La inflación de la eurozona se dispara a un récord del 5,8% en febrero empujada por los precios de la energía
- Lituania y Estonia son los dos países en los que más se ha disparado la inflación en el último mes
- Estos últimos datos sobre la inflación de la zona euro han redoblado la presión a la que se enfrenta el Banco Central Europeo
La inflación de la eurozona se ha disparado en el último mes hasta el 5,8%, una cifra récord que se ha alcanzado por el aumento de los precios de la energía, según datos de la estimación preliminar de la oficina de estadística comunitaria Eurostat.
Pero la inflación se está expandiendo también a otras categorías de productos como los alimentos frescos, cuyos precios han crecido un 6,1 % en febrero, un punto más que en enero.
Si a los alimentos se suman el alcohol y el tabaco, la inflación del pasado mes se sitúa en el 4,1 %, un porcentaje que es seis décimas superior al del mes anterior.
En niveles inferiores, pero positivos, se encuentran los bienes industriales no energéticos y los servicios, con incrementos de sus precios del 3% y del 2,5%, respectivamente.
Estos últimos datos sobre la inflación de la zona euro han redoblado la presión a la que se enfrenta el Banco Central Europeo (BCE) desde hace meses, puesto que el mandato del instituto emisor es conseguir una inflación en el medio plazo cercana al 2 %.
La inflación ha subido siete décimas en el último mes
El dato de enero del 5,1% ya sorprendió al organismo liderado por Christine Lagarde, como ella misma reconoció en varias comparecencias en el Parlamento Europeo. El aumento de 0,7 puntos respecto al mes interior, y el estallido de la guerra en Ucrania y la previsible crisis energética no son factores externos que ayuden a conseguir el objetivo fijado a medio plazo.
“Si pusiéramos fin gradualmente a las compras de activos y subiésemos los tipos de interés ¿tendría algún efecto en los precios de la energía? No lo creo”, señaló Lagarde a principios de febrero ante la comisión de Asuntos Económicos y Monetarios de la Eurocámara.
Lagarde señaló que la zona euro no sufre actualmente de un “exceso de demanda” o de un “sobrecalentamiento” del mercado laboral que hiciera saltar las alarmas de una inflación persistentemente alta en el medio plazo, como sí ocurre en Estados Unidos.
Entre los socios de la moneda común se observan notables diferencias en su inflación de febrero, con Lituania (13,9%) y Estonia (12,4%) como únicos países que superan los dos dígitos de los doce miembros con un porcentaje superior a la media.
Por detrás se encuentran Bélgica (9,6%), Letonia (8,9%), Eslovaquia (8,2%), Luxemburgo (7,8%), España (7,5%), Países Bajos (7,2%), Eslovenia (7%), Grecia (6,3%), Italia (6,2%) y Chipre (5,9%).
Sin embargo, las dos grandes economías de la eurozona, Alemania y Francia, han registrado en febrero una inflación por debajo del promedio (del 5,5% y 4,1%), respectivamente, al igual que Finlandia y Malta (4,3%), Portugal (4,4%), Austria (5,5%) e Irlanda (5,7%).