Las fiestas y las mentiras de Johnson ponen en jaque al primer ministro que se coronó con el 'Brexit'
- Dos de cada tres británicos creen que el primer ministro debe dimitir, según las encuestas
- Johnson ha pedido perdón por un evento en mayo de 2020 y asegura que pensaba que se trataba de una reunión de trabajo
El primer ministro británico, Boris Johnson, se convirtió en la estrella del Partido Conservador tras ganar las elecciones de 2019 con una mayoría que no se veía en el Reino Unido desde tiempos de Margaret Thatcher. Ahora ha empezado el año haciendo equilibrios para no dejar de ser el inquilino del número 10 de Downing Street.
Desde hace semanas han salido a la luz diversas fiestas que fueron organizadas en su residencia durante la pandemia, en un momento en el que Reino Unido estaba confinado.
A pesar de que se ha informado de diversos eventos en Downing Street, el primer ministro solo ha admitido haber estado en uno de ellos, el celebrado el 20 de mayo de 2020. Ha pedido perdón por ello y ha asegurado que pensaba que se trataba de una reunión de trabajo.
Sin embargo, las excusas de Johnson no han calado y su popularidad ha bajado hasta el punto en el que la mayoría de los británicos considera que es el momento de que presente su dimisión, según las encuestas. También lo han pedido varios parlamentarios e incluso miembros destacados de su partido.
¿Podría Boris Johnson terminar perdiendo su cargo?
La situación de Boris Johnson desde que se convirtió en el primer ministro británico ha cambiado totalmente. Después de la convocatoria de elecciones en 2019 y de la salida del Reino Unido de la Unión Europea, su posición era “relativamente fuerte”, según ha explicado a RTVE.es el profesor de Ciencias Políticas de la Universidad de Sussex, Paul Webb, quien señala que ahora la situación es completamente diferente.
“Boris Johnson está ahora en una posición muy débil. Creo que los británicos, así como muchos miembros del Partido Conservador y parlamentarios, estaban dispuestos a pasar por alto sus conocidos defectos, pero ahora la situación ha cambiado”, ha destacado Webb.
Miembros del Partido Laborista e incluso del propio partido de Johnson han pedido ahora su dimisión, entre ellos el líder conservador escocés, Douglas Ross, quien ha manifestado que la posición del primer ministro “ya no es sostenible”. “Es el primer ministro, es su Gobierno el que puso estas normas y tiene que rendir cuentas por sus acciones”, ha recalcado.
En Reino Unido, los votantes no eligen listas de partido, sino que votan a un diputado por circunscripción, según ha explicado Anna Bosch, excorresponsal de TVE en Londres. "Con lo cual, la disciplina de partido salta por los aires, porque cada uno de esos diputados es muy sensible al sentir de sus electores. Lo que se preguntan esos diputados del Partido Conservador no es si seguir prestando lealtad a su primer ministro, sino si siguen apoyando al primer ministro, ¿van a perder la próxima elección? ¿Su escaño sigue estando en peligro si siguen apoyando a Boris Johnson? Todo indica a que sí", ha añadido.
El investigador del Real Instituto Elcano y profesor en la UAM, Ignacio Molina, señala que "es muy común en Reino Unido que al primer ministro no lo derribe la oposición, sino su propio partido". "En los últimos 40 años solo dos primeros ministros, Gordon Brown y John Major, han dejado de serlo porque perdieron unas elecciones. Todos los demás, entre ellos Margaret Thatcher, Tony Blair, David Cameron y Theresa May, han dejado de ser primeros ministros porque su partido les ha forzado", ha aseverado.
Por su parte, Emilio Ordiz, experto en política europea de El Orden Mundial, ha indicado en una entrevista para el 24h que, a pesar de que “el desgaste que sufre ya es muy grande”, “tanto la oposición como los rebeldes le van a aguantar lo necesario para que cargue con la gestión de lo que quede de pandemia”. “A partir de ahí decidirán. Seguramente le queden pocos meses”, ha pronosticado.
Boris, las fiestas y sus "mentiras"
Boris Johnson está ahora en aprietos por una fiesta que celebró en pleno confinamiento. Se trata de un evento que se llevó a cabo en el jardín de Downing Street el 20 de mayo de 2020. El primer ministro ha admitido este miércoles que asistió y ha pedido perdón por ello ante la Cámara de los Comunes, aunque se ha justificado diciendo que creía “implícitamente que se trataba de un evento de trabajo”.
Sin embargo, en esa época, en cuanto a reuniones de trabajo, las normas establecían que “los trabajadores deben tratar de minimizar todas las reuniones y otros encuentros en el lugar de trabajo”.
