Semana negra para Boris Johnson: su popularidad se hunde tras los escándalos de las fiestas en Downing Street
- Según una nueva encuesta, los conservadores han bajado tres puntos desde el 2 de diciembre, hasta el 33%
- Johnson ha enfrentado a un aluvión de críticas desde la revelación de una fiesta en Downing Street en diciembre de 2020
El primer ministro británico, Boris Johnson, va camino de cerrar una semana negra en la que su popularidad se ha hundido tras los escándalos de las fiestas privadas en pleno confinamiento. Según una encuesta de YouGov publicada este viernes, dos tercios de los británicos (66%) tienen ahora una opinión desfavorable de él. Además, los conservadores han bajado tres puntos desde el 2 de diciembre, hasta el 33%, mientras que los laboristas han subido cuatro puntos porcentuales, hasta el 37%.
Johnson, que obtuvo una aplastante victoria en las elecciones de 2019, se ha enfrentado a un aluvión de críticas desde que salió a la luz un vídeo que mostraba a su personal riendo y bromeando sobre una fiesta en Downing Street durante el 18 de diciembre de 2020, cuando tales reuniones estaban prohibidas. Pero este no es el único hecho en el que se ha visto envuelto.
En los últimos meses, se ha cuestionado su implicación en un escándalo de corrupción y la financiación de la remodelación de su piso en Downing Street, que costó más de 130.000 euros. Por todo ello los partidos de la oposición le han acusado de mentir y han pedido su dimisión.
Este año no habrá fiesta de Navidad en Downing Street
Debido a la indignación popular que provocó la revelación, este año no se celebrará ninguna fiesta de Navidad en Downing Street. "No hay planes para eso", ha dicho al respecto el portavoz de Johnson, quien ha hecho hincapié en que la decisión se ha tomado "tras el Plan B", una serie de restricciones anunciadas por el Gobierno este miércoles para frenar el brote de la variante ómicron.
En el momento de la reunión de Downing Street, se prohibió a los ciudadanos de todo Reino Unido encontrarse con sus familiares o amigos para la celebración de Navidad, e incluso de despedirse de sus allegados moribundos. Sin embargo, y de acuerdo con las emisoras ITV y BBC, durante la fiesta de Johnson su asesor de comunicación Jack Doyle, pronunció un discurso y entregó premios como parte de una ceremonia de broma.
Por su parte, el líder británico, que en un principio negó que se hubiesen celebrado fiestas durante el confinamiento, ha dicho este miércoles en el Parlamento que le habían asegurado que las normas del COVID no se habían infringido. No obstante, ha pedido al Secretario del Gabinete, Simon Case, que investigue los hechos.
Los conservadores planean oponerse a las nuevas normas
Para frenar la propagación de la variante ómicron, el gobierno británico ha anunciado la introducción de un pasaporte de vacunación para determinadas reuniones multitudinarias. También ha recomendado la vuelta al teletrabajo a partir del lunes y ha desaconsejado las fiestas navideñas entre compañeros, algo que le ha valido críticas incluso de los propios conservadores.
Se prevé que decenas de legisladores conservadores se opongan a las nuevas normas en una votación en el parlamento la próxima semana. "Espero que un número récord de diputados conservadores vote voten en contra de estas últimas restricciones", ha manifestado al respecto uno de ellos, John Redwood.
El Reino Unido es uno de los países más afectados por la pandemia: han muerto más de 146.000 personas y cada día se registran casi 50.000 nuevas infecciones.