La España Vaciada se lanza a la arena política para llevar su voz a los parlamentos
- Aspira a tener lista su plataforma antes de un posible adelanto electoral en Andalucía y Castilla y León y dice no tener ideología
- Una encuesta les otorga ya 15 escaños y los politólogos creen que, de irles bien, podrían ser tan "relevantes" como ERC o el PNV
Llevan años luchando por unas condiciones dignas de vida en una España que la política ha ido dejando “olvidada” y “abandonada” durante décadas. Es la España rural y la de las pequeñas ciudades. Esa donde la vida se hace cuesta arriba cuando uno quiere emprender, ir al médico o escolarizar a sus hijos porque los servicios básicos, muchas veces, son insuficientes. Ahora, la Coordinadora España Vaciadaha decidido dar un paso más y se está armando como plataforma electoral para los próximos comicios que estén por venir con el fin de ser un actor político determinante y luchar desde el Congreso o los parlamentos autonómicos para revertir la despoblación: “Tenemos claro lo que necesitamos y lo que nos merecemos por derecho”.
Con la posibilidad de que haya un adelanto electoral en Andalucía y otro en Castilla y León, la Coordinadora España Vaciada, conformada por unas 170 asociaciones presentes en 25 provincias y en doce comunidades autónomas, acordó en septiembre en su III Asamblea General celebrada en Priego (Cuenca) lanzar su proyecto político y tener lista su plataforma electoral a finales de año o, como tarde, a principios de 2022: “Nos estamos marcando esos plazos y queremos estar listos” para esos posibles comicios, ha dicho en TVE uno de sus coordinadores, Antonio Sanz.
No todas las asociaciones que integran la Coordinadora han secundado el dar el salto a la política, pero sí la mayoría, a la par que seguirán trabajando como movimiento social y ciudadano para luchar, reivindicar derechos, y poner la despoblación en la agenda política.
"Teruel Existe es nuestro referente"
“Teruel Existe, señala a RTVE.es Vanesa García, portavoz de Soria ¡Ya! y miembro de la Coordinadora de la España Vaciada. “Hemos visto cómo un solo diputado y dos senadores han conseguido para Teruel y para la España vaciada muchísimo más que en otros años nuestros representantes políticos. Eso nos ha dado fuerza, nos ha animado”, añade. Todo desde un movimiento, destaca, que nace de la propia ciudadanía, de gente que “no eran políticos de profesión”.
Y ya tienen una primera encuesta, la de Sociométrica para El Español, que prevé que la España vaciada pueda obtener 15 escaños en unas hipotéticas elecciones generales. “Las encuestas son claves para este tipo de formaciones que empiezan de cero, fijan expectativas, dan a conocer a la formación y hacen que la gente se pueda empezar a interesar en ellos”, subraya la politóloga y asesora en comunicación política Mireia Castelló.
“"Podrían ser tan relevantes para una investidura o unos Presupuestos como el PNV o ERC"“
El politólogo y profesor de la Universidad de Barcelona Jesús Palomar cree que, si logran una buena representación de diez, doce o quince diputados pueden “conseguir cosas” realmente importantes para sus territorios. “Si Teruel Existe ya ha conseguido algo, ahora ya podrían tener un peso mucho mayor en la política nacional, ya no serían una anécdota sino que podrían ser tan relevantes para una investidura o para unos Presupuestos como lo son el PNV o e ERC actualmente”. Además, señala que muchas de sus peticiones serían fácilmente asumibles por parte de un Gobierno: “No van a pedir un aeropuerto internacional, sino seguramente servicios muy básicos y elementales. Necesidades que, si no se han cubierto, es porque hasta ahora nadie las había pedido”.
Pero las elecciones se prevén todavía lejanas y queda mucho por hacer. Ahora, el reto principal está en escoger la forma en la que concurrirán a unos comicios: si como partido político, o como una agrupación electoral (cada asociación se presenta en su territorio con sus siglas y luego confluyen). “Estamos en ello. Acaba de empezar esa mesa a trabajar y va a valorar todas las opciones posibles y, después, cada uno eligirá. Cada uno es libre de hacer lo que considere”, expone García.
101 medidas para "cohesionar" y "vertebrar" España
Lo que sí tienen claro es su proyecto, un ‘Modelo de desarrollo de la España Vaciada’ con 101 medidas para “cohesionar” y “vertebrar” el territorio español y acabar con la despoblación. Entre ellas, proponen un Pacto de Estado contra la Despoblación y el Reequilibrio Territorial, la calificación del sector agroalimentario y forestal como estratégico, o el desarrollo de infraestructuras y carreteras.
“Se ha ido vaciando y privando de servicios e infraestructuras a una parte del territorio“
Y es que tienen claro que, si los políticos hubieran tenido en cuenta las zonas rurales y las pequeñas ciudades en sus planes de desarrollo, no haría falta su salto a la política. “Se ha intentado concentrar todos los servicios en grandes ciudades y se legisla desde esas grandes ciudades y despachos sin tener conocimiento de cómo es la realidad del mundo rural y de las pequeñas localidades”, lamenta. Como consecuencia, “se ha ido vaciando” y se ha ido “saqueando y privado de servicios e infraestructuras a una parte del territorio”.
