Navarra identifica a 60 víctimas de abusos sexuales en centros religiosos y 31 presuntos pederastas
- Según el informe de la Universidad Pública de Navarra, se cometieron en 17 centros educativos o instituciones
- Los supuestos autores: un director, 21 profesores, un fraile, dos sacerdotes, tres enfermeros, tres regentes de tiendas y un portero
Un informe sobre los abusos sexuales cometidos en el seno de la Iglesia católica en la Comunidad Foral realizado por la Universidad Pública de Navarra ha identificado a 31 supuestos abusadores y 52 víctimas que podrían ser solo "la punta del iceberg". De hecho, una vez terminado el estudio varias personas más se han puesto en contacto con los investigadores para relatar su caso, por lo que tienen constancia de unos 60 afectados.
El estudio, encargado por el Gobierno, indica que los abusos identificados se cometieron en 17 centros educativos o instituciones de 10 congregaciones en 12 municipios. Sus autores fueron un director de centro, 21 profesores, un fraile, dos sacerdotes, tres enfermeros, tres regentes de tiendas de material escolar o golosinas y un portero.
Respecto a las víctimas, el informe ha identificado a 52, aunque en los últimos días otras siete se han puesto en contacto con la UPNA para ser entrevistadas, lo que refleja que son "la punta del iceberg", por lo que el consejero de Justicia, Eduardo Santos, ha apostado por una iniciativa legislativa para reconocer la condición de víctimas de manera oficial a través de una comisión en el Parlamento que pueda elaborar un informe "completo y exhaustivo que permita además poner a disposición de las víctimas la justicia restaurativa".
El 30% son considerados casos graves
El estudio ha sido presentado este viernes en una rueda de prensa en la que han participado unto a santos el investigador de la UPNA y coordinador del informe, Mikel Lizarraga Rada, y Mariví Martinikorena, víctima de abusos sexuales por parte de una monja cuando era alumna de un colegio religioso en la década de 1960.
Lizarraga ha explicado que, para elaborar el informe, se realizaron entrevistas a las víctimas que se pusieron en contacto con la UPNA a través de los canales habilitados para ello. El investigador ha precisado que los datos que se recogen en el informe "hay que entenderlos como presuntos, pues estos hechos no han sido juzgados y ha sido imposible contrastar la información obtenida de las entrevistas a las víctimas debido a la imposibilidad de acceder a los archivos eclesiásticos".
En total, se entrevistó a 43 víctimas y se identificaron otros nueve casos por otros cauces. "Una vez finalizado el informe, en la
última semana, ante el 'boom' de casos que se ha producido en prensa, siete personas se han puesto en contacto con nosotros para solicitar ser entrevistadas y poder ser incorporadas al futuro informe que será publicado, por lo que tenemos la cifra de unos 60 casos de víctimas de abusos sexuales", ha explicado.
Según ha detallado, "en torno al 30% de los casos son considerados de carácter grave (penetración, felación o sumisión química, entendida esta como el uso de algún tipo de somnífero para llevar a cabo los abusos), el 58% de los casos son abusos de carácter intermedio (tocamientos o masturbación) y un 12% son leves (besos o tocamientos leves)".
Mikel Lizarraga ha explicado que se ha identificado a "un total de 31 presuntos religiosos que cometieron abusos de carácter sexual viéndose implicados 17 centros educativos o instituciones religiosas en 12 municipios que afectan a diez congregaciones, además de al propio Arzobispado".
El Gobierno foral impulsará una ley para reconocer a las víctimas
El investigador de la UPNA señala que han encontrado "una manifiesta dificultad para identificar a las víctimas de estos delitos". "En base al conjunto de entrevistas realizadas hemos concluido que estas víctimas tienen unas características propias, que hace que les cueste enormemente significarse como tales y denunciar los abusos sufridos en el pasado. Estas víctimas tienen entre 60 y 80 años, y tras tanto tiempo transcurrido y tras tanto tiempo de silencio muchas de ellas no tienen interés en rememorar unos hechos tan dolorosos como los sufridos en su infancia", ha apuntado.
También ha señalado que varias víctimas de abusos han recibido en sus domicilios "cartas de contenido obsceno o amenazante". "Esto no contribuye a que las víctimas se animen a denunciar", ha dicho.
Santos, por su parte, ha anunciado que el Ejecutivo foral impulsará una ley para el reconocimiento de las víctimas de abusos sexuales a menores en el seno de la Iglesia Católica "con el mayor consenso posible de todos los grupos del arco parlamentario", en la que destaca la creación de una comisión de reconocimiento "que sea la que valide la condición de víctimas a todas aquellas personas que hayan sufrido abusos sexuales por parte de la Iglesia Católica cuando eran menores, basándose en el examen profesional de cada caso".
El consejero de Políticas Migratorias y Justicia ha explicado, además, que los pasos que está dando el Ejecutivo foral "tienen el objetivo de la protección de las víctimas dentro de un contexto de defensa y promoción de los derechos humanos". "El Gobierno de Navarra no actúa contra nada ni contra nadie, sino que actúa a favor de algo. No podemos afirmar que estamos hablando de muy pocos casos, estamos ante la punta del iceberg de una serie de casos que van aflorando y que seguirán apareciendo en la medida de que las víctimas tengan la valentía de ir dando pasos, pierdan el miedo y decidan hablar", ha indicado.
Una mujer que fue víctima: "Había abusos, había violaciones, había maltrato"
Santos ha afirmado, "mucho del conocimiento que pueda existir actualmente de los hechos que sucedieron están en archivos eclesiales y la colaboración de la Iglesia es imprescindible". "En países de nuestro entorno ha habido colaboración de la jerarquía eclesiástica. Queremos que haya implicación de la Iglesia Católica en la comisión que se pueda generar -en el ámbito estatal- de cara a que trabajemos en conjunto para esclarecer los hechos y reconocer a las víctimas", ha planteado.
Mariví Martinikorena, víctima de abusos sexuales cuando era alumna de un colegio religioso en la década de 1960, ha participado en la rueda de prensa como representante de las víctimas. "No me es fácil, con 73 años, empezar a hablar de lo que he vivido cuando tenía 11 años, y más cuando es una parte del tema de los abusos que no sale a la luz, que no se plantea como un problema a resolver ni que ocurren en la iglesia. No han salido en ningún sitio los abusos de niñas hechos por monjas. En los colegios de monjas había abusos, había violaciones, había maltrato, un abuso de poder inconmensurable y lo padecimos muchas niñas, porque no creo que yo sea la única", ha afirmado.
Mariví Martinikorena ha relatado lo que vivió como víctima, explicando que "te hacen tan dependiente, te anulan tanto, te eligen porque eres lo más vulnerable del mundo, porque tienes una autoestima por los suelos, porque afectivamente tienes unas carencias horribles, eres la víctima maravillosa". "Tienen derecho a hacer lo que les dé la gana contigo, maltratarte de cualquier forma. Las consecuencias de los abusos tienen una repercusión para toda la vida. Yo empecé a tener problemas de estómago, respiratorios, de tristeza, de angustia", ha afirmado.