Macron llama a Le Pen racista mientras la ultraderechista recorta distancias en el cierre de campaña

• Las encuestas señalan que Le Pen ganaría el apoyo del 49 % de los votantes en una segunda ronda
• Especial sobre las elecciones presidenciales en Francia en RTVE.es

El presidente francés, Emmanuel Macron, en un mitin en París

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha acusado este viernes a su rival de extrema derecha, Marine Le Pen, de estar mintiendo a los votantes sobre su programa electoral "racista". Mientras, la distancia entre ambos candidatos a las elecciones presidenciales que se celebran este domingo se acorta cada vez más.

“Hay una clara estrategia (de la campaña de Le Pen) para ocultar lo brutal que es su programa”, ha dicho Macron al periódico Le Parisien en una entrevista. Según el mandatario, los fundamentos de la candidata de la Agrupación Nacional "no han cambiado", pues tiene un "programa racista que pretende polarizar la sociedad y de gran brutalidad".

Más tarde, en una charla en el medio digital Brut, el presidente ha afirmado que los partidos extremistas se alimentan del "miedo" y ha advertido de que estos "están subiendo en todas las sociedades europeas". De acuerdo con sus declaraciones, el voto a la ultraderecha comienza por el rechazo a los inmigrantes, luego a la religión musulmana y, en los últimos años, "ha flirteado con las teorías de la conspiración" derivadas de la pandemia de coronavirus. No obstante, ha asegurado que ante esta situación se debe responder "con una visión de esperanza".

Hasta hace unas semanas, Macron era el candidato favorito de las elecciones francesas y su reelección parecía inevitable. Sin embargo, las últimas encuestas auguran un duro reto para el mandatario. La de este viernes ha mostrado la brecha de apoyo más estrecha de la historia entre dos rivales, con Le Pen ganando el apoyo del 49 % de los votantes en una probable segunda vuelta.

Antes de la primera ronda de este domingo, el mandatario ya ha perdido otros dos puntos, bajando hasta el 26 % de los votos, mientras que su rival ha aumentado su popularidad en un 2 % y ha subido hasta el 25 % de los votos.

Le Pen, "conmocionada", llama a Macron "agresivo"

Por su parte, la líder ultraderechista ha dicho a la emisora Franceinfo estar "conmocionada" por la acusación del actual presidente, al que ha calificado de "febril" y "agresivo". Asimismo, se ha defendido afirmando que su programa tiene como objetivo poner los derechos de los franceses en primer lugar, independientemente de su origen.

Le Pen ha centrado su campaña en el poder adquisitivo, aprovechando la principal preocupación de los votantes al prometer una reducción de impuestos y el aumento de algunos beneficios sociales, lo que le ha servido para suavizar su imagen. Además, los puntos de vista radicales de otro de sus rivales, Eric Zemmour, le han ayudado a parecer más convencional.

Muchos votantes de izquierda han dicho a los encuestadores que, a diferencia de 2017, no votarían en la segunda vuelta para alejarla del poder. "Marine Le Pen nunca ha sido tan capaz de ganar unas elecciones presidenciales", ha opinado al respecto el subdirector del instituto de encuestas Harris Interactive, Jean-David Levy.

Macron se arrepiente de haber entrado tarde en la campaña por Ucrania

Este viernes, el mandatario francés se ha arrepentido de haber entrado tarde en la carrera a su reelección debido a la invasión rusa de Ucrania. “¿Quién iba a entender hace seis semanas que de repente empezaría a dar mítines políticos, que me centraría en cuestiones internas cuando empezó la guerra en Ucrania?”, ha lamentado.

“Así que es un hecho que entré (en la campaña) incluso más tarde de lo que deseaba”, ha incidido, para luego añadir que conserva todavía un “espíritu de conquista y no de derrota”. Macron ha intentado recuperar el tiempo perdido y contener su caída en las encuestas, que le otorgan hasta seis puntos menos que hace dos semanas en la primera vuelta de los comicios.

Casi 49 millones de electores están llamados a las urnas este domingo en la primera vuelta de las presidenciales. Por ahora, las encuestas señalan que alrededor de un tercio de los votantes todavía no se ha decidido sobre el candidato al que apoyará. La abstención, además, podría superar el 25 % por primera vez desde 2002, cuando el padre de Marine Le Pen, Jean-Marie, se clasificó para la segunda vuelta contra todo pronóstico.

Mientras tanto, el veterano de extrema izquierda Jean-Luc Mélenchon ocupa el tercer lugar con alrededor de un 17 % de las intenciones de voto. En las últimas semanas, ha ganado apoyos y sus simpatizantes aún mantienen la esperanza de que llegue a la segunda vuelta.