La comunidad internacional plantea sancionar a quien boicotee las elecciones en Libia

• La conferencia internacional sobre Libia celebrada en París ha contado con representantes de un total de 25 países
• Emmanuel Macron ha buscado el apoyo internacional para lograr que Libia tenga una administración estable

La canciller alemana Angela Merkel durante la conferencia

La conferencia internacional sobre Libia celebrada este viernes ha avisado de posibles sanciones en el seno del Consejo de Seguridad contra "las personas o entidades" que entorpezcan las elecciones libias programadas para el 24 de diciembre. El encuentro se ha dado en París y ha sido impulsado por Francia y copresidido por Alemania, Italia, la ONU y la propia Libia.

La reunión, que ha contado con representantes de un total de 25 países y cinco organizaciones internacionales, ha tenido como resultado un comunicado conjunto en el que se ha advertido de que quienes "intenten obstruir, minar, manipular o falsificar el proceso electoral y la transición política deberán responder por ello". Asimismo, se ha alertado de que serán objeto de sanciones internacionales los malos tratos a los inmigrantes instalados en Libia y el tráfico de los mismos.

“Una puesta en marcha sincronizada, progresiva y equilibrada del plan de acción“

En esta tercera cumbre de alto nivel desde 2020, el presidente francés, Emmanuel Macron ha buscado movilizar a la comunidad internacional para lograr que Libia, hundido en una crisis permanente desde la caída y muerte del dictador Muamar Gadafi en 2011, tenga por fin una administración estable. Por ello, los asistentes se han comprometido a impulsar "una puesta en marcha sincronizada, progresiva y equilibrada del plan de acción" de retirada de mercenarios y combatientes extranjeros, a los que se vinculan a Rusia y Turquía.

El controvertido requisito para los candidatos

El texto no ha hecho mención a una serie de requisitos que han creado fricciones dentro del propio país, como el que se refiere a que todos candidatos que se puedan presentar hayan dejado todas sus obligaciones tres meses antes del 24 de diciembre.

Esta condición ha abierto la posibilidad de que entre en carrera presidencial el mariscal Jalifa Hafter, un exmiembro de la cúpula golpista que elevó al poder a Gadafi, que fue reclutado por la CIA y trasladado a Estados Unidos como líder opositor en la década de los ochenta y que a su regreso se ha convertido en el hombre fuerte del país.

Diez años después de la muerte de Gadafi, Libia sigue siendo un Estado fallido

Sin embargo, el presidente francés ha manifestado optimismo. "Esta conferencia ha permitido manifestar una convergencia internacional en favor de Libia. Tenemos un marco y un calendario electoral. Tras décadas de violencia e inestabilidad, debemos seguir movilizados para velar por unas elecciones libres y transparentes", ha dicho a la prensa Macron al término del encuentro.

El pasado marzo, el parlamento libio, dividido desde 2015, otorgó un voto de confianza a un nuevo Gobierno Nacional de Unidad (GNU), fruto de un mecanismo no electo impulsado por la ONU, cerrando así un capítulo de siete años de división política y como resultado de un compromiso al que se llegó a finales de 2020, cuando se acordó convocar elecciones.

Sánchez reitera el apoyo de España al proceso de estabilziación política en Libia

España quiere ser "un socio central" en el futuro de Libia

El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha ratificado este viernes en París su apoyo al proceso de estabilización política y de seguridad de Libia y ha afirmado que España quiere ser "un socio central" en el futuro de este país. Sánchez ha respaldado de forma específica la celebración de elecciones legislativas y presidenciales en Libia, previstas inicialmente para el 24 de diciembre, pero cuya convocatoria está en duda por cuestiones políticas y logísticas.

La conferencia se ha desarrollado a puerta cerrada, pero el Gobierno español ha informado de que su presidente expuso que las reformas económicas deben complementar las reformas políticas y que se debe garantizar y salvaguardar la unidad y la independencia de las instituciones económicas, así como mejorar la prestación de servicios a los ciudadanos libios.

“Los dos últimos años muestran que Libia puede avanzar“

"Los avances de los dos últimos años muestran que Libia puede avanzar. Pero el progreso solo será posible si existe una voluntad política sostenida y la audacia de comprometerse. España quiere ser un socio central para Libia y, sin duda, puede contar con nuestro apoyo", ha recalcado el jefe del Ejecutivo español.

En concreto, España pondrá a disposición de la ONU una decena de efectivos militares y de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para participar en la misión política aprobada por el Consejo de Seguridad para supervisar el alto el fuego. Junto a ello, donará 50.000 euros para tareas de desminado y otros 100.000 euros para apoyar el proceso de celebración de elecciones.