Vivir más y mejor: los retos de una sociedad cada vez más longeva
- En España, casi tres millones de personas superan los 80 años
- Mantener la calidad de vida en la vejez es una de las asignaturas pendientes
María tiene 107 años. Pascuala, 101. Ambas forman parte del exclusivo club de los más que centenarios en España. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2020 eran 17.132 personas, el doble que hace una década. El 80% son mujeres. Su esperanza de vida supera en casi seis años a la de los hombres. Pascuala y María se sienten felices, aunque reconocen que los años no pasan en balde.
España es el sexto país del mundo con mayor esperanza de vida. Casi tres millones de personas tienen más de 80 años y la perspectiva es que cada vez vaya a más. María Blasco, bióloga molecular y directora del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas, se dedica a investigar las causas del envejecimiento celular. Ha publicado el libro Morir joven a los 140 años, junto con la periodista Mónica Salomone. Está convencida de que estamos en el camino de encontrar la clave de la regeneración celular infinita, que ayudaría al tratamiento de numerosas patologías.
“Cada vez que una célula se multiplica, se van acortando los telómeros, que son unas estructuras que están al final de los cromosomas. Cuando son muy cortos, se desencadena un daño irreparable que lleva a defectos en órganos y tejidos, a la aparición de enfermedades y, en última instancia, a la muerte”, ha explicado a RNE. “Una de las grandes revoluciones de la medicina en el siglo XXI será eso, intentar curar enfermedades que hoy por hoy no sabemos todavía cómo curar (...). Hay muchísima inversión en estos temas”, añade.
A esa carrera se han sumado grandes laboratorios y fortunas. Incluso hay quienes persiguen una ansiada inmortalidad. El transhumanismo es la idea de que la muerte es solo un problema técnico y, por tanto, evitable. El movimiento cuenta con adeptos multimillonarios, como Elon Musk (Tesla), Larry Page (Google) o Jeff Bezos (Amazon).
Una sociedad cada vez más longeva
Futuros y utopías aparte, la realidad actual es que vivimos en una sociedad cada vez más longeva. Y eso plantea algunos retos. Isabel fue modista de alta costura hasta los 86 años. Dejó de coser porque sufrió un accidente en su mano y, según le dijeron, era demasiado mayor para operarse. “Lo he perdido todo”, lamenta.
Josep María Pérez Torro es geriatra en la residencia El Recer de Castelldefels, donde vive Isabel. Cree que el sistema de salud no tiene en cuenta las necesidades de una población mayor cada vez más numerosa: “Tendría que haber unas unidades dedicadas exclusivamente a esas personas mayores”.
Mantener la calidad de vida en la vejez parece ser una de las asignaturas pendientes. Para Lourdes Bermejo, vicepresidenta de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología, las limitaciones derivadas de las enfermedades o las situaciones de dependencia no deberían condicionar el proyecto de vida que uno tenía diseñado y proyectado.
La realidad, confiesa Bermejo, suele ser muy distinta: con la jubilación, muchas personas, especialmente mujeres, se ven abocadas al cuidado de los nietos, porque asumen que ese es su rol de utilidad.
Inventar una nueva vejez
Ante esto, surge un movimiento de mayores que se empoderan y exigen sus derechos. Anna Freixas es psicóloga, feminista y escritora. Es autora del libro Yo, vieja, en el que reivindica la necesidad de inventar una nueva vejez. “No vamos a estar 30 años en un sillón esperando a que llegue la muerte. Tenemos que saber cómo podemos vivir de manera significativa estos 30 años de vida”, dice.
“No vamos a estar 30 años en un sillón esperando a que llegue la muerte“
Porque, con la vejez, no termina la vida útil ni productiva. Eso precisamente reclama Adolfo Ramírez, creador de la plataforma Vida Silver: “Veía las prejubilaciones y muchas personas que se iban, con mucho potencial, desaparecían y no encontraban ningún espacio donde seguir aportando”.
Precisamente, según un informe de Oxford Economics encargado por el Centro Internacional sobre el Envejecimiento (CENIE), el impacto económico generado por los mayores de 60 años es de 189.656 millones de euros, más de un 15% del PIB. Sobre esta evidencia, habla Óscar González Benito, director general de la Fundación Universidad de Salamanca y responsable del CENIE: “Tenemos que vencer ese estereotipo de los mayores como un obstáculo o un centro de coste y no como una generación de oportunidades y de ingresos”.
Para Pascuala y María, los años no pasan en balde, pero pasan. Y nuestro deber como sociedad es que los pasen con la mayor dignidad posible.