Gobierno, patronal y sindicatos se reunirán a diario a partir del lunes para cerrar la reforma laboral
- Según los sindicatos, el encuentro de este viernes, que ha durado cuatro horas, ha concluido "sin avances significativos"
- El Ejecutivo propone limitar los contratos interinos a 90 días para cubrir una vacante, que deberá dar lugar a un contrato indefinido
El Gobierno, los sindicatos y la patronal se reunirán a diario a partir del lunes para tratar de alcanzar un acuerdo tripartito y aprobar la reforma laboral antes de final de año, tal como ha prometido el Ejecutivo a Bruselas y con el fin de que llegue una nueva partida de 12.000 millones de euros de los fondos europeos.
Así lo han señalado fuentes sindicales tras la negociación de este viernes, que ha durado unas cuatro horas, si bien ha concluido "sin avances significativos". El Ministerio de Trabajo, por su parte, ha asegurado que en el encuentro de este viernes han seguido abordando la temporalidad, los fijos discontinuos y aspectos de la negociación colectiva, en una negociación que "avanza de manera positiva en la redacción del texto".
Se trata del segundo encuentro de la semana, ya que la mesa también negoció el martes, por videoconferencia. En esa ocasión, el Ejecutivo llevó a las partes una nueva propuesta en la que mantenía los límites a la contratación temporal, pero establecía topes por días y no por número de trabajadores en relación al tamaño de la empresa, como había propuesto hasta entonces.
Los negociadores comenzaron a abordar los cambios normativos el pasado 17 de marzo y, a medida que se acercaba la fecha límite, empezaron a intensificar sus reuniones, que pasaron de dos a tres citas semanales. A partir del lunes, el Gobierno, los sindicatos y la patronal se sentarán a negociar a diario.
El objetivo es que la reforma esté aprobada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) antes del 31 de diciembre. Fuentes del Ministerio de Asuntos Económicos han señalado a RTVE que los plazos se cumplirán y que están trabajando para que sea un acuerdo a tres bandas. De ello depende que llegue una nueva partida de 12.000 millones de euros de los fondos europeos, que se sumará a la autorizada la pasada semana por valor de 10.000 millones.
Unos plazos "indicativos", según la Comisión
Este mismo viernes la Comisión Europea ha concedido que el calendario pactado con España para la reforma laboral sea "indicativo". "Animamos a las autoridades españolas a respetar el plazo previsto y aprobar la reforma del mercado laboral en el cuarto trimestre de este año, conforme a los compromisos enunciados en la decisión de ejecución del Consejo", ha dicho en una rueda de prensa en Bruselas una de las portavoces comunitarias, Arianna Podestà.
Los plazos, no obstante, "son indicativos", ha añadido Podestà, sin dejar de recalcar que es "importante" que todos los Estados miembros hagan "todo lo posible" para garantizar la puesta en práctica "en tiempo útil" de las reformas y las inversiones a las que se han comprometido.
La temporalidad, uno de los principales escollos
En la última reunión, el Gobierno ha propuesto que las empresas puedan contratar interinos durante un máximo de 90 días para cubrir una vacante, que deberá dar lugar a un contrato indefinido, según han informado los sindicatos.
La contratación temporal es uno de los principales escollos de esta negociación, con diferentes redacciones que han pasado por el texto con el objetivo de limitar el uso del contrato temporal, bien limitando al 15 % el porcentaje de eventuales sobre la plantilla total o estableciendo cuotas según el tamaño de la empresa. La última propuesta del Gobierno limitaba esos contratos a unos 90 días al año, para circunstancias muy concretas.
La CEOE, que aún no se ha pronunciado públicamente sobre este nuevo planteamiento, rechazó la pasada semana la limitación del número de trabajadores temporales en relación al total de la plantilla y, en su lugar, abogó por mantener la legislación actual y la causalidad tradicional. Los empresarios defienden un único contrato con seis causas de producción y cuatro causas de sustitución, como son la reserva del puesto de trabajo, las vacaciones, la reducción de jornada y la cobertura de vacante.
Precisamente la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, reconocía este jueves que la "gran complejidad" de la reforma laboral está en la temporalidad y apuntó que se trabaja para dar salida a un modelo de contrato para "tareas ocasionales concretas". "Somos conscientes de que hay tareas ocasionales, puntuales que requieren otra actuación y también vamos a darle una salida jurídica", dijo la vicepresidenta, al tiempo que dejó claro que el "contrato ordinario tiene que ser el estable".