El Banco Mundial prepara una ayuda de emergencia de 3.000 millones de dólares para Ucrania
- La medida comenzará con una operación para el desembolso "rápido" de 350 millones de dólares de apoyo presupuestario
- A continuación, presentará otro programa de 200 millones en materia sanitaria y educativa
El Banco Mundial (BM) ha anunciado este martes que prepara un paquete de asistencia financiera de emergencia a Ucrania ante la invasión rusa.
Así lo ha indicado el presidente del BM, David Malpass, en un comunicado conjunto con la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva.
Según la nota, la medida comenzará con una operación para el desembolso "rápido" de 350 millones de dólares de apoyo presupuestario, que será revisado por el Directorio Ejecutivo esta semana.
A continuación, el organismo presentará otro programa de 200 millones en materia sanitaria y educativa.
El BM advierte de los efectos económicos de la guerra en otros países
La entidad ha advertido también de los "significativos efectos económicos" del conflicto y las sanciones impuestas a Moscú en otros países.
Entre ellos, Malpass y Georgieva han mencionado el alza de los precios de las materias primas y el riesgo de aceleración de la inflación. "Las alteraciones en los mercados financieros continuarán empeorando si el conflicto persiste", han agregado.
Por su parte, el FMI, que ya cuenta con un programa de apoyo financiero por valor de 2.200 millones de dólares a Ucrania, trabaja en un paquete adicional para la próxima semana.
Después de meses de tensión, Rusia lanzó hace seis días una operación militar en Ucrania, que ha dejado al menos un centenar de muertos, y a la que la comunidad internacional, liderada por EE.UU. y la Unión Europea (UE), ha respondido con duras sanciones económicas a Moscú para asfixiar la economía rusa.
Más de 150.000 ucranianos han huido de Ucrania en menos de 24 horas. El número de refugiados que han entrado a alguno de los países vecinos llega ahora a los 677.000, según ha explicado este martes el alto comisionado de la ONU para los Refugiados, Filippo Grandi.