Bruselas plantea cinco medidas para rebajar el precio de la energía, pero deja la decisión final en manos del Consejo
- Entre otras, plantea un límite al precio de electricidad y gas y redirigir los "beneficios caídos del cielo" a los consumidores
- También propone obligar a que los Estados miembros tengan sus almacenes de gas llenos al menos al 80% de cara al invierno
La Comisión Europea ha presentado este miércoles un paquete con distintas ideas para reformar el mercado energético, entre las que figurará "limitar los precios de la electricidadFinalmente, ha decidido dejar que sean los jefes de Estado europeos quienes decidan en su cumbre del jueves y viernes si esta opción debe concretarse de algún otro modo.
En un documento publicado este miércoles, ha presentado cinco opciones para intentar reducir los precios de la energía en la Unión Europea a corto plazo y de forma temporal, mientras ultima una revisión del mercado eléctrico a largo plazo que espera tener lista para abril.
El Ejecutivo comunitario plantea poner un tope al precio del gas en el mercado mayorista, compensar costes de producción de empresas que generen electricidad con combustibles fósiles, redirigir los "beneficios caídos del cielo" a los consumidores, crear un agregador que garantice un precio bajo a consumidores vulnerables y fijar un precio máximo para las empresas operando en el mercado mayorista.
Esta medida se completa con la posibilidad de crear un agregador que garantice un precio bajo a consumidores vulnerables o fijar un precio máximo para las empresas que operan en el mercado mayorista.
La Comisión también ha propuesto obligar a que los Estados miembros tengan sus almacenes de gas llenos al menos al 80% de cara al próximo invierno y un mecanismo para poder retirar el control de los depósitos a compañías de terceros países, como la rusa Gazprom, si se detectan comportamientos que amenacen la seguridad de suministro.
Estas propuestas fueron adelantadas este martes en una rueda de prensa por el vicepresidente del Ejecutivo comunitario Maros Sefcovic, que también advirtió que el documento será la base para que los líderes discutan el contenido y elijan sobre qué opciones avanzar.
En la rueda de prensa junto a Sefcovic, el secretario de Estado francés de Asuntos Europeos y presidente de turno de la UE, Clément Beaune, ha explicado que reducir la dependencia "genera sin duda más consenso" que la idea de una reforma de los mercados para desarrollar "herramientas de control de precios".
Gravar los beneficios "excesivos" para ayudar a los consumidores
En concreto, la propuesta plantea entre las alternativas para limitar los precios el asignar una compensación económica a las empresas generadoras de electricidad por los altos precios de los combustibles fósiles, de forma que puedan cubrir la diferencia entre los costes de generación y los precios de referencia.
También propone que las autoridades nacionales puedan establecer un gravamen sobre los beneficios "excesivos" de las eléctricas, que derivan de la forma en que está configurado el mercado mayorista de la electricidad.
En este marco se utilizarían los beneficios obtenidos para conceder ayudas a los consumidores. Una variante de esta propuesta consistiría en establecer un precio máximo para ciertas tecnologías de generación.
Bruselas también propone conceder ayudas directas a los consumidores a través de subsidios así como que ciertas entidades comercialicen electricidad por debajo de los precios del merado para ciertos consumidores, como los más vulnerables.
Las negociaciones conjuntas de la UE con proveedores de terceros países es otro de los elementos que plantea Bruselas en su comunicación, como parte de una estrategia conjunta para realizar compras con socios internacionales de gas natural licuado, el gas natural a través de gasoductos e hidrógeno.
División entre los países sobre la respuesta a la escalada de precios
En este contexto, no será fácil para los jefes de Estado y de Gobierno llegar a una posición común, puesto que todavía existen profundas divisiones entre los países sobre la respuesta que el bloque debe dar a la escalada de precios energéticos, cuyo principal factor es la carestía del gas.
España, junto con Portugal, Grecia, Francia o Italia, forman parte del grupo de países que reclaman una reforma de calado del sistema eléctrico europeo.
El frente del sur se topa, por el contrario, con las reticencias de socios del norte como Alemania y, sobre todo, Países Bajos.
Fuentes diplomáticas arguyen que las medidas que defiende España, en especial limitar el precio de la electricidad en el mercado mayorista, son "fantasías" que no ayudarían a solucionar los problemas actuales ni a reducir la dependencia del bloque en los combustibles fósiles de Rusia.
El Gobierno alemán advierte del coste de poner un tope a precios energéticos
El Ministerio de Economía alemán ha indicado este miércoles que la propuesta de poner un tope ante la subida de los precios energéticos es "una de las opciones que se están discutiendo" en el marco europeo, pero ha advertido que es necesario tener en cuenta su coste.
Según el portavoz del Ministerio, Robert Säverin, "en última instancia es una subvención y eso cuesta dinero," ha argumentado, durante una rueda de prensa en Berlín, por lo que es preciso "mirar cuánto dinero hay y cuál sería el efecto" para el mercado, lo que también es "parte del debate".
Por su parte, el portavoz del Gobierno, Steffen Hebestreit, ha remitido a la discusión que la cuestión de la energía será debatida "a fondo" este jueves en Bruselas. "Es una materia complicada. Hay que tener en cuenta las fuerzas del mercado y cómo reaccionarán, pues no siempre lo hacen como nosotros desearíamos," ha subrayado.
Hasta la fecha, el Gobierno alemán, mientras trata a contrarreloj de reducir su dependencia energética de Rusia.
Reunión del Gobierno con el sector petrolero
Mientras tanto, en España, la vicepresidenta del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera y la ministra de Hacienda y Función Pública, Maria Jesús Montero, se han reunido en la tarde de este martes con representantes de las principales empresas y asociaciones del sector petrolero. El encuentro se ha celebrado dentro del proceso de consultas con los sectores económicos que el Ejecutivo acomete para elaborar el Plan Nacional de Respuesta al Impacto de la Guerra.
Además de las dos representantes gubernamentales, han participado Maarten Wetselaar, consejero delegado de Cepsa; Josu Jon Imaz, consejero delegado de Repsol; Andrés Guevara de la Vega, presidente de BP España; José Antonio Carrillo, presidente de la AOP, y José Mª Gordo, presidente de UPI.
Durante la reunión se ha informado a los ejecutivos de la evolución de las negociaciones que se mantienen en el plano europeo para encontrar soluciones a la actual crisis de precios energéticos, con vistas al Consejo Europeo de los próximos días. También se ha abordado la evolución de los productos petrolíferos y su impacto sobre los consumidores, el sector del transporte y la economía española en general.