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Biden llama a Putin "criminal de guerra" y el Kremlin lo considera "imperdonable e inaceptable"

  • Estados Unidos ha anunciado que enviará drones a Ucrania
  • Washington sumará 800 millones de dólares de ayuda militara adicional

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Imagen del presidente de Estados Unidos, Joe Biden
Imagen del presidente de Estados Unidos, Joe Biden

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha llamado al mandatario ruso, Vladímir Putin, "criminal de guerra" ante la prensa después de que se anunciara el envío de drones a Ucrania para defenderse de la invasión y que servirán para "asestar un golpe a Rusia".

Biden ha informado este miércoles el envío de cien drones estadounidenses a Ucrania y ha asegurado que ayudará a ese país a adquirir sistemas antiaéreos "de mayor rango" para defenderse de los bombardeos rusos.

Por su parte, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, ha respondido y asegurado que estas declaraciones se tratan de "una retórica inaceptable e imperdonable", según ha explicado la agencia de noticias Tass.

A través de sus redes sociales, Biden ha condenado el comportamiento de Putin y le ha acusado de bombardear edificios de apartamentos y salas de maternidad. "Ayer vimos informes de que las fuerzas rusas tenían como rehenes a cientos de médicos y pacientes", ha publicado.

No es la primera vez que Biden hace duras declaraciones sobre su homólogo ruso. El pasado junio, el presidente de Estados Unidos aseguró durante una entrevista que Vladímir Putin era un "asesino" después de que las agencias de Inteligencia estadounidense acusaran a Rusia e Irán de haber intentado interferir en las elecciones presidenciales celebradas en Estados Unidos en noviembre de 2020.

Rusia sanciona a Biden

Estas declaraciones enconcan más las relaciones entre Moscú y Washington. Este martes Rusia anunció sanciones contra Biden, y varios altos funcionarios de su gabinete, incluido el secretario de Estado, Antony Blinken, en respuesta a las medidas impuestas por el país contra Rusia a raíz de la invasión rusa de Ucrania.

Esta medida "es la consecuencia inevitable del curso extremadamente rusofóbico que está siguiendo la actual administración estadounidense", ha señalado el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia en un comunicado en el que ha anunciado las medidas.