No es la única reunión social en la que ha participado el primer ministro británico durante la pandemia, aunque sí la única en la que ha admitido que estuvo. Entre mayo y diciembre de 2020 se han destapado hasta nueve eventos organizados en la residencia del jefe de Gobierno británico.
La publicación de informaciones sobre su presencia en estos actos sociales y su poca inclinación a admitirlo ha llevado a que se le acuse de ocultar o no decir la verdad. Antes de dedicarse a la política, Boris Johnson fue periodista. Trabajó para varios medios británicos, como el ‘Daily Telegraph’ o ‘The Time’, y también fue corresponsal en Bruselas.
“Antes de llegar al Parlamento, fue despedido más de una vez como periodista por inventar fuentes para crear pruebas de las historias que contó. La gente sabe esto y ha conocido este tipo de fallos en su personalidad realmente durante mucho tiempo”, ha afirmado el profesor de la Universidad de Sussex.
¿Qué pasaría si dimite y quién le sucedería?
En el caso de que el primer ministro acabara dimitiendo, el Partido Conservador se vería obligado a elegir a un nuevo líder, quien seguramente “asumiría el cargo de primer ministro, como lo hizo Theresa May en 2019”, según ha detallado Webb.
Para el profesor de la Universidad de Sussex, el sucesor “más obvio” de Johnson sería el ministro de Finanzas, Rishi Sunak. “Los británicos creen que ha hecho un buen trabajo durante la pandemia y, aunque su popularidad ha bajado en los últimos meses, creo que está por delante de otros candidatos como la ministra de Exteriores, Elizabeth Truss, o Jeremy Hunt, exministro de Exteriores”, ha aseverado.
Según una encuesta publicada por ‘The Daily Mail’, en la que participaron 1.005 conservadores, el 46 por ciento cree que Sunak sería el político que más escaños ganaría en las próximas elecciones.
"Algo muy típico en Reino Unido es que quien sustituye a un primer ministro que se va sea un ministro. Es una democracia de gabinete y, lo más seguro, es que le sustituya alguien que está sentado en el consejo de ministros", ha recalcado el investigador del Real Instituto Elcano.
Por su parte, Emilio Ordiz asegura que es “muy difícil” seleccionar a un posible candidato para sustituir a Johnson, ya que “los que tenían fama de tomar el relevo han ido dimitiendo, como el exministro para el Brexit o su principal asesor”. Además, Ordiz destaca que “una salida de Johnson puede provocar una reconstrucción del Partido Conservador, desde el liderazgo hasta un planteamiento de su programa”.
Los británicos han tenido "suficiente Boris"
Después de que saliera a la luz la fiesta multitudinaria organizada en el jardín de la residencia del primer ministro, la consultora Savanta ComRes llevó a cabo una encuesta entre 1.040 británicos que señala que un 66% de los entrevistados considera que Johnson debe dejar su cargo. Asimismo, otro sondeo de YouGov para Sky News muestra que el 56% de los británicos cree que el primer ministro debe dimitir, mientras un 17% está indeciso.
“Creo que los británicos ya han tenido suficiente de Boris Johnson, incluso aunque entretenga de vez en cuando”, ha admitido Webb a RTVE.es. “Todos los problemas asociados con Boris Johnson como individuo están saliendo ahora a la luz y ahora la gente está mirando hacia atrás y ve que claramente miente sobre las cosas que hizo en el pasado, como con estas fiestas durante los confinamientos”, ha añadido.
El experto en política europea de El Orden Mundial considera que Johnson “está en un callejón sin salida”. “No creo que acabe la legislatura porque su popularidad está bajo mínimos. Solo un 20% de los británicos aprueba su gestión y dos de cada tres piensan que tiene que dimitir”, ha recalcado Ordiz, aseverando que “lo tiene todo en contra para seguir siendo primer ministro y líder conservador”.
Investigación por las fiestas
La funcionaria británica Sue Gray dirige una investigación interna sobre la celebración de presuntas fiestas en Downing Street en un momento en el que Reino Unido estaba sujeto a duras restricciones sociales por la pandemia.
Por su parte, Scotland Yard ha anunciado que se ha puesto en contacto con el Ejecutivo y que está estudiando abrir una investigación sobre el evento que se llevó a cabo el 20 de mayo de 2020.
“Johnson va a esperar a, de alguna manera, ser exonerado o que la investigación le haga parecer relativamente inocente y que se trató más de un malentendido que de una violación deliberada de las normas por su parte. Esperará a que ese informe salga relativamente a su favor”, ha explicado Paul Webb.