Montero defiende unos Presupuestos "justos" que piensan en las "clases medias" y son un "antídoto" contra los populismos

• El proyecto de Presupuestos afronta su primer escollo parlamentario con el debate de las siete enmiendas a la totalidad
• Superarán previsiblemente la votación este jueves con el apoyo de los socios del Gobierno y seguirán su tramitación

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero durante su intervención en el Congreso este miércoles

La ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, ha defendido este miércoles en el Congreso de los Diputados el proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2022, unas cuentas públicas "justas" que tienen como objetivo "dejar atrás la crisis" provocada tras el golpe de la pandemia, poniendo "en el centro a las clases medias y trabajadoras", y que sirven a su vez de "antídoto" contra los populismos.

La intervención de Montero abre el primer debate parlamentario sobre las cuentas anuales tras la presentación de siete enmiendas a la totalidad por PP, Vox, Ciudadanos, Junts, la CUP, Foro Asturias y Coalición Canaria. No obstante, los Presupuestos para 2022 previsiblemente saldrán adelante, después de que el Gobierno haya cerrado acuerdos con ERC y el PNV, y tenga también comprometido en este primer examen el voto de EH-Bildu y el PDeCAT, a los que se sumarían Más País-Equo, el BNG, Compromis, Nueva Canarias, el PRC y Teruel Existe.

En su intervención, la ministra ha destacado el carácter social de los Presupuestos, que aumentan la partida destinada a becas, dependencia y favorecen la emancipación de los jóvenes. "Queremos reforzar la clase media y trabajadora, la columna vertebral de nuestro estado, y proteger a los colectivos más vulnerables", ha apuntado Montero, quien cree que "ningún país puede progresar si permite que su clase media y trabajadora se deteriore como ocurrió en la anterior crisis financiera con el Gobierno del PP".

A su juicio, eso denota "una democracia más vulnerable ante el auge de los populismos". Y ese precisamente, ha dicho, es el fin que persiguen estas cuentas anuales: "empujar a la clase media" hacia una senda de recuperación "justa" y "servir como antídoto" contra esos populismos "que prometen soluciones sencillas a problemas complejos".

“Invertir en gasto social no es un despilfarro, sino la garantía de una sociedad justa“

La ministra ha dicho que desde el Gobierno quieren revitalizar el Estado del bienestar, que, "a pesar de estar debilitado tras años de recortes, nos ha protegido en la peor crisis que nos ha tocado vivir en las últimas décadas". Y, por ello, se llevará a cabo la mayor política de inversiones en la historia de la Democracia, gracias a la aportación de los fondos europeos, una "una oportunidad", ha dicho Montero, "que no se puede desaprovechar".

"Invertir en gasto social no es un despilfarro, sino la garantía de una sociedad justa y cohesionada", ha enfatizado la ministra, quien asegura que esto permitirá que "nuestro país gane competitividad y crezca gracias a la I+D+i y a un capital más cualificado y no a costa de los derechos laborales o de la clase trabajadora, como ocurrió en la anterior crisis". La titular de Hacienda ha añadido que los cuellos de botella en las cadenas de suministro, la escalada del precio de la electricidad y la inflación son "motivos suficientes para estar vigilantes y atentos", pero ha subrayado que "no va a frenar la intensa recuperación" de la economía española.

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Una apuesta por la descentralización y la cogobernanza

Las cuentas públicas para 2022 tampoco olvidan a las administraciones territoriales, ha destacado Montero, ya que incluyen el despliegue de una batería de medidas "para atajar desafíos como el reto demográfico o la España vaciada". Además, ha recalcado que los PGE "volverán a reforzar los recursos de las administraciones" dando solución "a la liquidación negativa o al problema del IVA que genero el PP", un partido que al frente de La Moncloa, ha dicho, "restó capacidad y autonomía a las administraciones territoriales".

Por contra, la titular de Hacienda ha destacado que el Gobierno sí cree en el modelo de organización territorial del Estado y apuesta "por la cogobernanza y por el diálogo para solucionar los problemas que están enquistados". Así, de acuerdo con la reciente sentencia del Tribunal Constitucional sobre el impuesto de la plusvalía municipal, Montero ha anunciado que el Ejecutivo aprobará cambios normativos para "corregir" este tributo, "dando seguridad a los contribuyentes y a la financiación de las entidades locales".

Carga contra la gestión del PP y las críticas de la derecha

La ministra se ha mostrado muy crítica con el principal partido de la oposición, realizando continuas alusiones a su gestión económica cuando estaba al frente del Gobierno. "La política económica del PP no sirvió para que nuestra economía fuera más robusta o estuviera mejor preparada", ha destacado Montero. En su opinión, "las políticas que se aplicaron despreciaron a la ciencia, pusieron en riesgo la sostenibilidad de las pensiones y recortaron derechos". "Tampoco aportaron soluciones al desempleo juvenil, al reto democrático o al acceso a la vivienda. Fueron políticas tan ineficaces como injustas", ha dicho.

Posteriormente, ha cargado contra el conjunto de partidos de derecha, a los cuales "no les gusta" que "todos los organismos internacionales avalen que nuestro país vaya a experimentar en 2022 uno de los crecimientos más elevados de las economías desarrolladas", ni que España haya recuperado los niveles de empleo previos a la irrupción de la pandemia. "Los datos reflejan que la recuperación es una realidad aunque le pese al PP", ha insistido.

Además, ha rechazado las acusaciones de "traición" y "chantaje" por parte de estos partidos, en referencia a los acuerdos que ha cerrado con ERC o PNV para lograr sacar adelante las cuentas públicas. Según ha defendido, el Ejecutivo tiene la obligación de trabajar "hasta la extenuación" para lograr con diálogo que salgan adelante sus iniciativas. Y ha garantizado que así van a seguir haciéndolo.

"Es más ni menos que la obligación de cualquier gobierno que quiere estabilidad, gobernabilidad y utilidad de la política. Se trata de encontrar aquello que nos une, ya conocemos lo que nos diferencia, y saber el qué y para qué aportan estas cuentas", ha argumentado, para después lamentar que desde la derecha "se insulte con ligereza y se empleen palabras como chantaje o traición, a sabiendas de que es mentira y es falso".

Reclama un debate "franco" al resto de partidos

Por todo ello, la ministra ha reclamado a los grupos parlamentarios un debate "franco" de las cuentas anuales, que "contraste ideas y propuestas desde el respeto y la educación". "A este país le sobra crispación, ruido, debate corto, sobreactuación y política de tierra quemada", ha asegurado. Y les ha emplazado al acuerdo y al diálogo, porque "ser adversario político nunca debería invalidar la búsqueda del interés general" y porque "los acuerdos logrados entre quienes pensamos distinto generan cambios profundos y duraderos y son un impulso para el bienestar el país".

La sesión se retomará a las 15:00 horas, cuando será el turno de los grupos que hayan presentado enmienda a la totalidad, de mayor a menor, con 30 minutos de intervención y cinco minutos de réplica. A todos ellos les irá contestando por separado la ministra de Hacienda. El debate se reanudará este jueves con la intervención de los grupos parlamentarios que no hayan tomado la palabra en la primera jornada, y será cerrado por la ministra. Posteriormente, se producirá la votación.