La auditoría sobre abusos encargada por la Iglesia investigará también los casos que hayan prescrito
- En los casos prescritos desde el punto de vista civil y el canónico también se reparará a las víctimas, según la CEE
- La investigación señalará encubrimientos, si los hay, y se entregará al Parlamento, si lo pide
La auditoría independiente que la Conferencia Episcopal ha encargado al despacho de abogados Cremades & Calvo Sotelo de Madrid para investigar los abusos sexuales cometidos en el seno de la Iglesia "no se plantea límite alguno", incluso en los casos prescritos judicialmente.
Lo ha asegurado este miércoles el director de comunicación de la CEE, el sacerdote José Gabriel Vera, en una entrevista en Radio Estel, la emisora del Arzobispado de Barcelona, al ser preguntado sobre posibles reparaciones económicas a las víctimas.
El sacerdote ha explicado que "habrá que analizar cada caso y cada situación para valorar qué reparación merece la víctima" y que por eso se ha encargado la investigación a profesionales "que puedan trabajar con independencia".
No se dejarán de lado los casos prescritos
Según Vera, la auditoría se ha puesto en marcha para dar "un paso más en la lucha contra la lacra de los abusos" y es una demostración más de que la Iglesia "no se puede cansar de mostrar el dolor y la vergüenza por lo que han hecho algunos de sus miembros, que han traicionado, también, a la institución".
No obstante, desde la Conferencia Episcopal entienden que "nunca se reparará el daño causado en el corazón de las víctimas, porque es una tarea infinita", ha dicho.
En cuanto a la posibilidad de que algunos de los posibles casos a los que llegue la auditoría hayan prescrito, Vera ha asegurado que no se dejarán de lado y ha puesto como ejemplo que hay casos denunciados en las oficinas de las diócesis que han prescrito desde el punto de vista civil, pero no desde el canónico "y es a través del derecho canónico por el que se investiga".
En todo caso, si se detectaran casos que hayan prescrito en ambos ámbitos "se sigue con el acompañamiento a la víctima para buscar la reparación", ha puntualizado el director de comunicación de la CEE, que ha recordado que el derecho canónico tiene la posibilidad de levantar esta prescripción y aplicar una sentencia.
Señalará encubrimientos, si los hay, y se podrá entregar al Parlamento
Por otro lado, la auditoría incluirá los posibles encubrimientos y los resultados se pondrán a disposición de los grupos parlamentarios, si así lo solicitan.
"Si en este trabajo de acompañamiento, escucha y reparación a las víctimas se descubriera que hay personas que han encubierto abusos a víctimas en el seno de la Iglesia, será incluido en el informe en el que vamos a estar trabajando durante los próximos meses", ha declarado, por su parte, el presidente de la firma legal, Javier Cremades, en una entrevista con Europa Press.
Respecto al hecho de que la auditoría sea gratuita, el presidente de Cremades & Calvo-Sotelo ha detallado que, como abogados, tienen "un compromiso desde su creación con el asesoramiento pro bono, que viene del latín 'para el bien público'".
"Los socios de esta firma han decidido no facturar por esta investigación o forensic jurídico en este tema tan delicado y sensible para la sociedad. Esta firma tiene como propósito ayudar, acompañar y servir a las personas a través del Derecho para contribuir a una sociedad más justa, libre y segura. Creemos que ayudar en este asunto nos reconecta como abogados con nuestra vocación y con el valor de la justicia", ha subrayado.
Sobre la posibilidad de ofrecer indemnizaciones a las víctimas, Javier Cremades ha indicado que, por el momento, es "precipitado" decir a quién correspondería repararlas, si a la Iglesia o al Estado.
"En este momento todavía es un poco precipitado dar una respuesta a esta pregunta. Acabamos de comenzar con esta investigación y conforme vayamos alcanzado las primeras conclusiones, las iremos adelantando", ha concretado.
Recogerá casos denunciados por distintas vías
Este mismo martes Vera también ha reiterado que la investigación encargada por la Conferencia Episcopal Española, que algunas víctimas han cuestionado por considerarla poco independiente, sigue la línea de la que ha abierto Alemania "que mira más a las víctimas".
Por eso, ha dicho, aprovecharán todo el trabajo que durante los últimos años se han realizado desde las oficinas de las diócesis donde han recogido denuncias de víctimas de abusos y desde las que se han hecho encuentros personales con las víctimas para saber cuáles son sus necesidades.
Además, lo previsto es que la auditoría no solo recoja los casos de estas oficinas, sino "ir más allá" y conocer todos los casos que se han denunciado también por otras vías, como la judicial o la de los medios de comunicación "para poder hacer un mapa real de la situación".