La DANA deja copiosas nevadas en Asturias y Castilla y León y provoca problemas en algunas carreteras
- La nieve ha afectado a 61 vías y puertos de montaña, según ha informado la Dirección General de Tráfico
- Se ha registrado precipitaciones fuertes o persistentes en el Cantábrico y Cataluña
El primer temporal de invierno, provocado por una DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) ha dejado este miércoles nevadas y lluvias copiosas en Asturias y el norte de Castilla y León, sobre todo en las provincias de Burgos, León, Palencia y Valladolid, causando problemas en algunas carreteras que tienden a remitir, mientras que las intensas lluvias seguirán hasta este jueves, según la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología.
Según la Dirección General de Tráfico, a las 14:00 hora peninsular, había 61 carreteras afectadas por la nieve. En la red principal los problemas están en Ávila, en la A-50, la AV-20 y la AP-51; en Burgos, en la A-231 a la altura de Melgar y en la BU-30; en Palencia en la A-67 a la altura de Villamuriel; y en Valladolid, en la A-60, la A-62 y la VA-30. En la red secundaria se han visto afectadas 46 vías y lo peor está, según la DGT, en Castilla y León, Asturias y Aragón.
Ante la copiosa nevada, la Delegación del Gobierno en Castilla y León ha activado alertas en las mesetas de Burgos, Palencia, Valladolid y la Cordillera Cantábrica palentina. También se ha activado la alerta en las mesetas de Burgos y Valladolid, han informado a Europa Press fuentes de la Delegación.
El temporal de nieve ha dificultado la circulación en Castilla y León con 18 carreteras de la red autonómica en las que se ha hecho obligatorio el uso de cadenas.
En Asturias, los puertos de Pajares y La Cubilla han registrado este miércoles un cierre parcial por el temporal. En concreto, Pajares está cortado para vehículos pesados y también permanece cerrado en el tramo entre Tuiza hasta al alto de La Cubilla. Además, otros seis puertos de montaña del Principado requieren el uso de cadenas para poder circular. Se trata de San Isidro (Aller); Leitariegos (Cangas del Narcea); Tarna (Caso); Somiedo (Somiedo); La Riera (Somiedo); y Ventana (Teverga).
Además, en el Principado, las intensas lluvias registradas en los últimos días han situado a cinco ríos en situación de alerta por posibles inundaciones y a otros tres en prealerta, según recogía la Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC) en su página web. Entre ellos, la crecida del río Piloña, un afluente del Sella, ha obligado a desalojar a más de 60 pacientes del Hospital de Arriondas ante la amenaza de inundación.
Intensas lluvias en Cataluña
Mientras, en Cataluña, este primer temporal invernal ha dejado registros superiores a los 150 litros en localidades del suroeste de la comunidad catalana. El teléfono de Emergencias 112 ha recibido hasta las 12:00 horas de este miércoles un total de 521 llamadas por el episodio de intensas lluvias. La mayoría de las llamadas (113) se han registrado en la comarca de Bajo Ebro, otras 107 llamadas se han registrado en Tarragona, y otras 59 en Barcelona, según ha informado Protección Civil.
En l'Ametlla de Mar, un posible tornado formado en la costa llegó a arrancar árboles de grandes dimensiones este martes y las fuertes lluvias obligaron a cortar varias vías, entre ellas la N-340 en Tarragona, y la T-734 en Masroig, por deslizamientos de tierras.
Es obligatorio el uso de cadenas en tres vías de Cataluña, la GI-400 en Alp, la BV-4024 en Bagà, y la BV-4243 en Castellar del Riu y se encuentra restringido el tráfico de vehículos pesados entre Planoles y Urtx.
El Observatorio del Ebro recogió este martes un total de 204 litros de agua por metro cuadrado, la mayor cantidad en Cataluña y el tercer registro de más pluviometría en los más de cien años de historia de este observatorio meteorológico, según recoge Efe. Los anteriores registros de más lluvia en un día en este observatorio, situado en Roquetes (Tarragona), fueron el 19 de septiembre de 1943, cuando se recogieron 265 litros, y del 30 de septiembre de 1901, con 224,8 litros por metro cuadrado.
Nueve comunidades en alerta
El primer temporal de la temporada, que ha dejado nevadas y precipitaciones torrenciales, comienza a remitir, aunque todavía este miércoles nueve comunidades continúan en alerta por nieve e intensas lluvias, que en Cataluña dejarán hasta 60 litros por metro cuadrado en 12 horas.
Está previsto que siga lloviendo con fuerza en puntos de las comunidades de Asturias, Islas Baleares, Cantabria y Cataluña, donde persiste el aviso amarillo (riesgo), según datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Respecto a las nevadas, Aemet ha apuntado que comenzarán poco a poco a escalar metros, y así en la cordillera Cantábrica este miércoles la cota se sitúa entre los 1.200/1.400 metros; en el Pirineo, en torno a 1,400 metros; en los sistemas Central e Ibérico y las montañas del sureste peninsular entre 800/1.000 metros y en el este de la Meseta, bajando ocasionalmente hasta los 800/900 metros.
A pesar de este ascenso de la cota, siete comunidades -Aragón, Asturias, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Cataluña, La Rioja y la Comunidad Valenciana- permanecen con nivel amarillo por espesores entre 5 y 15 centímetros.
El intenso frío de las últimas jornadas tiende a remitir con una subida de los valores en la mitad occidental peninsular, aunque en ciudades como Valencia se registra hoy un día "plenamente invernal", con una temperatura que a mediodía llegaba a los 7,7 grados, el registro más bajo en la capital desde el pasado 18 de abril.
Por capitales de provincia, Ávila y Segovia serán este miércoles las más frías con una máxima que apenas pasará de los 3 grados, seguidas de Cuenca, León y Teruel con 5 grados y de Albacete, Burgos, Ciudad Real, Huesca, Lugo, Madrid, Zaragoza y Zamora, donde se esperan entre 6 y 9 grados. Por la noche, las mínimas descenderán hasta los 2 grados bajo cero en Teruel y Soria y 0 grados en Ávila y Segovia.
A partir de este viernes, persistirán las nevadas en la cordillera Cantábrica, Pirineos y sistemas Central e Ibérico con acumulaciones significativas, además de lluvias persistentes en el Cantábrico oriental y en las Canarias, más probables en Tenerife y La Palma.