La extinción de los antiguos herbívoros provocó un aumento global de los incendios
- Es la conclusión de una nueva investigación de la Universidad de Yale publicada en la revista 'Science'
- Según los científicos, América del Sur fue la región que más especies perdió: un 83%
La extinción de especies emblemáticas herbívoras como el mamut lanudo, el bisonte gigante y los caballos antiguos hace entre 50.000 y 60.000 años desencadenó un dramático aumento de la actividad de los incendios en los pastizales del mundo, según explica un nuevo estudio dirigido por la Universidad de Yale (Estados Unidos) y publicado en la revista Science.
Los datos recopilados por los científicos de Yale han demostrado que América del Sur fue la que más especies perdió, un 83%, seguida de América del Norte (68%). Estas pérdidas fueron significativamente mayores que en Australia (44%) y en África (22%).
Utilizando los registros de carbón vegetal de 410 lugares de todo el mundo, que proporcionan un repertorio histórico de la actividad de los incendios regionales en todos los continentes, y comparándolos con los porcentajes de especies perdidas, los expertos han descubierto que la actividad de los incendios aumentó después de la extinción de los megagraseros.
En los continentes que perdieron más herbívoros se produjo un mayor aumento de la extensión de los incendios, mientras que en los continentes con menores tasas de extinción, en Australia y África, apenas hubo cambios en la actividad de los incendios de pastizales.
"Estas extinciones provocaron una cascada de consecuencias"
La extinción generalizada de los megaherbívoros tuvo un gran impacto en los ecosistemas, desde el colapso de los depredadores hasta la pérdida de los árboles frutales que antes dependían de los herbívoros para su dispersión. "Estas extinciones provocaron una cascada de consecuencias", explica Allison Karp, asociada postdoctoral del Departamento de Ecología y Biología Evolutiva de Yale y autora del artículo.
Por ello, "estudiar estos efectos nos ayuda a entender cómo los herbívoros dan forma a la ecología global en la actualidad", agrega la científica. Junto a Carla Staver, profesora asociada de ecología y biología evolutiva en la Facultad de Artes y Ciencias de Yale, Karp ha descubierto que los incendios aumentaron sobre todo en las praderas, específicamente debido a la acumulación de hierba seca, hojas o madera.
Sin embargo, muchas especies de exploradores antiguos como los mastodontes, los diprotodontes y los perezosos gigantes, que se alimentaban de arbustos y árboles en zonas boscosas, también se extinguieron durante el mismo periodo, pero sus pérdidas tuvieron menos impacto en los incendios de las zonas boscosas.
El pastoreo, clave en la mitigación del cambio climático
Los ecosistemas de pastizales de todo el mundo se transformaron tras la pérdida de hierbas tolerantes al pastoreo debido a la desaparición de herbívoros y al aumento de los incendios. Los nuevos pastores, incluido el ganado, acabaron adaptándose a los nuevos ecosistemas.
Por esto, los autores del nuevo estudio han señalado que la comunidad científica debería tener en cuenta el papel clave del ganado de pastoreo y los pastores silvestres en la mitigación de los incendios y el cambio climático. "Este trabajo pone de manifiesto la importancia que pueden tener los pastores a la hora de determinar la actividad de los incendios", señala Staver.
“Debemos prestar atención si queremos predecir con el futuro de los incendios“
"Debemos prestar mucha atención a estas interacciones si queremos predecir con exactitud el futuro de los incendios", concluye.