La Junta de Andalucía da el visto bueno para abrir un hotel en el Parque Natural de Cabo de Gata
- La playa de Los Genoveses es considerada de alto valor ambiental
- El proyecto queda a la espera del dictamen del Ayuntamiento de Níjar, que debe decidir si otorga la licencia de obras
La Junta de Andalucía ha dado su visto bueno a la apertura de un hotel en el Parque Natural Cabo de Gata-Níjar (Almería) al otorgar la Autorización Ambiental Unificada (AAU) a un proyecto que pretende rehabilitar un antiguo cortijo situado a menos de un kilómetro de la playa de Los Genoveses.
Con la entrega de la AAU, la Consejería de Agricultura ha dado un paso más en la tramitación medioambiental, ya que en junio de 2020 ya declaró viable la ejecución del proyecto. No obstante, desde la Junta se ha apuntado a EFE que se trata de un "dictamen provisional, no definitivo" y han subrayado que se trata de un trámite más dentro del expediente, lo que no significa la autorización por sí misma para la construcción del hotel.
Ahora, el proyecto queda a la espera del dictamen urbanístico del Ayuntamiento de Níjar. El consistorio, liderado por la socialista Esperanza Pérez, cuenta con un plazo de diez días para decidir si otorga la licencia de obras y si declara de interés público el proyecto.
El ayuntamiento pide "máximo respeto a los principios de legalidad"
Por el momento ha informado en una nota de prensa que ya ha presentado, "nuevamente", sus alegaciones y ha expresado su petición de "máximo respeto y sumisión a los principios de legalidad e igualdad" para cualquier procedimiento administrativo, presentado por cualquier ciudadano.
Ha añadido que "aun después de un año de tramitación, se sigue contemplando como privado un camino de carácter público, tal y como fue acreditado por medio de información catastral aportada por este consistorio.
Una respuesta que ha merecido la contestación de la Delegación Territorial de Desarrollo Sostenible, señalando que es el Ayuntamiento el que tiene la competencia de cumplir y hacer cumplir la "estricta legalidad" del proyecto al otorgar la correspondiente licencia de obras.
Zona del alto valor medioambiental
Esta zona, donde ya existen una antigua fábrica de cuerdas de esparto y varios edificios ligados a una explotación agrícola, es considerada de alto valor ambiental y se controla el paso de vehículos a motor durante la temporada estival para su protección.
El Gobierno andaluz recuerda que la empresa Torres y González Díaz presentó en agosto de 2016 dicha AAU y cómo tras esto la mercantil entregó un expediente para acreditar la compatibilidad urbanística "respecto de rehabilitación arquitectónica funcional para implantación de un uso turístico hotelero", según ha adelantado el periódico El País.
Así, se pidió un informe al Servicio de Bienes Culturales de la Delegación Territorial de Turismo sobre la posible afección al patrimonio histórico de la actividad proyectada, que determinó que el uso propuesto sería compatible con el régimen urbanístico del suelo de contar con informes sectoriales favorables de distintas administraciones.
En 2020, el Ayuntamiento también consideró que el uso solicitado sería "compatible" con el "régimen urbanístico del suelo" tras la modificación del proyecto inicial, que preveía dos nuevas edificaciones y dos zonas de aparcamiento.
Ahora, la Junta acuerda otorgar la AAU, pero condicionada a la autorización de reutilización de aguas depuradas para el riego de jardines y zonas verdes, así como de la declaración del proyecto como de interés público o social.
Los ecologistas rechazan el proyecto
El proyecto de hotel de cuatro estrellas, que instalará 30 habitaciones para uso turístico y creará un aparcamiento con capacidad para 70 vehículos, cuenta tanto con el rechazo de numerosas asociaciones ecologistas -han logrado recolectar casi 250.000 firmas en contra- como de grupos de la oposición en el Parlamento andaluz desde que se presentó en 2016.
Greenpeace ha lamentado que la Junta haya dado “vía libre” al proyecto y han afirmado que estos proyectos están “completamente desalineados” con las políticas andaluzas que el propio presidente andaluz, Juanma Moreno, señala como de “revolución verde”.
Según el Plan de Ordenamiento y Recursos Naturales (PORN) y el Plan Rector de Usos y Gestión (PRUG) por los que se rige el espacio natural, el lugar en el que se pretende construir el hotel está catalogado como C1.
Esto implica que en esa área se podrá destinar a usos agrícolas, actuaciones forestales y cinegenéticas, actividades e instalaciones de uso público y educación ambiental o campamentos de turismo, entre otros. Para los ecologistas, implantar el hotel supondría añadir un uso turístico continuado del territorio que no se registra específicamente en el plan.
La iniciativa es a menudo comparada con el 'Algarrobico', una inmensa construcción de 24 plantas inacabada, en pleno Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar, que lleva parada desde 2006 por motivos legales y cuya demolición costaría a los ciudadanos cerca de 300 millones de euros.