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Crisis en Ucrania

La UE anuncia sanciones y una respuesta "firme" contra Rusia por reconocer la independencia del Donetsk y Lugansk

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Estados Unidos y la UE anuncian sanciones a Rusia por el reconocimiento de la independencia de Donetsk y Lugansk

La Unión Europea ha advertido a Moscú que responderá con "firmeza" al reconocimiento de la independencia de las regiones separatistas del este de Ucrania, que ha calificado como una "violación flagrante del derecho internacional, la integridad territorial de Ucrania y los acuerdos de Minsk".

"La UE y sus socios reaccionarán con unidad, firmeza y determinación en solidaridad con Ucrania", han escrito en sendos tuits el presidente del Consejo Europeo y de la Comisión Europea, Charles Michel y Ursula von der Leyen. Y en un comunicado conjunto han añadido: "La UE reaccionará con sanciones contra aquellos implicados en este acto ilegal".

Putin ha reconocido la independencia de las zonas prorrusas ucranianas de Donetsk y Lugansk, en un movimiento que agrava la tensión en la zona y entierra los acuerdos que pretendían pacificar el país desde 2015. Además, según explica la corresponsal de TVE en Moscú, Érika Reija, "abre la puerta a la presencia de tropas rusas en estas regiones".

Horas después, el presidente ruso no ha dudado en incrementar aún más la tensión en la zona y ha decidido desplegar militares en las dos zonas separatistas, para ejercer funciones de pacificación, según sendos decretos firmados por él mismo.

De acuerdo con los documentos, los militares rusos "garantizarán la paz" en esos territorios hasta la firma de acuerdos sobre la Amistad, la Cooperación y la Ayuda Mutua entre ambas entidades y Moscú.

Desde las Repúblicas bálticas y países como Polonia han apremiado al resto de socios europeos a tomar las "medidas más enérgicas" posibles contra Rusia y a aplicar sanciones de forma inmediata.

El alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, en una rueda de prensa al término de un Consejo de ministros de Exteriores comunitarios poco antes de conocerse la decisión de Putin, ya advirtió: "Si hay reconocimiento, pondré las sanciones sobre la mesa y los ministros decidirán".

España responderá "de manera coordinada" con sus socios

El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha condenado el reconocimiento unilateral de los territorios separatistas, "una violación de los acuerdos de Minsk y de la legalidad internacional", ha escrito en redes sociales.

España "responderá de manera coordinada junto a nuestros socios", ha añadido Sánchez.

En la misma línea, el ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, José Manuel Albares, ha censurado este reconocimiento a través de un tuit en su perfil. "El reconocimiento ruso de los territorios separatistas en el este de Ucrania es una violación flagrante de la integridad territorial de Ucrania, los acuerdos de Minsk y la legalidad internacional. Responderemos en estrecha coordinación con nuestros socios", ha informado Albares.

Francia pide una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU

Por su parte, el presidente francés, Emmanuel Macron, ha pedido una reunión urgente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y la adopción de sanciones europeas selectivas contra Rusia.

París ha denunciado la "deriva ideológica" y el "discurso paranoico" de Putin, según un comunicado del Elíseo, en el que ha concretado que las sanciones europeas irán dirigidas a entidades e individuos rusos. Francia no excluye nuevos movimientos militares por parte de Rusia.

Y el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha condenado el reconocimiento de Rusia la independencia de las autoproclamadas repúblicas separatistas y ha advertido que lo ve como un "pretexto" para invadir el este de Ucrania. "Esto socava aún más la soberanía y la integridad territorial de Ucrania, erosiona los esfuerzos hacia la resolución del conflicto y viola los Acuerdos de Minsk, de los que Rusia es parte", ha afirmado Stoltenberg en un comunicado.

En un mensaje en Twitter, el político noruego ha acusado al Kremlin de "fabricar un pretexto para invadir Ucrania de nuevo" y "echar gasolina" al conflicto al otorgar ayuda financiera y militar a los separatistas en el este de Ucrania, al tiempo que urgió a Moscú a "elegir la diplomacia".