Enlaces accesibilidad
Túnez

El presidente de Túnez decreta la disolución del Parlamento, suspendido ocho meses antes

  • El decreto presidencial sobre la disolución ha sido publicado en el Boletín Oficial del Estado horas después de que se aprobase
  • El pasado julio el mandatario decretó el Estado de Excepción y se hizo con plenos poderes para "recuperar la paz social"

Por
El presidente de Túnez disuelve el Parlamento del país

El decreto presidencial sobre la disolución del Parlamento tunecino, suspendido desde hacía ocho meses, ha sido publicado este jueves en el Boletín Oficial del Estado (JORT) horas después de que la cámara aprobase un proyecto de ley para anular las medidas adoptadas por el mandatario Kais Said y que ha abierto una nueva fase de incertidumbre en el país.

Según esta publicación, la decisión se basa en el artículo 72 de la constitución- suspendida en su casi totalidad el pasado septiembre- que recoge que "el presidente de la República es el jefe del Estado y el símbolo de su unidad, quien garantiza su independencia y continuidad, velando por el respeto a la Constitución".

En una alocución durante el Consejo de Seguridad Nacional celebrado el miércoles, el presidente denunció un "golpe de Estado" por parte de los diputados y defendió su decisión asegurando "proteger al Estado y sus instituciones".

Sin embargo, Said no ha evocado hasta el momento el anticipo de las elecciones legislativas- previstas según su hoja de ruta el 17 de diciembre- para respetar el plazo máximo de 90 días, como estipula la Carta Magna.

Fin al Estado de excepción por unanimidad

En una sesión parlamentaria "excepcional" celebrada a distancia, 116 de los 217 diputados han votado por unanimidad poner fin al Estado de excepción y anular los decretos y órdenes presidenciales publicados durante este periodo. Entre ellos, el cese del primer ministro Hichem Mechichi y el nombramiento de su sucesora Nedjla Bouden así como la disolución del Consejo Superior de la Magistratura (CSM) y su sustitución por un órgano "temporal".

La ministra de Justicia, Leïla Jaffel, ha calificado esta iniciativa de "conspiración" contra la seguridad del Estado y ha ordenado la apertura de una investigación contra los implicados.

Reacciones a la decisión del presidente

La decisión del presidente ha despertado numerosas reacciones como la del portavoz del colectivo "Ciudadanos contra el golpe de Estado", Jaouher Ben Mbarek, que ha recordado que la constitución no permite disolver el hemiciclo, sino que este debe permanecer en sesión permanente, y, por lo tanto, es "anticonstitucional y peligroso".

La líder del Partido Desturiano Libre (PDL), formado por los nostálgicos del antiguo régimen y vencedor en las encuestas de intención de voto, Abir Moussi, se ha felicitado por esta resolución "que pone fin al Parlamento de los Hermanos Musulmanes", en referencia al partido islamista Ennahda,  principal fuerza parlamentaria a la que acusa de defender los intereses de esta corriente conservadora.

El socialdemócrata Corriente Democrática ha señalado en un comunicado que esta medida "confirma las intenciones dictatoriales" del mandatario y ha rechazado el uso de la justicia y de las fuerzas de seguridad para "asustar" a los diputados, por lo que ha invitado a los tunecinos a manifestarse pacíficamente.

Segunda sesión para examinar la situación

La Asamblea tiene previsto celebrar este sábado una segunda sesión telemática para examinar la situación política, económica y social, aunque todavía no se ha pronunciado al respecto tras el anuncio de su disolución.

El pasado 25 de julio, Said decretó el Estado de excepción y se hizo con plenos poderes con el fin de "recuperar la paz social". Una decisión que ha sido calificada por la mayoría de partidos políticos como "golpe de Estado", mientras otros consideran que se trata de una "rectificación" de la revolución de 2011 que puso fin a las dos décadas del régimen autócrata de Zine El Abidine Ben Ali.

Según la hoja de ruta anunciada por Said a finales de año, el país deberá celebrar el próximo 25 de julio un referéndum constitucional- el primero de la historia del país- y legislativas anticipadas el 17 de diciembre.