Los Mossos investigan el asesinato de una mujer y su hija a manos de su marido en Lloret de Mar
- Los cuerpos de las fallecidas presentaban heridas de arma blanca
- El hombre se habría suicidado después del presunto crimen
- El 016 es el teléfono de atención a las víctimas de violencia de género, es gratuito y no deja rastro en la factura
Una mujer y su hija han sido asesinadas en una vivienda de Lloret de Mar (Girona) presuntamente a manos de su marido, según la primera hipótesis de la investigación de los Mossos d'Esquadra. Los cadáveres han sido hallados en el interior de la casa y ambos presentaban heridas de arma blanca.
Las autoridades también han encontrado el cuerpo del hombre en el patio de la finca tras haberse suicidado.
Según fuentes próximas a la investigación, la voz de alarma la dio el hijo de la mujer que, después de buscar a su madre durante este lunes y no conseguir dar con ningún miembro de su familia, decidió poner una denuncia.
Tras recibir la denuncia del hijo de la víctima residente en Francia, los agentes de los Mossos d'Esquadra y de la Policía Local han acudido poco antes de las cuatro de esta tarde a la vivienda, donde han hallado los cuerpos de las dos mujeres en la casa.
Al parecer, los cadáveres de ambas tienen heridas de arma blanca, mientras el padre ha aparecido ahorcado en el patio de la vivienda, ubicada en la urbanización Els Pinars de Lloret de Mar.
La familia era de origen ruso
La familia, de origen ruso, estaba compuesta por un matrimonio de mediana edad y una joven, aunque todavía no se ha confirmado si era hija de los dos o solo de la mujer.
La División de Investigación Criminal de los Mossos d'Esquadra de Girona se ha hecho cargo del caso y la policía científica y comitiva judicial ha llegado al el escenario del crimen para recabar todas las pruebas y proceder al levantamiento de cadáveres para su traslado al Instituto de Medicina Legal de Girona, donde se determinarán las causas de estas muertes.
El matrimonio estaba empadronado en Lloret de Mar, un municipio con fuerte presencia de ciudadanos originarios de Rusia, país que se había convertido en uno de sus mercados turísticos destacados hasta la irrupción de la pandemia.