Polonia acusa de espionaje al periodista español detenido mientras cubría la guerra en Ucrania
- El Gobierno polaco acusa a Pablo González de realizar "actividades para Rusia" aprovechando "su estatus periodístico"
- Según su abogado, Gonzalo Boye, el periodista se encuentra en prisión provisional en la cárcel de Rzeswow
Polonia ha confirmado la detención del periodista español Pablo González, al que acusa de espiar para Rusia, según un comunicado de su Gobierno, en el que señala que el periodista ha sido "identificado como un agente de la Dirección Principal de Inteligencia del Estado Mayor General de la Federación Rusa (GRU)".
La nota afirma que González "realizó actividades para Rusia mientras aprovechaba su estatus periodístico" que le permitió "moverse libremente por Europa y el mundo, incluyendo zonas afectadas por conflictos armados y áreas de tensión política".
Pablo González fue detenido en la noche del 27 al 28 de febrero en la ciudad de Przemyśl por agentes de la Agencia de Seguridad Interior, según recoge el comunicado del Ejecutivo polaco, y por decisión del tribunal, se encuentra bajo arresto por un período de tres meses, acusado de participar en las actividades de servicios de inteligencia extranjeros contra la República de Polonia, un delito penado en este pais con entre uno y diez años de prisión.
El portavoz del Gobierno polaco, Stanislaw Zaryn, ha añadido a la agencia de prensa polaca Pap, según recoge Efe, que "el detenido permaneció durante varios días en el Voivodato de Subkarpacia (provincia del Este de Polonia)", pero no ha confirmado informaciones previas acerca de que el lugar exacto donde estuvo González fue la ciudad de Rzeszów (este).
Zaryn ha señalado que durante su estancia en Polonia, el periodista "obtuvo información cuyo uso por parte de los servicios secretos rusos podría tener un impacto negativo directo en la seguridad y defensa interna y externa de nuestro país". "Se han obtenido pruebas exhaustivas con el detenido, que actualmente se está sometiendo a un análisis detallado", afirma también el portavoz.
La comandancia regional de Subcarpacia ha asegurado, en un comunicado recogido por Efe, que "el 1 de marzo, la comandancia de Rzeszów acusó formalmente de espionaje al detenido y que, a petición del fiscal y debido a la necesidad de garantizar el buen desarrollo del proceso, el temor a la fuga y el fraude", el tribunal decidió mantener durante tres meses el arresto en prisión de Pablo González.
Su abogado pide "protección diplomática" y denuncia su "incomunicación"
El abogado del periodista, Gonzalo Boye, asegura a través de un tuit que han sido informados por el Consulado de España en Polonia, de que su detención se ha producido por un presunto delito de espionaje recogido en el artículo 130.1 del Código Penal polaco. El periodista, según Boye, se encuentra en prisión provisional en la cárcel de Rzeswow.
Boye pidió este miércoles a la cónsul de España en Polonia que le conceda al periodista "protección diplomática a la mayor brevedad posible" para favorecer su puesta en libertad, "con él sano".
González, según el letrado, se encontraba en situación de incomunicación, sin poder contactar con él ni con su familia, y siendo interrogado sin asistencia de abogado, lo que solo "puede tener como finalidad la de doblegar su voluntad con fines desconocidos" hasta el momento, ya que no se le facilita ninguna información.
Desde el Gobierno español, tanto el presidente, Pedro Sánchez, como el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, han afirmado estos días que España dará protección consular al periodista. Albares aseguraba este jueves en La Sexta, que se iban a poner "en contacto con él" para "ofrecerle asistencia consular y asistirle en todo, como lo hacemos con todos los españoles que están detenidos".
Detención del periodista mientras cubría la guerra en Ucrania
El periodista fue detenido el pasado 28 de febrero mientras se encontraba dando cobertura informativa a la guerra en Ucrania y sin conocerse, en un primer momento, los motivos de la detención.
Reporteros Sin Fronteras (RSF) ha solicitado su "inmediata" puesta en libertad y ha pedido "explicaciones a las autoridades polacas sobre las circunstancias de este atropello a la libertad para informar" del periodista.
También el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) ha exigido la puesta en libertad inmediata de González a través de un comunicado de Attila Mong, representante del Comité en Europa.
La Asociación de la Prensa de Madrid (APM) ha pedido, por su parte, que se "aclaren la circunstancias" de la detención y ha señalado al Gobierno polaco para que responda "a la solicitud de información hecha por las autoridades españolas".
Según ha podido comprobar Efe, el periodista Pablo González estuvo en la estación de tren de Przemysl (este) la tarde del 26 de febrero, el día anterior a su detención en un hotel de esa ciudad, y no en Rzeszów, como aseguran otras fuentes.
Los requerimientos de información por parte de Efe a la policía local de Przemysl y Rzeszów, así como la regional de Subcarpacia, no han obtenido respuesta.