El Gobierno pide al PP que aclare las "dudas" sobre las acusaciones de corrupción: "Que no nos usen como coartada"
- La portavoz del Ejecutivo cree que la crisis en el Partido Popular "puede dañar la imagen de la democracia española"
- Sigue la última hora del supuesto espionaje a Ayuso en directo
El Gobierno ha pedido este viernes al Partido Popular que aclare las "dudas" sobre las acusaciones de corrupción contra la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y que no utilice al Ejecutivo "como coartada de sus líos" y que si tienen sospechas de corrupción contra la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que lo pongan en conocimiento de la Justicia.
Así lo ha afirmado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien durante una rueda de prensa en Bruselas para dar cuenta de los resultados de la cumbre UE-África, ha señalado que las acusaciones cruzadas entre Ayuso y la cúpula del PP no son "un debate edificante" y ha pedido "que se aclaren las dudas sobre las acusaciones de corrupción que se están planteando".
Sánchez, que ha descartado que vaya a aprovechar este momento para adelantar las elecciones generales, ha asegurado que no entra en "cuestiones internas de otros partidos", aunque ha insistido en que se PP despeje "cuanto antes cualquier sombra de duda y acusación de corrupción".
Según el presidente, el Gobierno de España "está en trabajar, en lo importante, en gobernar y en garantizar la estabilidad que necesita el país y en culminar la legislatura" para superar la pandemia, consolidar el crecimiento y crear empleo y ha pedido que no se utilicen "estas insinuaciones", en referencia a las afirmaciones desde Génova y la Comunidad de Madrid acerca de que Moncloa conocía la existencia del dossier sobre el hermano de Ayuso.
Para Sánchez, son afirmaciones sin "pies ni cabeza" pero que tienen un "sentido malintencionado" y se usan "para distraer la atención".
Rodríguez: "El Gobierno no tiene nada que ver"
También la portavoz del Consejo de Ministros, Isabel Rodríguez, se ha referido a la presunta irregularidad de un contrato adjudicado al entorno de Díaz Ayuso y en el que el hermano de la presidenta madrileña habría cobrado una comisión de unos 280.000 euros.
Rodríguez ha desvinculado al Ejecutivo de este asunto, después de que el jueves Ayuso señalara a la Moncloa como origen de un dossier en su contra, aunque el líder del PP, Pablo Casado, lo ha desmentido y ha afirmado que en el partido conocieron la investigación a través de otra administración involucrada.
"Que no nos usen como coartada de sus líos, el Gobierno no tiene nada que ver con esto", ha repetido en varias ocasiones Isabel Rodríguez, quien ha lamentado que el "principal partido de la oposición" se encuentre en medio "acusaciones de corrupción y espionaje" lo que, a su juicio, "puede dañar la imagen de la democracia española".
"Supongo que después de haber realizado estas manifestaciones, el señor Casado habrá ido a la Fiscalía para poner en su conocimiento estos hechos", ha dicho la portavoz del Ejecutivo, quien ha afirmado que, si el Gobierno "hubiera tenido cualquier conocimiento de alguna irregularidad con carácter delictivo", lo habría puesto en conocimiento de la Fiscalía y de la Justicia.
La portavoz del Gobierno ha afirmado que es "curioso que el argumento de autoridad que utilizan ambas partes sea la Moncloa" y ha pedido a las partes implicadas que aclaren "si hay algún hecho irregular constitutivo de delito".
Belarra: "Una cuestión gravísima"
Por su parte, la ministra de Igualdad y líder de Unidas Podemos, Ione Belarra, ha afirmado que "cualquier sospecha de corrupción es una cuestión gravísima para el Gobierno de España y ha señalado que "este tipo de casos solo perjudica a la democracia".
Mientras, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha afirmado en una entrevista en La Hora de la 1 de TVE que el Gobierno observa con "inquietud y perplejidad" la crisis en el PP porque no "proporciona estabilidad ni moderación a nuestro sistema político".
"Ahora comprendemos por qué el PP ha estado tan nervioso y tan radical en los últimos tiempos" ha dicho Planas, quien ha insistido en que le preocupa el coste que para la imagen exterior de España pueda tener este enfrentamiento interno en el principal partido de la oposición "que evidentemente afecta al sistema político español".
"Somos un país serio y nos merecemos unos partidos de Estado; nos gustaría que el PP, que también ha sido un partido de Gobierno, se comporte como un partido constitucional de Estado", ha dicho Planas.