El descubridor de ómicron: "No podemos decir aún que la COVID vaya a ser una gripe"

• Tulio de Oliveira, científico descubridor de ómicron, en Las Mañanas de RNE
• Varias empresas locales han formado una alianza con la OMS para diseñar y producir vacunas africanas
• África importa el 99% de las vacunas que inyecta cada año

Las Mañanas de RNE con Íñigo Alfonso - Descubridor de Ómicron: "Que un virus sea endémico no significa que no sea peligroso"

La pandemia de la Covid-19 dio un vuelco el pasado 25 de noviembre. Desde un laboratorio situado en las afueras de Ciudad del Cabo, el equipo del CERI de la Universidad de Stellenbosch anunciaba al mundo que habían identificado una nueva variante mucho transmisible y que iba a provocar una explosión de contagios a nivel mundial. Desde entonces a nadie se le olvida la palabra ómicron y los efectos que ha tenido en esta revolución que ha dejado el SARS Cov-2 en los últimos 24 meses.

“Tulio de Oliveira: "Llegamos rápido a la conclusión de que era otra cosa distinta a las anteriores"“

Al frente de ese equipo está Tulio de Oliveira que en Las Mañanas de RNE ha recordado que en apenas tres días secuenciando muestras se dieron cuenta de que el virus había tomado otra forma. “Había una explosión de casos aquí en una zona de Sudáfrica y llegamos rápido a la conclusión de que era otra cosa distinta a las anteriores. Hablé con el presidente Cyril Ramaphosa y me dijo que había que ser muy transparente y comunicarlo”, recuerda. Entonces, la reacción del mundo con la cancelación de los vuelos con Sudáfrica fue inesperada para este científico nacido en Brasil pero que ha desarrollado toda su carrera en el sur del continente. “Cerrar las puertas de Sudáfrica o de cualquier otro país no es efectivo, no es ético y casi destrozó la economía sudafricana”, asegura cuando le preguntamos cómo se tomaron los líderes internacionales su descubrimiento.

Laboratorios coordinados

Caminando por los pasillos del Centro de Investigación Biomédica de Tygerberg, De Oliveira nos confiesa que su mayor orgullo es haber trabajado para que Sudáfrica sea uno de los pocos países donde sus laboratorios de investigación biomédica están coordinados de forma automática. “Así pudimos entender de forma muy rápida que ómicron era diferente”.

Uno de los científicos del laboratorio que trabaja en la vacuna sudafricana contra el COVID Santiago Barnuevo (RNE)

Preguntado sobre del paso de pandemia a endemia es bastante prudente. “No podemos decir que la covid-19 vaya a ser una gripe aún, porque es mucho más peligrosa. Y endémica no significa que se arregle todo porque no hay que olvidar que hay enfermedades endémicas como la malaria que matan cada año a decenas de miles de personas”. Lo que sí tiene claro Tulio de Oliveira es que la solución es la vacunación porque el estudio de las nuevas subvariantes identificadas demuestran que, aunque se transmitan más, la inmunización funciona, reduce los contagios y evita cuadros clínicos graves.

África quiere fabricar sus propias vacunas

El dato es evidente. Apenas el 13% de la población de África según el Centro de Control de Enfermedades de la Unión Africana (Africa CDC) tiene la pauta completa de alguna de las vacunas contra la covid-19. Desde que empezaron a inyectarse los sueros, la gran mayoría de los países han quedado de lado en una realidad que han condenado reiteradamente desde la Organización Mundial de la Salud. Hasta el punto que la institución internacional ha lanzado el llamado proceso de transferencia tecnológica para que sean los países en desarrollo los que diseñen y produzcan sus propias vacunas de ARN mensajero.

Científicos sudafricanos que elaboran el primer suero ARN sudafricano Santiago Barnuevo (RNE)

Sudáfrica ha sido el primer país que ha logrado el aval de la OMS para lanzar su nuevo polo farmacéutico en el que están implicadas varias empresas de Ciudad del Cabo que pretende ser un referente para todo el continente. La empresa farmacéutica Afrigen ha anunciado que ha logrado diseñar la primera vacuna africana de ARN mensajero contra la covid-19 que tiene mucho de parecido con la de Moderna. “No es una copia, hemos utilizado la información de dominio público para sintetizar nuestra vacuna y ahora empieza un recorrido con el que esperamos poder empezar los ensayos clínicos este mismo año”, asegura su directora Petro Terblanche.

“Petro Terblanche: "Fabricar nuestra vacuna es fundamental para el desarrollo de toda África”“

En este sentido preocupa lo que pueda hacer la empresa estadounidense que tiene la patente en Sudáfrica para las vacunas de ARN mensajero aunque ha prometido no ejecutarlas mientras siga la pandemia. “Creemos que Moderna va a querer colaborar y esperamos que así sea para que no se ponga freno a esta iniciativa que es fundamental para el desarrollo de toda África”, insiste Terblanche.

De su producción en masa se encargará la empresa Biovac, que acaba de lograr 150 millones de dólares para equipar la fábrica. Empezará a producir y distribuir la vacuna de Pfizer y Biontech para toda África. Su director, Morena Makhoana asegura a RTVE.es que este es el primer paso para revivir una industria que vivió tiempos mejores. “No puede ser que de los 1.000 millones de vacunas que cada año se suministran en África, solo produzcamos un 1% y el resto tengamos que importarlas. La pandemia ha demostrado que tenemos que seguir nuestro camino para también poder centrarnos después en atender esas enfermedades más extendidas aquí y que en los países del norte no preocupan”, asegura en una videollamada.

Afrigen ha levantado en pocos meses una planta en la que ya producen distintos productos sanitarios y está ya acabando de instalar todo lo necesario para producir la vacuna. Petro Terblanche quiere ser cauta pero transmite una gran emoción: “una vez los reguladores aprueben la vacuna, estaremos muy cerca de inyectar la vacuna en los brazos de los africanos. ¡Y ese será un gran día para África!”