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XX Congreso del PP | Perfil

Feijóo toma las riendas del PP: de Galicia a Génova para llegar a La Moncloa

  • El líder gallego ha sido proclamado este sábado nuevo presidente del PP con el 98,35 % de los votos
  • Con la "moderación" como bandera, Feijóo tendrá entre sus tareas lidiar con Vox y rearmar el partido

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Feijóo llega a Génova tras 30 años de trayectoria política

Soplan vientos de cambio en el PP. El primer discurso de Alberto Núñez Feijóo (Os Peares, Ourense, 1961) como nuevo presidente del partido ya ha dado muestras de ello. Con la “moderación” y el “sentido de Estado” como bandera, el líder gallego ha tomado este sábado las riendas de un PP en sus horas más bajas, golpeado por una profunda crisis que ha dejado fuera de juego al que hasta hace poco más de un mes era su mayor promesa, Pablo Casado, y que debe rearmarse en tiempo récord para llegar a tiempo a las próximas elecciones generales previstas para 2023.

De Galicia a Génova para llegar a La Moncloa. Ese será su cometido y, para ello, “se dejará hasta el último aliento”. Porque su única aspiración, ha dicho este viernes, es “ganar y gobernar España”. "Sé que este partido es la única alternativa al Gobierno y lo mejor que le puede pasar a mi nación. Y por eso estoy aquí", ha sentenciado ante los más de 3.000 compromisarios que este sábado le han apoyado con un 98,35 % de los votos.

Aupado en Madrid por Aznar y rescatado en Galicia por Fraga

El ya proclamado presidente del PP nació en Os Peares, un pequeño pueblo de apenas 60 habitantes de la provincia de Ourense. “El nieto de Eladia”, como le conocen sus vecinos, soñó con ser un día juez y para ello se licenció en Derecho por la Universidad de Santiago de Compostela. Sin embargo, las necesidades familiares le llevaron a estudiar una oposición para entrar en el cuerpo superior de funcionarios de la recién creada administración autonómica gallega.

En 1985 entró como funcionario de la Xunta y pronto llegó a altos cargos técnicos en el aparato del Gobierno gallego: primero en la Conselleria de Agricultura, a la que entró con 29 años de la mano del exministro José Manuel Romay Beccaría, y después como secretario general la de Sanidad hasta 1996, año en que se fue a Madrid en época de José María Aznar. Allí, el expresidente le designó como secretario general de Asistencia Sanitaria en el Ministerio de Sanidad y, posteriormente, como presidente del Instituto Nacional de la Salud.

Unos años más tarde, entre 2001 y 2003, fue nombrado presidente de Correos, donde empezó a gestar su imagen de gestor eficiente por encima de las siglas del partido, al que no se afilió hasta 2002. De hecho, Feijóo ha confesado que votó dos veces por Felipe González.

Sin embargo, su destino en la capital tenía los días contados. La crisis del Prestige lo devolvió a la política gallega en 2003, tras haber rechazado ser consejero de Sanidad de Esperanza Aguirre: primero como conselleiro de Infraestructuras y un año después como vicepresidente segundo. Y, en tan solo dos años, el histórico fundador de Alianza Popular y entonces presidente del PP gallego, Manuel Fraga, lo nombró su sucesor.

Ese sin duda fue el punto de inflexión en su carrera política: en 2009 consiguió su primera mayoría absoluta y, desde entonces, no ha tenido rival al frente de la Xunta de Galicia tal como avalan sus 13 años en el cargo y sus cuatro mayorías consecutivas, la última en julio de 2021. “Non te vaias rianxeira, que te vas a marear”, le han cantado los asistentes al Congreso, ante un Feijóo visiblemente emocionado.

La "moderación" y el “sentido de Estado” como bandera

Este sábado, el líder gallego emprende una nueva etapa política. Da el salto de su despacho en Santiago de Compostela a la calle Génova. La decisión, ha asegurado, "no ha sido sencilla", pero se basa en la “convicción” de que es “lo que España necesita”. “Creemos que podemos hacerlo mejor y creemos que nuestro país lo necesita”, ha reivindicado en su discurso de este viernes.

Feijóo se presentó con más de 55.000 avales para liderar el PP, una cifra récord en el partido y diez veces más de los que reunió Pablo Casado. Su intención es volver a convertir al PP en “la casa común del centroderecha”, algo que no consiguió su antecesor. Y lo hará a través de la “madurez, la fiabilidad, el sentido de Estado y un rumbo claro”, sin esperar a que “caiga el Gobierno como consecuencia de su propia ineficacia”. “Que nadie intente hacer creer que no se pueden cambiar las cosas”, ha avisado el nuevo presidente ‘popular’: “España nos está esperando, siempre nos espera en los momentos difíciles y nos invita a gobernar en momentos de dificultad”.

Entre sus sombras, la izquierda gallega ha criticado los recortes en sanidad o el arrinconamiento del gallego; y desde la oposición insisten en que no es tan moderado como proyecta. “Me temo que el PP ha cambiado de gato, pero el cascabel sigue sonando exactamente igual”, advirtió este viernes la vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra, ante el inminente relevo en las filas ‘populares’. Además, su foto con el narcotraficante Marcial Dorado en 1995 le sigue persiguiendo casi tres décadas después, a pesar de sus explicaciones.

El XX Congreso Nacional del PP, en imágenes

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  • Feijóo tras ser elegido nuevo líder del PP con el 98,35% de los votos

    Congreso Extraordinario del PP

    Feijóo tras ser elegido nuevo líder del PP con el 98,35% de los votos.
  • El nuevo presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, junto a su antecesor en el cargo, Pablo Casado

    Congreso Extraordinario del PP

    El nuevo presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, junto a su antecesor en el cargo, Pablo Casado.

Lidiar con Vox y rearmar el partido, entre sus grandes tareas

Pero Feijóo tiene “hambre de cambio”. Desde hoy deja su Galicia natal para dar el salto a la política nacional, un terreno de arenas movedizas donde aún está por ver si consigue adaptarse. Y es que en apenas tres años, hasta tres líderes nacionales han decidido dar un paso al lado: en 2019 el expresidente de Ciudadanos, Albert Rivera, tras la debacle de su partido en las generales; posteriormente en mayo de 2021 lo hizo el fundador de Podemos, Pablo Iglesias; y en última instancia su hasta este viernes compañero de partido Pablo Casado, tocado y hundido tras la guerra con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.

Otra de sus grandes tareas será que lidiar con Vox, un partido que no está presente en el Parlamento gallego -es la única comunidad junto a Canarias en la que los de Abascal no tienen representación- pero al que, según las encuestas, necesitará a nivel nacional para gobernar, tal como ha sucedió en Castilla y León. Además, deberá coser las heridas de un partido abierto en canal tras una guerra interna de la que Feijóo siempre se ha querido mantener al margen.

El todavía presidente gallego ya ha advertido de que “hay una alternativa a la política actual española” y que “lo va a demostrar con responsabilidad, sosiego e ilusión”. Por ello, ha pedido dejar atrás "las soflamas" y "empezar de una vez a trabajar como adultos". "Tenemos que sacar la política española del enfrentamiento y de la hipérbole", ha puntualizado.

Para ello se apoyará en los expresidentes del Gobierno José María Aznar y Mariano Rajoy, de quien ha dicho que son “sus referentes”; así como en las personas que conformarán su nuevo equipo, donde da continuidad a la mano derecha de Casado en el Congreso, Cuca Gamarra, que será la secretaria general del PP, y coloca como ‘número tres’ a Elías Bendodo, hombre fuerte del presidente andaluz, Juanma Moreno.