La película 'Maquis' se estrena en cines para recaudar fondos para las colas del hambre
- La película podrá verse en los cines de la Vaguada del 10 al 16 de diciembre
- Hablamos con su director, Rubén Buren, que retrata a tres generaciones de mujeres víctimas del silencio y la posguerra
Una de las películas más interesantes y comentadas de 2020 fue Maquis, de Rubén Burén, protagonizada por las madres, esposas e hijas que sufrieron esa "España dividida" de la posguerra, que se vieron obligadas a convivir independientemente del bando donde luchasen sus maridos, esposos o hijos. A causa de la pandemia se estrenó en una plataforma, pero ahora podremos verla por primera vez en cines y por una causa benéfica, ya que la recaudación se destinará a las Colas del Hambre del Barrio del Pilar y Aluche.
Rubén Burén, director de la película y bisnieto del 'Ángel Rojo', el famoso alcalde anarquista de Madrid que salvó a miles de personas de ambos bandos durante la Guerra Civil, nos comenta los detalles de esta iniciativa: "El estreno de la película será el viernes 10 de diciembre, a las 20’00h de la tarde, en los Cines de La Vaguada. Allí estaremos todo el equipo de la película y el equipo de voluntarios de las Colas del Hambre. La película se proyectará hasta el día 16, por lo que podrán ir a verla también toda esa semana y aportar también productos a las colas. Maquis ha renunciado a cualquier ingreso de taquilla, destinando su recaudación a las colas del hambre; además, todo el equipo de Maquis ha elegido abonar su entrada. Las entradas para el estreno se pueden comprar desde ya en este enlace: https://www.reservaentradas.com/sesiones/madrid/vaguadacines/maquis-el-silencio-coda/499/
"Si esto funciona -añade el director-, probaremos en centros culturales de los barrios, etc. Maquis se ha proyectado este año pasado en un montón de pueblos, gracias a distintas asociaciones de memoria, de mujer, colegios, universidades, etc. Ya es hora de que la gente levante la mirada de los puñeteros móviles y se baje al barrio a mirar cómo están las cosas. Nos iría mejor a todos".
Colaborando con las Colas del Hambre
El aumento del número de personas que no puede pagarse la comida es una de las causas más trágicas de la pandemia que nos asola desde hace más de dos años. Preguntamos a Rubén Buren cómo surgió la posibilidad de colaborar con las Colas del Hambre de Barrio del Pilar y Aluche: "Volver a Aluche, después de veinte años por el centro, me ha reconectado con Madrid. Somos varios los que hemos acabado hartos del Madrid impersonal en el que están convirtiendo el centro: es un escaparate para los guiris y casas para ricos. Pero detrás de todos los escaparates siempre está la trastienda, la mierda, el polvo, lo que barres para que no se vea. Eso somos los barrios".
"Cuando vi el trabajo que hacían los voluntarios con las colas -añade- les propuse hacer un documental para contar la tragedia humana de nuestros vecinos, luego pensamos en maneras alternativas de colaborar. Cuando éramos cantautores o humoristas, poníamos nuestras canciones para las huelgas, los encierros, los presos… ¿por qué no poner una película? Pensamos en centros culturales del barrio, mi amigo Manuel Sirgo me dijo que fuéramos a ver a Patricia Edeline y a Miguel Ángel Pérez de los Cines La Vaguada, en seguida se pusieron la camiseta para apoyar el proyecto. Y así surgió #maquisconlascolasdelhambre".
'Maquis' se podrá ver en pantalla grande
Esta iniciativa también supo ne la posibilidad de ver la película en pantalla grande, algo con lo que Rubén se muestra encantado: "El año pasado la estrenamos en la plataforma de cine independiente Filmin, la única que todavía protege el cine de autor. Para mí fue increíble. El cine está pasándolo muy mal y hay muchos puestos de trabajo que están peligrando, como en tantos sectores. No sé cuál es la solución, pero no debemos perder los actos sociales para compartir cultura; si no acabaremos todos desconectadamente contectados a la nada. Quizá sea la hora de reconvertir los cines en teatros, en lugares de reunión: debates, documentales, encuentros con creadores, actos para los barrios. El apoyo mutuo no es caridad, es colaboración".
