24 mujeres cargan el Cristo de la Buena Muerte en Gran Canaria
- Tienen entre 18 y 68 años y levantan un trono que pesa unos 800 kilos
- Ensayan durante dos meses cargando el trono completo, no un armazón
Cuando comienza a caer la tarde en Moya, municipio del norte de la isla de Gran Canaria, empieza la hora del ensayo de las costaleras del Cristo de la Buena Muerte. Esta imagen, obra del escultor catalán Sebastián Sanabria, pertenece a la Iglesia de la Candelaria y es uno de los pocos del país llevado íntegramente por mujeres en Semana Santa.
Dos meses de ensayos
Son 24 mujeres de entre 18 y 68 años que levantan entre todas un trono que pesa unos 800 kilos. Ensayan durante dos meses cargando el trono completo, no un armazón. La mayoría son trabajadoras y una vez que terminan en la peluquería, en el taxi, o en el supermercado se ponen a practicar para que el Cristo de la Buena Muerte salga la noche del Jueves Santo.
Para ellas es muy importante que se valore el trabajo que, según explica, “Se te mete en vena y no hay quien te lo saque”.
Dos años sin salir por la pandemia
“Llevo cargando desde los 16 y tengo 22 añitos“
Después de dos años de ausencia viven ilusionadas por la vuelta a la calle, con las emociones a flor de piel. “Llevo cargando desde los 16. Tengo 22 añitos y estoy cargando por mi abuela fallecida, por una promesa que le debo”, dice Fayna.
Por primera vez el puesto de capataz lo ocupa un hombre, Saulo Moreno. Lo han dejado dirigir para que bajo el trono solo estén mujeres.
A sus casi 70 años Rosi, la veterana del grupo, confía en que en un futuro no muy lejano formaciones como esta dejen de ser la excepción. Ellas, según señala, le ponen mucho entusiasmo “y además somos más cumplidoras que los hombres”.
Pequeños pasos para conseguir la tan ansiada igualdad.