Bruselas abre el debate sobre la vacunación obligatoria
- Ursula Von der Leyen ha indicado que se necesita discusión, aunque insiste que la decisión recae sobre los Estados miembros
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La presidenta de la Comisión Europea (CE), Ursula Von der Leyen, ha señalado este martes que "hay que tener" un debate sobre la conveniencia de hacer la vacunación contra la COVID-19 dado que solo el 70 % del total de la población europea está completamente inmunizada, lo que supone en términos generales que el 66 % de los europeos están plenamente vacunados, pero que hay también un tercio, esto es 150 millones de ciudadanos de la Unión Europea, que no lo está, a pesar de que "una gran mayoría podría".
"Eso necesita discusión y un enfoque común, sin embargo, es una discusión que hay que tener", ha indicado Von der Leyen, quien ha subrayado que expresaba una "opinión personal", ya que la decisión recae "plenamente" sobre los Estados miembros.
No obstante, la exministra alemana y médica de formación ha lamentado que existan "vacunas que salvan vidas" en un contexto "horrible" de pandemia y, sin embargo, "no están siendo usadas de manera adecuada en todas partes".
Algunos países imponen sanciones a los no vacunados
Algunos países sí que han impuesto la vacunación obligatoria y sanciones a los que no se vacunen. Grecia ha anunciado que los mayores de 60 años tendrán que vacunarse, so pena de 100 euros, y Austria castigará a quienes no acepten el fármaco con 7.200 euros a partir del próximo febrero.
Mientras, el debate coge vuelo también en otros Estados miembros, como por ejemplo Alemania, donde el aspirante a la Cancillería alemana, el socialdemócrata Olaf Scholz, defiende la vacunación obligatoria. "Si estuviéramos sobre el 80 % de población inmunizada no tendríamos que recurrir a ello", señaló ante la pregunta de si con ello incumplía la promesa de que la vacunación en Alemania sería siempre voluntaria.
Además, los "Länder" alemanes apremian a la canciller saliente, Angela Merkel, y al aspirante a sucederla a adoptar "medidas de alcance y aplicación inmediata" para contener la cuarta ola de la pandemia.
También Israel, donde el coordinador del COVID-19, Salman Zarka, ha declarado que el país debería plantearse la posibilidad de obligar a su población a vacunarse, aunque ha matizado que es su opinión personal y no refleja la posición del Ministerio de Sanidad israelí.
Reforzar la campaña de vacunación
El Ejecutivo comunitario llama a continuar con las campañas de vacunación y agilizar la inoculación de la dosis de refuerzo a toda la población vacunada, algo que Von der Leyen ha manifestado que está asegurado con los 360 millones de dosis de vacunas de ARN mensajero de que dispondrá la UE de aquí a finales del primer trimestre de 2022.
"La vacunación completa y las dosis de refuerzo proporcionan la protección más fuerte contra la Covid que tenemos ahora mismo", ha alertado Von der Leyen, quien también ha pedido no relajar las medidas de prevención como son el uso de la mascarilla, la higiene de manos y la distancia física.
Los últimos contratos de compra negociados por Bruselas con Pfizer-BioNTech y Moderna prevén contar con vacunas suficientes para reforzar la protección de los europeos, adaptar la fórmula a las nuevas variantes como ómicron y producir suero también para inmunizar a los menores.
En este sentido, la Comisión ha adelantado que tiene el compromiso de Pfizer de que su vacuna recientemente aprobada para menores de entre 5 y 12 años estará ya disponible en la UE el próximo 13 de diciembre.
Preocupación por la nueva variante ómicron
La presidenta de la Comisión junto a la comisaria de Salud europea, Stella Kyriakides, han advertido de que la variante ómicron preocupa seriamente a la UE por su alto número de mutaciones, pese a no tener aún toda la información de los expertos respecto a su capacidad de propagación y virulencia.
Von der Leyen ha estimado que serán necesarias entre dos o tres semanas para tener datos más claros y ha recalcado la necesidad de actuar rápido para evitar que la UE se convierta en un "foco" de la variante, en especial reforzando el rastreo para aislar los casos y trabajando en la secuenciación.
Sudáfrica fue el primer país que dio la voz de alarma sobre la variante de la que notificó los primeros casos el pasado 24 noviembre, llevando a la UE a cerrar su frontera exterior a los vuelos de siete países del sur de África.
Sin embargo, Países Bajos informó este martes de que hubo al menos dos casos en su territorio días antes, el pasado 19 de noviembre, y el Centro Europeo de Control y Prevención de Enfermedades (ECDC) cuenta al menos 44 pacientes con esta variante en la UE y países asociados.