La Magdalena de Albacete, primera cofradía de España fundada por mujeres
- Hace 35 años abrieron camino al protagonismo femenino en la Semana Santa
- Las dificultades de conciliación pesan en el mundo de las cofradías
La Semana Santa es sentimiento religioso, una devocion que no entiende de géneros, pero en la práctica el sesgo masculino se ha dejado sentir en cofradías y hermandades. Por tradición eran ellos los que llevaban las imágenes y desfilaban, y no eran hombres solo los costaleros, también ocupaban un lugar preponderante como nazarenos y músicos. Hace 35 años un grupo de albaceteñas dio el paso adelante de fundar una cofradía, la de Santa María Magdalena, y abrirse un espacio en las procesiones.
Un paso por la visibilidad femenina
Coral Sánchez no había nacido aún cuando se creó la Magdalena, pero ahora es su presidenta y conoce bien la historia. Recuerda que "en 1987 todavía estaba mal visto que las mujeres desfilaran entre el resto de cofrades, y tenían que salir con el capirote puesto desde casa para que no se las reconociera". No podían vivir en igualdad la Semana Santa, aunque preparaban los pasos y las túnicas de sus maridos e hijos, hasta que tomaron la decisión de impulsar la cofradía, que fue y sigue siendo mixta.
“Hace 30 años no estaba bien visto que las mujeres desfilaran como nazarenas“
El panorama ha ido cambiando desde entonces, ha crecido la participación femenina y ellas acceden a puestos de responsabilidad en la organización de Semana Santa. "Empezamos a figurar como secretarias o vocales, pero este año somos ya cinco mujeres las que estamos como presidentas de una cofradía en Albacete", dice Coral.
Los obstáculos para conciliar vida familiar y cofrade
Para las mujeres que quieren implicarse en la Semana Santa, la conciliación sigue siendo un reto. Mª Paz Sánchez es una nazarena que decidió dejar la actividad en la Magdalena para dedicarse a la maternidad. "No era compatible cuidar de mi hijo y salir en las procesiones", asegura, aunque ahora ha vuelto a participar en la cofradía con ilusión renovada.
“Para una mujer es difícil conciliar la vida laboral, familiar e implicarse a fondo en la Semana Santa“
Lo mismo sucede en las bandas de música, donde los ensayos son fundamentales. Estefanía García reconoce que "las más jóvenes no tienen problemas, pero a partir de cierta edad lo van dejando porque exige mucho tiempo". Con perseverancia ella ha logrado continuar y ser una de las dos responsables de la banda de la Magdalena, que llevan la batuta para dirigir a hombres y mujeres.
La cantera de la Semana Santa
Estefanía cree que la presencia femenina en el trabajo de la Semana Santa aporta "más empatía, sentido práctico y capacidad de trabajo", y todas ellas tienen esperanza en el futuro, en lo que pueden aportar las generaciones que vienen. Niñas y adolescentes que salen ya en la procesión infantil, y llevan a hombros las imágenes en las mismas condiciones que sus compañeros.
Esa cantera incipiente de las cofradías ayudará a mantener viva la tradición religiosa, sin renunciar a la igualdad de género.