Cumbre Vieja, que ha obligado a que se restrinja el acceso al lugar.
Ante la angustia de que la colada lo engulla todo, ha pedido que le permitan trasladarla, pero las autoridades no le han dado una respuesta por el momento. "No quiero que llegue la situación de que la lava llegue sin la oportunidad de sacar los restos de mi hija de ahí", ha contado a TVE.
Oliver es uno más de los afectados por esta situación. Muchos otros palmeros también ven en la exhumación una forma de evitar que sus seres queridos queden sepultados. Así, los vecinos del cementerio de Las Manchas (Los Llanos de Ariadne) plantean iniciar el proceso administrativo para trasladarlos a un lugar seguro.
La lava amenaza el cementerio de Las Manchas
Las Manchas permanece con el acceso restringido por la presencia de una colada del volcán a tan solo 600 metros. Es por ello que, en el caso de que se concedan los permisos, se tendrá que aplicar un protocolo específico para garantizar la seguridad. Por ejemplo, el sepulturero tendría que acceder acompañado de un equipo de emergencias, ha indicado a RTVE la alcaldesa de la localidad, Noelia García.
"Siempre se puede exhumar", ha dicho la edil, aunque ha recordado que es necesaria una serie de condiciones, como determinar el destino de los restos.
García ha señalado que por el momento no tiene constancia de peticiones formales registradas, aunque sí hay vecinos que se han interesado por la exhumación. Asimismo, ha asegurado que los cuerpos de seguridad tampoco han tenido conocimiento de nadie que haya intentado hacerlo por sus propios medios, considerado profanación de tumbas.
"A mí nadie me ha indicado que quiera hacerlo, pero he leído algunos casos por la prensa", ha contado por su parte el párroco de Los Llanos, Alberto Hernández.
Para él, la raíz de todo este conflicto reside en que el ser humano "es simbólico" y busca siempre expresar "lo que sentimos y vivimos". Ir el día de Todos los Santos al cementerio, poner flores o encender una vela "nos mantiene conectados" a nuestros seres queridos que ya no están.
“Somos más fuertes que el volcán y no nos va a impedir recordar a las personas que queremos“
Desde el Ayuntamiento han mostrado su voluntad por aliviar el dolor de los afectados, que se ve agravado por la imposibilidad de entrar a rendirles homenaje. Para poner solución a esto, han organizado un emotivo acto con el que honrar a los fallecidos de manera segura y se han colocado en la Plaza de España varios paneles con los 5.000 nombres de los difuntos y una tarima para depositar las flores.
"Somos más fuertes que el volcán y no nos va a impedir recordar a las personas que queremos", ha asegurado Noelia García. "Recordamos a esas personas que están con nosotros en cada momento y no en un lugar específico".
“Tenemos que improvisar una nueva manera de rendir tributo a nuestros fallecidos“
"Tenemos que improvisar una nueva manera de rendir tributo a nuestros fallecidos", ha añadido el párroco, que ha señalado la importancia de "conservar viva la memoria". "Lo importante es que mantengamos a los difuntos en nuestro corazón. No mueren mientras vivan en nuestros sentimientos".
Al dolor por las pérdidas se suma la falta de crematorios
Otro de los problemas del cierre de este camposanto es que alberga el único crematorio de toda la isla. Su cierre no hace sino dificultar el proceso de incineración a las familias, que se ven obligadas a optar por trasladar a los difuntos a la isla de Tenerife.
Esto supone en muchas ocasiones que al dolor se sume un "importante desembolso" que no siempre es posible asumir si no está incluido en el seguro, ha explicado el párroco de Las Manchas, Alberto Hernández. Ante esto, ha subrayado la necesidad de reclamar alternativas ante esta única incineradora: "Es un buen momento para reclamar que no es suficiente".