La animación valenciana, en buena forma
- 'Mironins' y 'Proceso de Selección' optan al Goya en largo y corto de animación, respectivamente
- La animación valenciana es una de las más potentes en España y vive un buen momento a pesar de la pandemia
‘Mironins’ parte de unos libros para acercar el arte de Joan Miró a los más pequeños. De las páginas saltó al formato serie y, poco después, al largometraje. "Son unas gotitas muy simples, muy sencillas, con colores primarios y cuentan los cuadros de Joan Miró, como una libre interpretación de algo que ocurre ahí dentro", afirma Álex Cervantes, director de la valenciana Hampa Studio, productora de la película, y que ganó el Goya a la mejor película de animación en 2020 por 'Buñuel en el laberinto de las Tortugas'.
Han trabajado por ordenador, utilizando la animación 2D para reinterpretar la obra de artista. “En la Fundación Joan Miró entendían que, cada vez que iba un colegio a ver los cuadros del museo, era como algo más bien aburrido porque a los niños no le interesaba”, comenta Cervantes. “Ya con los libros captaron la atención de los pequeños y con la serie lo hemos conseguido del todo".
“Los niños van a ver las exposiciones de otra manera, quieren ver más cosas“
De hecho, según Cervantes, "desde la Fundación cuentan cómo los niños van a ver (las exposiciones) de otra manera, reconocen los cuadros de la serie, 'ah mira ahí esos caballos se movían', etc., entonces se fijan más, quieren ver más cosas". Por tanto, cumplen uno de sus objetivos principales: cambiar el espíritu y la actitud de los más pequeños a la hora de acercarse a las obras de arte.
El apoyo de la familia Miró
Al contrario de lo que ocurre con otras familias de creadores, los herederos de Joan Miró se han mostrado encantados con la reinterpretación de la obra. El trabajo con artistas de primer nivel ha permitido recrear el universo del catalán con mucha fidelidad y respeto. “Nos ha dado un poco de miedo porque no sabíamos si las televisiones iban a entender este rollo tan artístico fuera de las clásicas series, con los fondos tan recargados”, reconoce Cervantes. “Lo nuestro se sale de ahí, con capítulos donde los fondos son completamente blancos, hay un solo hilo moviéndose… son auténticas locuras que únicamente permite algo que está basado en el arte”.
El director de Hampa Studio revela que la familia “nos contaba que a su abuelo (Joan Miró) le gustaba sentarse con sus nietos con hojas y (poner a) todos a dibujar, ya que entendía que el arte tiene una parte muy importante de nuestro espíritu infantil”.
'Proceso de selección', un corto diferente
En la categoría de cortometrajes, destaca una producción íntegramente valenciana: 'Proceso de Selección'. Carla Pereira, su creadora, acumula experiencia en el stop-motion, en dar vida frame a frame. Ya estuvo nominada a los Goya el año pasado con 'Metamorphosis', utilizando la misma técnica. Un trabajo físico y laborioso. "El proceso de preproducción es muy característico en el caso del stop-motion", cuenta Paloma Mora, productora de TV On Producciones. "Hay que crear los personajes, las estructuras, los diseños, los decorados, todo se construye físicamente, tanto los muñecos como los espacios. Después de todo ese trabajo, comienza el proceso de animación".
“Todo se construye físicamente, tanto los muñecos como los espacios“
El corto muestra la entrevista de trabajo de un gato, en la que tres ratones valoran sus aptitudes. La incomodidad irá creciendo con el paso de los minutos. "Lo único que tenía claro con los ratones es que quería que a simple vista fueran como una especie de engranaje que encajara perfecto", revela Carla Pereira, directora y guionista. "No me gusta dirigir el pensamiento del espectador, me gusta que a un simple golpe de vista entiendan muchas cosas sin necesidad de que lo verbalice. Por eso preferí elminar texto y que fuera todo visual, como con los colores: utilicé el esquema de colores adyacentes que se utiliza para generar un poco de discordancia".
“Me gusta el stop-motion imperfecto (...) no soporto lo pulido, lo pulcro“
Pereira, que ha trabajado con Wes Anderson entre otros, explica su predilección por la animación física. "Tengo como un fetichismo por lo matérico, lo que se puede tocar. Y me gusta el stop-motion que surge un poco imperfecto, me gustan las cosas que están un poco rotas, no me gusta lo pulido, lo pulcro, no lo soporto".
La producción animada en tiempos de pandemia
La animación no se ha visto muy afectada por la pandemia. Más bien, todo lo contratrio. Al no ser posibles muchos rodajes con actores, la animación ha copado los video clips o la publicidad. El sector, por tanto, ha aumentado su peso y, además, ha adoptado el teletrabajo con mayor efectividad que otros ámbitos de la industria. “Hemos conseguido implementar el teletrabajo a pesar de mí”, reconoce sonriendo Cervantes. No era muy amigo del trabajo a distancia porque “creo que los procesos creativos necesitan de la gente junta pero me han demostrado que no: cuando tienes un buen equipo, gente muy concienciada, la tecnología lo suple. A nosotros nos va mucho mejor, al sector de animación le va muy bien. Podemos estar todos en cualquier parte del mundo trabajando a la vez, solo hace falta que la gente sea responsable y haya mucha coordinación entre los equipos. Por lo menos en Hampa, (el teletrabajo) ha venido para quedarse”.
“El teletrabajo ha venido para quedarse“
Además, la animación valenciana sigue en buena forma. Es uno de los puntales del sector en España, y las razones son diversas. Según Paloma Mora, "en el caso de stop-motion, hay muchos animadores especialistas de esta técnica que vienen de Valencia, quizá por la tradición de las Fallas y porque hay una larguísima trayectoria de animación".
Para Álex Cervantes, en Valencia funciona muy bien la animación porque "hay escuelas muy buenas que están formando a mucha gente, hay muchas personas que ya han salido de Valencia hace años, que se han formado fuera, a Pixar, a Disney, a Sony.,.. y luego han vuelto a casa con una mochila cargada de un montón de experiencias que a los estudios valencianos nos enriquecen”.