Dictan "detención provisional" al expresidente hondureño Juan Orlando Hernández, acusado de narcotráfico

• Un juez del Supremo de Honduras ha rehusado concederle el arresto domiciliario
• Este martes EE.UU. solicitó el arresto formal del exgobernante, que podría ser extraditado

Seguidores del expresidente de Honduras muestran pancartas de apoyo

Un juez del Supremo de Honduras ha dictado este miércoles "detención provisional" al expresidente Juan Orlando Hernández. Lo ha hecho después de su captura este martes en Tegucigalpa, ante una petición de arresto formal de EE.UU por tres cargos asociados a narcotráfico.

El exgobernante ha sido remitido de nuevo a una unidad especial de la Policía Nacional. El juez no ha considerado procedente concederle el "arresto domiciliario", como solicitaron sus abogados defensores.

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La audiencia se inició a las 10:00 hora local (16:00 GMT) y Hernández llegó a la sala sin esposas. Al mismo tiempo que ingresaba a la sede del Supremo, en las afueras activistas del conservador Partido Nacional, bajo cuya bandera Hernández llegó al poder, le expresaban su apoyo coreando consignas y mensajes en pancartas como "Juan Orlando Hernández estamos contigo" y "estamos apoyando a Juan Orlando y su familia".

No obstante, también se han podido escuchar gritos de "narcotraficante" y "asesino" por parte de activistas del ahora gobernante Partido Libertad y Refundación.

Según el portavoz del poder Judicial, Melvin Duarte, la segunda audiencia se ha fijado para el 16 de marzo y será para la "evacuación y elementos de pruebas".

Hernández podría ser extraditado

De ser extraditado, Hernández se enfrentaría tres cargos, el primero por "conspiración para importar una sustancia controlada a los Estados Unidos", con el "conocimiento de que dicha sustancia sería importada ilegalmente" en ese país", además de "usar o portar armas de fuego, o ayudar e instigar al uso, el poder y la posesión" de "ametralladoras y dispositivos destructivos".

En tercer lugar, se le acusa de una "conspiración para usar o portar armas de fuego, incluyendo ametralladoras y dispositivos destructivos (...), en apoyo de la conspiración de importación de narcóticos".

Durante sus ocho años de mandato, al menos 32 hondureños, acusados por narcotráfico por EE.UU., fueron extraditados a ese país. Varios de ellos fueron condenados, y algunos a cadena perpetua, como el exdiputado Juan Antonio "Tony" Hernández, hermano del expresidente ahora señalado.

Las denuncias contra el exgobernante también han salpicado a otros políticos hondureños. Entre ellos el expresidente Porfirio Lobo (2010-2014), de quien un hijo suyo, Fabio Porfirio Lobo, fue sentenciado en septiembre de 2017 en un tribunal federal de Nueva York a cumplir 24 años de prisión por el delito de conspirar para importar cocaína desde su país a Estados Unidos.