Ochenta años de Pearl Harbor, el ataque que desencadenó la entrada de EE.UU. en la II Guerra Mundial
- RTVE habla con David Russell, superviviente del ataque en el que murieron 2.403 estadounidenses
- Al día siguiente, EE.UU. entró en la II Guerra Mundial y uno de cada 10 norteamericanos se alistó en el ejército
El 7 de diciembre de 1941, hace ya 80 años, 350 aviones japoneses atacaban a las tropas estadounidenses asentadas en Pearl Harbor. Así entró Estados Unidos en la II Guerra Mundial. El suceso dejó a su paso 2.403 muertes estadounidenses, en su mayoría, de soldados. RTVE habla con David Russell, uno de los supervivientes para recordar cómo ha plasmado el séptimo arte lo que el presidente Roosevelt denominó "el día de la infamia".
La estrategia del país asiático fue hundir la flota estadounidense y bloquear su acción naval en el Pacífico. ¿El error? No calcular la respuesta de su ejército. A sus 101 años, Russell recuerda claramente aquel día. Estaba abordo del acorazado Oklahoma: "Anunciaron por el altavoz que había un ataque", explica.
Tuvo suerte, su buque estaba a punto de volcar y logró saltar a otro. Russell recuerda que vio a muchos hombres carbonizados. En total, 350 aviones japoneses que atacaban la flota del Pacífico por sorpresa y dejaron a su paso 2.403 muertes estadounidenses. EE.UU. se dio cuenta de que no era un país exento del conflicto que arrasaba medio mundo. Al día siguiente, Roosevelt señaló el acto como "el día de la infamia" y Estados Unidos entraba en la II Guerra Mundial.
A bordo del Oklahoma estaban los gemelos Blitz, de 19 años, que jamás regresaron a casa. Gracias a un programa del Pentágono, se ha identificado a muchos de los pasajeros hundidos en el buque y la familia Blitz ha podido enterrarlos ocho décadas después. Este 7 de diciembre el proyecto echa el cierre, y los últimos restos sin nombre del Oklahoma vuelven al cementerio común.
Pearl Harbor: el antes y el después
Tras aquel ataque y el mensaje oficial del presidente, se alistaron 16 millones de estadounidenses con el único objetivo de combatir en la II Guerra Mundial. En cifras de la época, uno de cada diez ciudadanos, todo un récord.
Recordar Pearl Harbor sigue avivando el patriotismo en algunos casos. Con el tiempo, la reflexión posterior al histórico ataque deja entrever cuestiones más allá de la guerra: el racismo en el ejército, que estaba segregado; la venganza contra los japoneses, muchos de los que vivían allí acabaron en campos de concentración o la forma en la que Estados Unidos puso fin a la II Guerra Mundial: con las bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki.
De la historia al cine
El séptimo arte no tardó demasiado en contar la historia de Pearl Harbor. Apenas dos años después del ataque, Michael Curtiz, director de Casablanca, hizo un musical donde el hijo de un bailarín de Broadway anima a las tropas norteamericanas con un show llamado Esto es el ejército. La millonaria recaudación se destinó a ayudar a soldados y familias.
También en 1943, John Ford transformó el bombardeo en docudrama. La pieza fue producida y luego censurada por la Marina estadounidense, que no estaba conforme con la imagen que se daba del país. El Oscar llegó más tarde, con una versión reducida que se hizo con la categoría de Mejor Corto Documental.
Aunque la obra se centró más en los amoríos del ejército que en el propio ataque japonés, fue la definitiva sobre este suceso durante años. Mutilada primero en Hollywood y luego en España, contó con un reparto estelar y se llevó ocho estatuillas. Más tarde, en 2001, llegó el film dirigido por Michael Bay, una historia de amor carísima, con 43 minutos de ataque japonés y múltiples errores históricos que no consiguieron conquistar a la crítica.