El jurado declara a la madre de Desirée Leal culpable del asesinato de su hija de 7 años
- Las acusaciones reclaman para ella prisión permanente revisable
- La niña fue encontrada muerta el 3 de mayo de 2019 en la habitación en la que pernoctó con su progenitora
El jurado ha declarado este martes a Ana Sandamil, la madre de la niña Desirée Leal, culpable del asesinato de su hija, ocurrido en mayo de 2019 en su vivienda de Muimenta, cuando la pequeña contaba con solo siete años.
Lo ha hecho en base a las pruebas practicadas durante las seis jornadas que ha durado el juicio en la Audiencia Provincial de Lugo y tras una deliberación que ha durado menos de 24 horas.
Según recoge el acta de veredicto, a la que se ha dado lectura en un acto con las partes y la acusada, el jurado considera probado por unanimidad que, la madrugada del 3 de mayo, la procesada, que dormía en la misma cama que la menor, le administró un líquido con trazodona disuelta, un sedante, y, con la finalidad de acabar con su vida, la asfixió con sus manos, "ejerciendo presión en su cuello" y obstruyendo también las vías respiratorias bien con su cuerpo o bien con un objeto, como un cojín.
Por unanimidad
El tribunal popular ha considerado probado por unanimidad que la niña murió por asfixia, y ha determinado que no se ha podido probar que la enfermedad de base que padece la única sospechosa desde el inicio, un trastorno de personalidad, anulase por completo sus facultades.
También considera probado el jurado por unanimidad que la niña, en el transcurso del ataque, "llegó a despertarse" y trató de defenderse "sin posibilidades de éxito", muriendo finalmente por asfixia mecánica, según recoge el informe de autopsia.
Asimismo, también se ha considerado probado que le dio medicación para sedarla con la intención de matarla y que está solo levemente afectada su capacidad por su trastorno psiquiátrico. Tanto Fiscalía como la acusación particular y la popular piden para ella la prisión permanente revisable.
Según recoge el acta, se da por probado por unanimidad que el 26 de abril, poco antes del crimen, Ana Sandamil "indagó por Internet medios con los que podía acabar con la vida de su hija", como la estricnina --un veneno--; y que era "conocedora de la intención del padre de modificar el acuerdo de custodia" para pasar más tiempo con Desirée.
Alteración parcial
En cuanto a uno de los puntos claves en la defensa de la acusada, la posibilidad de que estuviese afectada por un grave trastorno psiquiátrico, el jurado ha considerado probado que la afectación que sufría era, en todo caso, leve.
En concreto, ocho jurados han votado a favor de que el trastorno psiquiátrico que la mujer tiene diagnosticado afectó "no de forma importante" a su capacidad de comprender el hecho o a su posibilidad de autocontrol y han rechazado por unanimidad que este trastorno psicótico anulase por completo o afectase gravemente a sus capacidades mentales.
Por unanimidad todos han concordado en que la intención del padre de la cría de modificar las medidas paterno-filiales, es decir, de solicitar la custodia compartida, influyó en el fatídico desenlace.
En este punto, la mayoría de los jurados --ocho a favor y solo uno en contra-- consideran que este cambio en la custodia fue "la razón más importante" para la ejecución del crimen.
Prisión permanente revisable
Ana Sandamil se enfrenta por estos hechos a una posible condena a prisión permanente revisable, según piden tanto Fiscalía como la acusación particular, que ejerce el padre de la niña, y la popular, de la Fundación Amigos de Galicia.
Asimismo, Fiscalía y acusación popular solicitan una indemnización de 300.000 para el padre de la pequeña, mientras que la particular pide 120.000 euros.
Al concluir la sesión de este martes, las partes se han ratificado en las peticiones. Ahora, una vez emitido el veredicto, será el tribunal el encargado de dictar sentencia.
La defensa, que no ha querido hacer en esta jornada uso de la palabra, ha pedido la libre absolución y la eximente completa, que comportaría un ingreso psiquiátrico. El jurado se ha mostrado no favorable a la concesión de indulto alguno y tampoco a la no ejecución de la pena privativa de libertad que se le imponga a esta mujer, de 45 años.
Desirée Leal, cuyo padre, José Manuel, ex de Ana Sandamil, ejerció la acusación particular en la vista, fue encontrada muerta, el 3 de mayo de 2019, en la habitación en la que pernoctó con su progenitora con señales de haber sido forzada a ingerir un líquido en el que supuestamente se había disuelto un fármaco que consumía la madre y que se llamaba Trazodona.