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El acogimiento familiar, una oportunidad para familias y niños: "Se necesita una mente abierta"

  • En España hay unos 17.000 niños y adolescentes que podrían ser acogidos por familias
  • Carolina, madre de dos menores, defiende la necesidad de integrar a la familia biológica

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Las mañanas de RNE con Íñigo Alfonso - El acogimiento familiar, una oportunidad para familias y niños: "Se necesita una mente abierta"

En España hay más de 17.000 niños y adolescentes que viven en centros de acogida, institucionalizados, y que podrían optar a un acogimiento familiar. Es una cifra que ha aumentado desde que comenzó la pandemia. Pese a que la Ley de Protección de la Infancia prioriza este mecanismo, aún son pocos los que optan por alguna de sus tres opciones: urgente, temporal o permanente. Todas tienen como finalidad que los menores vuelvan con sus padres biológicos, aunque no siempre es posible.

Carolina, madre de acogida: “Nos han hecho muy felices y nos han aportado un montón de satisfacciones"

Carolina es madre de acogida. Tiene un niño de 6 años y una niña de 3. Mira atrás, cuando comenzó todo en su casa, y no tiene duda: “Nos han hecho muy felices y nos han aportado un montón de satisfacciones”. Carolina cuenta que el acogimiento siempre estuvo en sus planes vitales, pero que tenía miedo. Miedo, sobre todo, a no gustarle a sus hijos: “Yo pensaba, a lo mejor no le gusto, y tenía miedo de si íbamos a ser capaces de criar. Me parecía algo dificilísimo, que lo es, pero no tanto”. Y no lo es tanto, dice, porque un niño de acogida necesita exactamente lo mismo que los demás: “Gente que se preocupe por él, que lo quiera, que lo arrope, que le bese cuando tenga una herida”.

Cómo integrar a la familia de acogida

Y, añade Carolina, estos niños también necesitan padres con una mente abierta para poder integrar en su vida a la familia biológica: “Hay que tener una mente más abierta que con la maternidad biológica. Hay que asumir que los niños tienen una vida previa en la que tú no has participado y que hay que integrar”. Construir esa relación es complicada pero, según Carolina, compatible: “Nosotros conocemos a las dos familias biológicas. Es una relación cordial, no íntima (…) Si consigues integrar a la familia biológica en tu vida, es una fantasma que no existe, porque a quien no ves, no sabes cómo es y generas dragones donde no los hay”.

"Si consigues integrar a la familia biológica en tu vida, es una fantasma que no existe"

Carolina cuenta que, cuando se le planteó, pensó que a ella le gustaría saber cómo es la persona que se encarga de sus hijos y que a ella, como madre de acogida, le apetecía saber si su hijo tiene el mismo pelo que su madre biológica o reproduce gestos de su padre.

Cifras desconocidas

María Arauz de Robles, presidenta de la Asociación Estatal de Acogimiento Familiar (ASEAF) dice que la cifra de niños con necesidad de familia ha ido creciendo y que pese a que la Ley del Protección a la Infancia apuesta por el acogimiento familiar, no es la opción mayoritaria. Cree que uno de los problemas es el desconocimiento de las cifras y las circunstancias.

Los requisitos para acoger son: garantizar que se va a cuidar al menor en un hogar estable y donde el niño tenga un espacio. Es un proceso que gestionan las CCAA y que comporta una serie de ayudas. Eso sí, María Arauz de Robles puntualiza: “No se acoge por dinero. No se debe y, además, las ayudas son escasas”. Los plazos son muy inferiores a los que se manejan en los procesos de adopción.

Los tipos de acogimiento

Hay tres tipos de acogimiento. El primero es el acogimiento de urgencia. Periodos de un máximo de seis meses en los que un menor de seis años consigue un hogar, antes de que se le proporcione una solución más duradera. Son familias que están preparadas para recibir a un niño en cualquier momento.

El acogimiento temporal es de hasta dos años, en los que se intenta que se restablezca la relación con la familia de origen.

Por último está el acogimiento permanente, donde se prevé que no será posible la vuelta con la familia: “Hablamos de situaciones graves de adicciones, malos tratos o abandono”. Este tipo de acogimiento se constituye después de pasar por los dos años de acogida temporal y cuando se agotan todas las opciones.

Hay tres tipos de acogimiento: urgente, temporal y permanente

Tanto Carolina como María van a participar esta semana en el V Congreso Interés Superior de la Infancia y la Adolescencia donde se va a analizar la situación del acogimiento en España y se va a intentar animar a las familias a que den ese paso: “Que se acerquen. Es una maternidad como cualquier otra que da mucha felicidad”.