La conservadora Roberta Metsola, elegida nueva presidenta del Parlamento Europeo
- La eurodiputada maltesa era la favorita para ocupar el puesto
- Nuestra institución es única en el mundo, debemos reforzarla", ha declarado
La eurodiputada conservadora maltesa Roberta Metsola ha sido elegida este martes como nueva presidenta del Parlamento Europeo. Metsola era la favorita y tenía virtualmente ganado el voto tras anunciarse ayer un acuerdo entre los tres grandes grupos (Socialdemócratas, Conservadores y Liberales) para las prioridades legislativas hasta las próximas elecciones a la Eurocámara.
La maltesa era hasta ahora vicepresidenta y como tal se ha ocupado de cubrir el puesto de manera interina tras la muerte del anterior presidente, el italiano David Sassoli, pocos días antes de cumplir su mandato.
Metsola ha alcanzado la mayoría absoluta necesaria para hacerse con el cargo en primera ronda, con 458 votos, frente a las candidatas de Los Verdes, la sueca Alice Bah Kuhnke (101 votos), y de La Izquierda, la española Sira Rego (57).
Refuerzo de la Eurocámara
"Nuestra institución es única en el mundo, debemos reforzarla, no podemos tener miedo de hacer reformas", ha apuntado Metsola en su discurso ante la Cámara.
La maltesa ha pedido que se haga efectiva la promesa de dar a la Eurocámara el derecho a la iniciativa legislativa y transformar la institución hacia una "más moderna y eficiente". "En nuestro Parlamento es la fuerza de los argumentos la que importa, no la geografía", ha subrayado.
Mientras Kuhnke y Rego han defendido el derecho al aborto, Metsola ha mencionado la lucha por la "igualdad real" entre hombres y mujeres, al tiempo que ha prometido no "acobardarse" ante decisiones difíciles.
Abogada, conservadora y antiabortista
Metsola, de 42 años, es abogada y especializada en legislación europea. Entre 2012 y 2013 fue asesora legal de Catherine Ashton, la Alta Representante para la Política Exterior y de Seguridad Común, y en 2013 fue elegida como eurodiputada.
En sus intervenciones en la Eurocámara, Metsola ha defendido la igualdad de la mujer y los derechos de las personas LGTBIQ, pero a menudo se ha manifestado como contraria al derecho de interrupción voluntaria del embarazo.
El aborto es ilegal en Malta y en el momento de su ingreso en la UE, en 2004, el país adjuntó una cláusula al tratado de acceso que establecía que ninguna legislación europea sobre la materia sería de aplicación en Malta.
Como candidata de los 'populares' europeos, prometió fomentar la labor de control sobre la Comisión y exigir que se rindan cuentas, además de anclar a la Eurocámara en una posición ideológica centrista.