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Investidura en Castilla y León

Mañueco es investido presidente y el PP ata su destino a Vox en Castilla y León

  • Los votos de ambas formaciones han permitido sumar 44 procuradores, tres por encima de la mayoría absoluta necesaria
  • La nueva coalición abre la puerta al primer gobierno autonómico en España en el que estará presente la ultraderecha

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24 horas - Mañueco es investido sin la presencia de Feijóo

Alfonso Fernández Mañueco ha sido investido este lunes presidente de Castilla y León gracias al acuerdo alcanzado con Vox, con quien gobernará en una coalición "sin complejos" los próximos cuatro años. Las dos formaciones hacen historia en esta comunidad y la ultraderecha entra por primera vez en un gobierno autonómico en España en un antes y un después en las relaciones entre PP y Vox.

En una sesión que comenzó a las 12:00 horas y se ha alargado hasta las 21:30 horas, el líder 'popular' ha reivindicado que dicho pacto busca la "estabilidad para toda la legislatura" y "plasma la única alternativa viable para evitar una repetición electoral que nadie quería", frente a las críticas de la oposición, que le acusan de "abrir la puerta a la extrema derecha" y dar "cobijo al racismo y la homofobia sin inmutarse".

La investidura de Mañueco ha salido adelante en primera vuelta gracias a los 31 votos a favor del PP y los 13 de Vox, sumando así 44 procuradores, tres por encima de la mayoría parlamentaria en las Cortes de Castilla y León. En contra, los 28 procuradores del PSOE, los tres de la Unión del Pueblo Leonés (UPL), los tres de Soria ¡Ya! y los respectivos votos de los representantes de Unidas Podemos, Ciudadanos y Por Ávila. En total, 37 votos en contra y ninguna abstención.

De esta forma, la coalición del PP y Vox abre la puerta a un escenario que hasta ahora era desconocido y que pondrá a prueba la capacidad de gestión del partido presidido por Santiago Abascal, que desde su irrupción en el panorama político solo había dado apoyos puntuales a otros ejecutivos. Al mismo tiempo, será el primer gobierno de coalición fraguado en la etapa de Alberto Núñez Feijóo al frente del PP, tras haber dado por superada la mayor crisis en la historia del partido y que se saldó con la salida de Pablo Casado.

Precisamente Feijóo ha sido el gran ausente de la cita en las Cortes de Castilla y León, donde ha acudido en representación del PP la vicepresidenta segunda del Congreso de los Diputados, Ana Pastor. Posteriormente, y una vez investido presidente, Feijóo ha dado su enhorabuena a Mañueco a través de un mensaje en su cuenta de Twitter: "España necesita líderes que ofrezcan estabilidad, responsabilidad y gestión. En Castilla y León ese líder es y seguirá siéndolo Alfonso", ha reinvindicado.

Sí ha estado presente el presidente de Vox, Santiago Abascal, quien ha sostenido al llegar a las Cortes que “no hay ninguna duda del apoyo” del líder del PP nacional al gobierno de coalición y ha justificado su ausencia por problemas de agenda. En declaraciones a los medios, Abascal se ha mostrado convencido de que el Gobierno de Castilla y León va a tener "muchos enemigos", pues a su juicio supone una "gran esperanza" para millones de españoles que observan que es posible una "alternativa" para toda España.

Mañueco promete un gobierno "sólido" y pide no tener "prejuicios"

El debate de investidura ha comenzado con la intervención de Mañueco sin límite de tiempo, donde ha presentado las principales líneas del acuerdo con Vox, con especial énfasis en cuestiones como la rebaja de impuestos, la integración de una ley de Concordia en la ley de Memoria Histórica o el respaldo a la ley contra la violencia de género, a la que se unirá una ley de lucha contra la violencia intrafamiliar, una petición expresa de Vox. Se trata, ha dicho, de un acuerdo que permitirá garantizar "cuatro años de estabilidad" para la Comunidad y que será "beneficioso" para mejorar "nuestra calidad democrática".

El líder 'popular' ha defendido que el pacto con Vox refleja "la voluntad" de los electores, pues la suma de ambos conforma la mayoría de la Cámara. Y, con este cometido, ha agradecido el papel de Vox, personalizado en su dirigente autonómico, Juan García-Gallardo, quien se convertirá en vicepresidente y con quien, ha dicho, trabajará "sin complejos" y como "una piña".

