Las aulas hospitalarias, un oasis para los niños ingresados

• Aquí reciben clases para prevenir el desfase que se produce en el caso de que su ausencia en el colegio se prolongue
• 1.400 alumnos pasaron el pasado curso por las ocho aulas que hay en distintos hospitales de la Región de Murcia

Las aulas hospitalarias son lugares acogedores donde los niños que están ingresados reciben sus clases. El equipo de Atención Educativa Hospitalaria y Domiciliaria está integrado por 10 profesores que realizan su labor en las 8 aulas que hay en La Arrixaca, Morales Messeguer, Reina Sofía y en el Santa Lucía de Cartagena, además de la atención domiciliaria.

Clases prácticas con la música y el arte como base

En estas aulas se imparte una formación individualizada, totalmente adaptada a las necesidades de cada alumno, pero a la vez es una educación compartida lo que les enriquece como alumnos y compañeros. Además, las nuevas tecnologías les abren una ventana con el exterior y la música y el arte toman especial importancia. Luisa Aguayo, que dirige el programa EmociónArte, es un firme defensor del arte en todas sus facetas para poder comunicarse: "Creemos plenamente en el poder terapéutico de la música y el arte ya que abren canales comunicativos únicos".

“Creemos plenamente en el poder terapéutico de la música y el arte “

En estas aulas también trabajan con animales. Clara Navas lidera el proyecto Dr.Guau. Utilizan animales entrenados para mejorar la calidad de vida de los pacientes. "Realizamos actividades con perros entrenados" nos comenta Navas, "los niños confían en estos animaoes y expresan sus emociones en situaciones tan delicadas como las que viven".

Mantener la rutina y perder los miedos

Cada día, si los médicos se lo permiten, acuden a las aulas hospitalarias porque mantener la rutina es importante. Los niños se aferran a la cotidianidad de su vida previa a la enfermedad. En estas aulas, además del conocimiento, encuentran un nexo de unión con el colegio y tienen la posibilidad de reincorporarse a sus estudios en condiciones similares a las de sus compañeros.

“Trabajamos en mejorar su empoderamiento“

También la labor psicológica es fundamental. Como afirma, Ana Jara, les enseñan a afrontar su enfermedad con actitud positiva, para que pierdan los miedos. "Trabajamos en mejorar su empoderamiento y les enseñamos a aminorar el estrés que les provoca el entorno hospitalario". Es un trabajo fundamental para el equilibrio emocional de los pequeños.

Más de 1.400 menores de entre 3 y 17 años de la Región de Murcia estudiaron, el pasado curso, en estas aulas hospitalarias.