El tratado de Maastricht, impulsor de los pilares de la Unión Europea, celebra su 30 aniversario
- Sentó las bases de la unión monetaria, la política exterior y la cooperación en asuntos de justicia
- Introdujo la ciudadanía europea y reafirmó el derecho a residir libremente en los estados miembros
El Tratado de Maastricht cumple este lunes 30 años. El texto impulsó el nacimiento oficial de la Unión Europea (UE) y fijó sus tres pilares: la Unión Económica y Monetaria, la Política Exterior y de Seguridad Común (PESC) y la cooperación en asuntos de Justicia e Interior.
Fue firmado en la localidad holandesa del mismo nombre el 7 de febrero de 1992 por los entonces doce miembros europeos: Alemania, Francia, Italia, Bélgica, Holanda, Luxemburgo, Dinamarca, Irlanda, Reino Unido, Grecia, España y Portugal, y entró en vigor el 1 de noviembre de 1993.
Ha sido el tratado de mayor trascendencia para la construcción de una Europa unida después del de Roma de 1957, al sentar las bases de la Unión Política Europea (UPE) y la Unión Económica y Monetaria, cuya moneda única, el euro, entró en vigor en enero de 1999.
Se incluyeron nuevas formas de cooperación
El Tratado de Maastricht cambió el nombre de "Comunidad Económica Europea" (CEE) por el de "Comunidad Europea" (CE) e introdujo nuevas formas de cooperación entre los gobiernos en materia de Defensa, Justicia e Interior.
Maastricht dio un empujón definitivo a la Política Exterior y de Seguridad Común (PESC), actualemtne dirigida por el español Josep Borrell, alto representante de la UE para la Política Exterior.
Además, a partir de Maastricht se aceptó la incorporación de un principio solicitado por España: el de la solidaridad o cohesión social, reconocido a través de un protocolo, con fuerza vinculante.
Esto se reflejó en el importante aumento de los recursos financieros destinados a la política de cohesión y permitió crear el Fondo de Cohesión para financiar proyectos de transporte, energía y medio ambiente.
Conocido como Tratado de la Unión Europea (TUE), Maastricht introdujo además en la legislación comunitaria la noción de ciudadanía europea y reafirmó el derecho de los ciudadanos de la Unión a circular y residir libremente en el territorio de los Estados miembros.
Esta libertad, ampliamente criticada por el Reino Unido, fue uno de los motivos que llevaron a una mayoría de británicos, en junio de 2016, a votar en referéndum por su salida de la UE, algo que finalmente se hizo efectivo el 31 de diciembre de 2020, lo que dejó a la Unión con 27 miembros.
Tratados posteriores a Maastricht
El texto de Maastricht fue revisado en los posteriores tratados de Ámsterdam, Niza y Lisboa.
El Tratado de Ámsterdam, firmado en 1997 y en vigor desde 1999, modificó el de Maastricht y apmlió los derechos de ciudadanía europea y la cooperación en materia de empleo.
No obstante, para formalizar el ingreso de diez nuevos candidatos(República Checa, Hungría, Polonia, Eslovenia, Eslovaquia, Lituania, Letonia, Estonia, Chipre y Malta), se necesitó un nuevo tratado.
Para ello y tras dificultosas negociaciones, en diciembre de 2000 se aprobó el Tratado de Niza (en vigor desde 2003), que modificó el reparto de poder en las instituciones comunitarias para adaptarlas a la UE ampliada.
Además, se aprobó la Carta de Derechos Fundamentales, para intentar dotar a Europa de un Tratado Constitucional común que finalmente terminó fracasando. Este fallido intento de carta magna europea fue sustituido por el Tratado de Lisboa (en vigor desde el 1 de diciembre de 2009), que introdujo nuevas reglas de voto en la UE, reforzó los poderes del Parlamento Europeo y potenció la Política Exterior y la acción europea en los ámbitos de Justicia e Interior.