El nuevo Ejecutivo estará conformado por 10 consejerías, las cuales se mantienen prácticamente sin cambios respecto al gobierno anterior del PP y Ciudadanos. No obstante, la de Trasparencia se integra en la Consejería de Presidencia, mientras que la de Fomento y Medio Ambiente se divide en dos: por un lado, Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio y, por otro, Movilidad y Transformación Digital.

García-Gallardo agradece a Mañueco estar "a la altura"

Por su parte, el futuro vicepresidente de la Junta de Castilla y León ha agradecido a Mañueco que haya "estado a la altura" y haya reconocido, "pese a las grandes presiones recibidas", el lugar en el que los ciudadanos habían colocado a PP y a Vox. "Puede estar usted tranquilo. En esta ocasión podrá contar con un socio leal, con el que podrá discrepar, sí, pero cuya sinceridad podrá poner usted siempre a prueba, sin temor a ser traicionado", ha garantizado García Gallardo, en una alusión directa a Ciudadanos.

El también portavoz del Grupo Parlamentario Vox ha defendido los términos del pacto alcanzado entre los dos partidos, como "prueba de la madurez" de ambas formaciones políticas, que, según ha significado, han aceptado que las negociaciones "no son un concurso para llegar a la victoria o a la derrota" y sí "un éxito en el que los únicos vencedores son los castellanos y los leoneses". Dicho esto, ha admitido que la disposición a llegar a acuerdos y la conservación de los propios principios no son elementos incompatibles y se ha mostrado convencido de que la diferencia de principios entre PP y Vox, como ha asumido también el candidato del PP, no impedirá llegar a acuerdos en beneficio de los castellanos y leoneses.

PSOE, Podemos y Cs cargan contra Mañueco: "Pagará ante la historia"

Las críticas, sin embargo, han sido generalizadas por parte de los grupos de la oposición. El PSOE, Unidas Podemos y Ciudadanos han cargado contra Mañueco por "capitular ante la extrema derecha" y dar "cobijo al racismo y la homofobia sin inmutarse". Mientras que los líderes de la Unión del Pueblo Leonés (UPL), Luis Mariano Santos; de Soria ¡Ya!, José Ángel Ceña, y de Por Ávila, Pedro Pascual, le han reprochado la falta de medidas concretas y han dicho sentirse "olvidados y abandonados" por el Gobierno autonómico.

"Pagará ante la historia por ello", le ha advertido el líder socialista, Luis Tudanca, quien le ha suplicado que "no mercadee con la igualdad y los derechos de las mujeres" y que "no dilapide la ley de lucha contra la violencia de género". Más crítico se ha mostrado el procurador de Unidas Podemos, Pablo Fernández, quien ha acusado a PP y Vox de firmar "el pacto de la infamia, el acuerdo con la encarnación del nazismo". Por su parte, el que fuera su socio de Gobierno y vicepresidente del Ejecutivo regional, Francisco Igea, le ha acusado de "introducir la peste verde en las instituciones", en referencia a Vox, e incluso de "blanquearle". "Usted parece convertido ya. Sus socios son negacionistas, y los han metido en el Gobierno para protegernos", ha señalado.

Precisamente uno de los rifirrafes más duros lo han protagonizado Igea y Mañueco, a cuenta de las causas de las elecciones anticipadas. El líder 'popular' ha invitado a Igea a que acepte "su irrelevancia política" tras pasar Cs de los 12 procuradores de la anterior legislatura a uno en la actualidad y le ha calificado como el Macbeth de la política regional, que intentó apuñalar por la espalda a sus socios de legislatura "cegado por una ambición desmedida". "Es un mentiroso patológico, que no se merecen ni sus compañeros de partido, ni esta Comunidad, ni su familia", ha contestado el procurador de Cs.

También Tudanca y Mañueco se han lanzado reproches cruzados por el terrorismo. El presidente del PP ha asegurado que en Castilla y León no habrá pactos para celebrar homenajes y recibir "como héroes a los terroristas de ETA o a los golpistas que cuestionan la democracia de España", al tiempo que ha calificado de "hipocresía y cinismo político" a Luis Tudanca y a Pedro Sánchez. Ante esto, el portavoz socialista ha tachado de "desfachatez" que Mañueco hable de víctimas del terrorismo cuando va a nombrar consejero de Cultura a Gonzalo Santonja, quien escribió en 1979 una carta en defensa de uno de los fundadores de HB.