Una película a la que Rubén Burén ha dedicado casi diez años de su vida: "Tengo un problema desde hace muchos años y es que nunca me paro a pensar en lo que he hecho, pienso en los proyectos que vienen. Cada vez que las productoras nos cerraban la puerta por querer trabajar con mi equipo de siempre; porque en la peli no salían hombres, ni historias de amor; o se querían meter en reformar el guion, más nos consolidábamos como grupo y más seguros estábamos de hacerla solos. Queríamos hacer un homenaje a nuestras abuelas, sin más. A todas aquellas mujeres que habían sido condenadas al silencio. A mi abuela anarquista y a la otra que dejó de ser monja para casarse con mi abuelo, a las dos".
"¿Sabes lo que hemos conseguido?: que un equipo de teatreros se ponga a hacer cine -añade-. Sin Fátima Plazas, Paloma Suárez Olivera, Zaida Alonso (las protagonistas de Maquis) todo esto no hubiera sido posible, ellas son el proyecto. Luego la gente que nos ayudó con el crowdfounding y, por supuesto, Rosa Fernández Cruz e Isabel Romero de León, que desde su productora Coarte han puesto la cordura legal. Coarte es una productora pequeñita, Rosa y yo fuimos compañeros de la Resad y hemos hecho un tándem para hacer nuestras películas juntos. Ellas sí que han apostado por Maquis, respetando el proyecto y aportando muchas cosas".
Premiada en festivales internacionales
La película ha muy bien acogida e incluso premiada en varios festivales internacionales... "Hemos tenido mucha suerte -confiesa Rubén-, en un año raro hemos conseguido muchos premios, nominaciones y muchas selecciones oficiales en numerosos países. Desde Estados Unidos, Europa o Sudamérica. En general mis obras teatrales tienen mejor acogida fuera que dentro, porque la revisión de la memoria histórica que suelo proponer no contenta ni a unos ni a otros por aquí. Me siento realmente afortunado porque quieran traducir los textos o se estudie mi teatro en varias universidades, lo considero un lujo. Me he acostumbrado a vivir en segunda división en mi propio país y eso está bien".
"Cuando estrené Maquis en Buenos Aires -añade Rubén-, una señora muy mayor se quedó esperando hasta el cierre. Entró en los camerinos y me abrazó llorando durante unos minutos. Me dijo: “tu obra es sobre las mujeres de Argentina en la dictadura”. Lloramos todas un buen rato con aquella maravillosa señora. En Francia han tardado muchos años en reconocer su colaboración con Hitler y su traición a la República española. Pero, estos últimos años, han intentado subsanar la memoria de la Resistencia Francesa formada por muchos españoles antifranquistas. Aquí se sigue hablando del maquis como de bandoleros, algunos que se echaron al monte lo fueron, pero en su amplia mayoría fueron idealistas que intentaron luchar contra el horror de la represión franquista".
"En Aluche y Carabanchel hay muchas cosas que contar"
Preguntamos a Rubén si el cine debería tener ese carácter social de Maquis. "No lo sé. Deberían existir muchos tipos de cine: en el arco que hay entre el arte y el entretenimiento. Si educamos audiovisualmente a los chavales solo con Marvel se van a volver ignorantes, solo consumidores pasivos. Es sintomático que mucha gente califique de “aburrimiento” cualquier contenido cultural en el que tengas que tomar partido: pensar, reflexionar. Los fondos de inversión han comprado las productoras y les da igual hacer churros que películas, si esto no les funciona harán zapatillas en Indonesia o comprarán todos los pisos de Madrid para manejar los alquileres. Es la perversión de los inversores, que son una lacra".
"En la universidad siempre animo a los chavales a que cojan una cámara, un micrófono, y cuenten sus historias -añade-. Nunca antes hemos tenido tanta facilidad técnica para hacer cine, pero piensan en el beneficio inmediato y en ser famosos saliendo en TikTok. Hay una extraña sensación de prisa por nada. Hay que volver a la figura de los ateneos libertarios, aunque de otra forma, o a esas estructuras en las que las personas su unían para construirse un pensamiento, no solo político, sino vecinal. En Aluche y Carabanchel hay muchas cosas que contar, tenemos muchos problemas y muchas cosas maravillosas, pero nadie las va a contar por nosotros. La movida y esas cosas de pijos aquí nunca llegaron, aquí éramos de Rosendo, Asfalto, Barón Rojo y Triana".
