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Coronavirus

Austria impone el confinamiento a los no vacunados contra la COVID

  • Desde este lunes solo pueden salir de sus viviendas para ir a trabajar, estudiar o ir de compras a tiendas de primera necesidad
  • Además, podrán salir a la calle para ir al médico, vacunarse o para dar un paseo

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Austria, primer país europeo en confinar a los no vacunados

El Gobierno de Austria ha decidido este domingo confinar a las personas no vacunadas a partir de la próxima medianoche ante el imparable aumento de contagios en el país, que el Gobierno atribuye al bajo porcentaje de vacunación.

"La situación es seria. La cuarta ola (de la pandemia) nos afecta plenamente. Eso se debe a la variante delta (del virus) pero también se debe a la baja cuota de vacunación", ha dicho ante la prensa el canciller federal, Alexander Schallenberg.

Un 65% de la población adulta está vacunada en Austria, con lo que el país se encuentra al final de la lista entre los países de Europa Occidental.

A partir de este lunes las personas no vacunadas y no curadas de COVID-19 sólo podrán salir de sus viviendas para ciertas actividades, como ir a trabajar, estudiar o ir de compras a tiendas de primera necesidad. Además, podrán salir a la calle para ir al médico, vacunarse o para dar un paseo.

Sin embargo, quedará prohibido ir de compras a tiendas no esenciales, acudir a restaurantes, bares, gimnasios y eventos culturales y deportivos, entre otros.

1.700 casos por 100.000 habitantes en siete días entre no vacunados

Schallenberg ha precisado que la incidencia entre las personas no vacunadas se encuentra en Austria en unos 1.700 casos por 100.000 habitantes en siete días, con fuerte tendencia al alza. Mientras, la incidencia entre las personas vacunadas se sitúa en 383 casos por 100.000 personas, con tendencia a la baja, ha añadido el canciller federal.

Por eso, ha precisado Schallenberg, el Gobierno debe proteger a las personas no vacunadas ni curadas, para reducir así los contactos sociales entre todos los sectores de la población. "El porcentaje de vacunación es vergonzosamente bajo y sin subirla no podremos salir de este círculo vicioso (de la pandemia)", ha dicho el canciller austríaco.

Schallenberg quiere que las medidas "se cumplan" y que el control "sea nítido" a través de "sanciones consistentes". El ministro del Interior, Karl Nehammer, ha anunciado en este sentido que el confinamiento estará vigilado por una estrecha red de controles pero ha garantizado que el impacto sobre los comercios será, de momento, mínimo, por mucho que la población confinada solo pueda abandonar su domicilio bajo "circunstancias excepcionales".

Las medidas anunciadas serán controladas por la Policía de forma aleatoria, con multas por incumplimiento de hasta 500 euros para los particulares y de hasta 3.600 euros para establecimientos que no cumplen las normas.

La norma será adoptada esta noche por el Parlamento para un período inicial de diez días (hasta el 24 de noviembre), con la opción de ser luego extendida, lo que requerirá una nueva votación parlamentaria.