Este "abandono" del territorio tiene sus consecuencias. García explica lo difícil de poder teletrabajar o montar una empresa cuando no hay una conexión a internet rápida. “En muchas zonas de Soria, llega muy lento o ni siquiera llega y hay zonas donde ni siquiera hay cobertura móvil, no podemos llamar”, lamenta. Hay lugares, añade, donde el centro de salud más cercano está “a 80 o 90 kilómetros” y para muchos servicios “dependes del coche particular” porque no hay suficientes transportes públicos. Por no hablar de localidades sin farmacias, cajeros o incluso cuarteles de la Guardia Civil. Y la lista prosigue con un largo etcétera.
Ante todas estas dificultades, la España vaciada cogió impulso en 2019 y alzó la voz con una gran manifestación en Madrid para la que fletaron 350 autobuses procedentes de distintos territorios. Aquella ‘Revuelta’, como la llamaron, se celebró un mes antes de las elecciones generales del 28 de abril y tuvo su eco en los discursos de los candidatos y en la campaña.
Sin ideología: "Nuestro objetivo son las personas, no la confrontación política"
Pero se quejan de que los partidos tradicionales y los generalistas no han apostado con políticas reales y suficientes para revertir la situación: “Estamos tan acostumbrados a que nos prometan cosas (...) Si nuestros políticos tomaran nuestras medidas como parte de su proyecto electoral, seríamos felices, porque no nos preocupa quién haga las cosas o quién se atribuya los méritos, sino que las cosas se hagan”, señala García.
Por ello, la aspiración que tienen es que puedan conformar un grupo parlamentario “para tener más capacidad de influencia y de decisión en los temas importantes”. Aseguran que no tienen ideología en términos de izquierda-derecha, sino que su objetivo es facilitar una investidura y “que haya un Gobierno” del color que sea: “Porque sin Gobierno, no hay presupuestos y sin Presupuestos no hay dinero”. "Esto no va de partidos ni de colores sino de la ideología común del equilibrio territorial y de revertir la despoblación. Nuestro principal objetivo son las personas, no la confrontación política", incide.
Eso sí, para apoyar esa investidura la España Vaciada asegura que “habría, por supuesto, que exigir unos mínimos, unas medidas para revertir la despoblación”. Unas medidas, añade, comunes para todas las zonas despobladas: “Lo que está claro es que no somos como los partidos nacionalistas. Nuestro objetivo es común para todo ese territorio”.
Y es que la España Vaciada abarca múltiples territorios de distintas provincias y comunidades autónomas. Uno de los datos más significativos de la despoblación que vive España es que, en 2020, el 10% de la población se repartía en el 70% del territorio, mientras que el 90% se concentraba en tan solo un 30% de la geografía.
Factores en contra: el voto "conservador", la ley lectoral y los grandes partidos
A falta, previsiblemente, de casi dos años para unas elecciones generales, es difícil prever si este proyecto político cumplirá sus objetivos o se quedará en el camino. Los politólogos consultados por RTVE.es ven el momento como una gran oportunidad, pero también tienen en cuenta varios riesgos y factores en contra. Y los dos coinciden en que la mejor fórmula para concurrir cada asociación con su marca por separado, aunque luego confluyan, para “no perder el localismo” con unas siglas estatales.
El primer reto, dice Palomar, es encontrar “unos candidatos muy locales” y que “apelen al desencanto de la gente”. Porque es difícil, dice, “romper con la dicotomía” del bipartidismo en unas provincias que reparten pocos escaños que casi siempre suelen ir a PSOE y a PP. Y es que la ley electoral (y el conocido sistema D’hont) penaliza a aquellos partidos que no quedan los primeros en las provincias que reparten menos escaños, aunque su número de votos haya sido muy elevado en las mismas. Es el lastre tradicional, por ejemplo, que tenía Izquierda Unida, que a pesar de que en el cómputo general recibiera más votos que otros partidos nacionalistas, recibía muchos menos escaños por la dispersión del voto.
De ahí que la clave sea concentrar el voto en estas provincias con una campaña “muy pegada a la gente” y al territorio y con “demandas tangibles”, coincide Castelló. Pero señala dos factores en contra: que las pequeñas localidades rurales suelen tener una población envejecida y un voto “muy conservador”, en cuanto a que suelen votar siempre al mismo partido con una “tasa de fidelidad” elevada.
Además, está el riesgo de que los partidos nacionales se “apropien” del discurso de la España vaciada y lo incorporen en sus respectivas campañas, haciéndoles “sombra”. Por ello, coincide con Palomar en que la clave es tener un discurso muy “local”, que apele al “desencanto” pero que sea, sobre todo, “en positivo” y pongan en la agenda demandas “realistas y serias” de los “problemas graves” que sufren.
Por último, el tiempo (aproximadamente dos años para unas generales) puede jugar tanto a favor como en contra: “Tendrán que alargar el ‘momentum’ (y la visibilidad) favorable que tienen ahora para que no se olviden de ellos, pero puede salir bien si siguen haciendo ruido para movilizar a los territorios y son exigentes con los candidato que eligen”.
Haya éxito o no, “es interesante que aparezcan opciones participativas y políticas que surjan de la ciudadanía y que lo hagan desde una visión sin intereses partidistas, sino como un servicio a la comunidad”, concluye Palomar.