Como Ruben también es profesor, le preguntamos qué cree que saben los chavales sobre la Guerra Civil y si al olvidar la guerra Civil corremos el riesgo de que se repita. "Los medios de comunicación de gran alcance sois el problema, muchas veces. Vende más el conflicto que la pacificación. Aburre leer la prensa y ver los telediarios y ni te digo ya a los tertulianos. Hay mucho mito, en la izquierda y en la derecha. Hablan de política y de historia sin manejar datos y eso es un peligro para la inteligencia. ¿Repetir? No podemos repetir lo que no conocemos. La película de Maquis creo que está en otro lado, no suele gustar a los que se sienten dueños de la razón histórica. Los chavales están hartos de que los manipulen, quieren curro y no tener que emigrar para tener futuro. No saben quién fue José Antonio, ni Durruti, y no les preocupa. Apoyar la maternidad, evitar el centralismo y la España vaciada, los contratos precarios, los días de indemnización por despido, eso me preocupa más que la Guerra Incivil. Es la precarización, el paro y la ignorancia lo que eleva a los populismos.
Colaborar con las Colas del Hambre aunque no veáis la película
Rubén nos explica qué organizaciones colaboran con esta iniciativa. "Son varias asociaciones: la Red de Apoyo Mutuo y la Asociación de Vecinos de Aluche, y, por otro lado, la Asociación vecinal La Flor y La Piluka del Barrio del Pilar. Maquis no se va a llevar nada, de hecho, hemos comprado todos nuestras entradas. Lo que se recaude se repartirá a partes iguales entre las asociaciones y los Cines de La Vaguada también va a hacer una generosa aportación a través de Patricia Edeline, la directora de las salas".
Y para los que no podáis ir al cine, Rubén nos comenta como se puede colaborar con las Colas del Hambre: "Si la gente no puede, o no quiere, venir al cine, pero le apetece ayudar, hemos habilitado una fila cero, que es una manera de aportar a las Colas Del Hambre. El número de cuenta de la fila cero (IBAN: ES7001280056540100055235) se acaba de abrir y se cerrará el 31 de enero, con el consenso de las asociaciones, la productora de la película y la dirección del cine de La Vaguada. El concepto de las aportaciones debe ser: #maquisconlascolasdelhambre. Cuando se cierre todas las partes tendrán el pliego de movimientos de la cuenta".
También se pude donar comida y productos básicos: "Respecto a los productos que necesitamos son, entre otros: aceite, Arroz, Gel y Champú, Harina, Latas de conserva (atún, sardinas), Leche Entera, Lejía y productos básicos de limpieza, Lentejas y legumbres, Pañales tallas 4, 5 y 6, Pasta de dientes, Potitos, Sal, etc. Se podrán dejar en el mismo cine los días de proyección, y serán recogidos por los voluntarios de las asociaciones. Sería muy interesante que, además de comprar la entrada, llevásemos todos algún producto de los que se detallan en la lista. Si alguien tiene dudas o quiere más información, puede escribir a maquisconlascolasdelhambre@gmail.com".
En cuanto a Rubén, tras diez años con Maquis, le preguntamos si tiene algún nuevo proyecto: "Bueno, siempre estoy metido en varios proyectos a la vez, van saliendo unos y a otros les cuesta más: novelas, pelis, teatro, música... Además de sacar todo el tiempo que puedo para mi hija Candela, estamos embarcados en una película sobre las mujeres agricultoras en la España vaciada. Presentando Maquis en Jaén, conocimos a Rocío y Charles que están intentando cambiar la perspectiva del cultivo y el oleoturismo del aceite con su Finca El Trueno en Arbuniel (Jaén). Estábamos buscando lugar para adaptar una de mis obras de teatro y saltó la chispa entre nosotros. Los del cine indie necesitamos gente tan loca como nosotros, si no es imposible. Así que a Jaén iremos a hacer la próxima peli…"