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Día Nacional de la Cefalea

El fin de las mascarillas, un alivio para las cefaleas: el dolor crónico de más de dos millones de españoles

  • Los expertos señalan que algunos dolores de cabeza empeoraron con el uso obligatorio de las mascarillas
  • Según datos de la SEN, hasta un 46 % de la población presenta algún tipo de cefalea activa

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Una mujer con mascarilla se lleva las manos a la frente en un gesto de dolor
Una mujer se lleva las manos a la frente en un gesto de dolor

Este martes 19 de abril se celebra el Día Nacional de la Cefalea, la forma más frecuente de dolor en el ser humano que, según la Sociedad Española de Neurología (SEN), afecta de manera crónica a más de dos millones de españoles. Muchos de estos pacientes han visto empeorar sus dolores de cabeza desde el comienzo de la obligatoriedad de llevar mascarilla por la pandemia de coronavirus. Pero, ahora, se espera que el fin de esta norma el próximo miércoles alivie a miles de personas.

El término “cefalea” hace referencia a cualquier dolor localizado en la región craneal, en la parte alta de la región cervical o en la nuca y en la mitad superior de la cara. De acuerdo con el coordinador del Grupo de Cefalea de la SEN, Pablo Irimia, quienes la sufren suelen padecer una hipersensibilidad aumentada a cualquier estímulo, como la luz, el ruido o los olores.

Por eso, llevar algo apretado en la cabeza, como una mascarilla, puede empeorar el dolor y desencadenar una crisis, apunta a RTVE.es. También lo confirma la profesional de la Sociedad Andaluza de Neurología, Carmen González, quien explica que "la percepción general del paciente es que la mascarilla le agrava la cefalea", aunque todavía no hay datos oficiales de esto. "Se han quejado sobre todo los migrañosos", incide.

Consejos para quienes seguirán llevando mascarilla

Sin embargo, la mascarilla en interiores seguirá siendo obligatoria en el transporte público y se exigirá a trabajadores y visitantes de hospitales, centros de salud y demás centros médicos y asistenciales. Muchas personas con cefalea no podrán prescindir de ella a lo largo del día, pero existen recomendaciones que pueden tener en cuenta para minimizar los dolores de cabeza.

Desde la SEN, se aconseja modificar la manera de llevar las mascarillas, respetando siempre las indicaciones del fabricante, y probar cuál es el modelo que más ayude a minimizar la sintomatología. Es decir, se propone utilizarla como mejor se adapte a las necesidades individuales y la que “apriete lo menos posible”. Por su parte, González hace hincapié en la importancia de prescindir de la mascarilla durante el tiempo de descanso en el trabajo, si se tiene la oportunidad.

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Pero no solo las mascarillas empeoran las cefaleas. El dolor de cabeza, aparte de ser un síntoma frecuente de la COVID-19, es también uno habitual entre personas que han superado la enfermedad. “En algunos casos, el coronavirus ha agravado incluso una cefalea preexistente en el paciente”, cuenta el experto.

Tras contraer el virus, la mayoría sufre un dolor de cabeza que se soluciona en “unos meses”, normalmente en un plazo inferior a seis. No obstante, en algunas personas persiste más allá de este periodo y “no responde bien a los tratamientos”. De hecho, González explica que algunos casos de cefalea episódica se han cronificado después de pasar por dicha enfermedad infecciosa.

En concreto, la Sociedad Internacional de Cefaleas estudió la evolución de más de 900 pacientes españoles y el 16 % de ellos desarrollaron una cefalea diaria que persistía a los nueve meses. Por ello, Irimia recuerda que llevar mascarilla puede ser todavía una necesidad para algunas personas, puesto que pasar por la enfermedad puede agravar más los dolores de cabeza que el hecho de utilizarla.

Hasta un 46 % de los españoles tiene cefalea

Según datos de la SEN, hasta un 46 % de la población española presenta algún tipo de cefalea activa y hasta el 89 % de los hombres y el 99 % de las mujeres la han padecido en algún momento. Existen más de 200 tipos, pero se dividen en tres grupos: cefaleas primarias, cuando el dolor no está asociado a ninguna lesión en el sistema nervioso; cefaleas secundarias, cuando se debe dichas lesiones o a otras enfermedades; y las neuralgias, cuando el dolor se localiza en el territorio de un nervio.

Dentro de las primarias hay tres tipos fundamentales, que son la migraña, la cefalea tensional y la cefalea en racimos. La más común de ellas, la migraña, es también la más “incapacitante”. "No es solo un dolor de cabeza en sí, es un síndrome con muchos síntomas acompañantes", indica la doctora a RTVE.es. Suele caracterizarse por graves náuseas, vómitos y un "decrecimiento de las funciones cerebrales superiores" que llevan a la persona a estar más "lenta" y a tener que permanecer acostada.

Al tratarse de una enfermedad epigenética, la migraña tiene un componente genético, pero también puede estar causada por factores externos, como los ambientales, los hábitos o los hormonales. Por suerte, con un diagnóstico y un tratamiento correcto, es posible llegar a controlar la enfermedad y evitar que se cronifique. “Podemos ayudar a muchas personas que tienen dolores de cabeza frecuentes e incapacitantes a reducir la frecuencia y la intensidad del dolor y mejorar su calidad de vida”, añade el coordinador de la SEN.

Señales de un dolor de cabeza preocupante: explosivo y repentino

La mayor parte de los dolores de cabeza son benignos. Por eso, cuando se trata de una cefalea ocasional, Irimia advierte de que no es necesario acudir al médico. No obstante, sí se debe visitar a un profesional cuando es "explosivo, repentino e incapacitante".

Otra de las señales de alerta es si se inicia por primera vez cuando el paciente tiene más de 50 años, porque puede tratarse de una cefalea secundaria, “que a su vez sea una urgencia médica”. Si se necesita tomar analgésicos con mucha frecuencia, aunque se controle bien el dolor, también es momento de acudir a un experto.

Según datos de la SEN, alrededor del 50 % de las personas con cefalea se automedica con analgésicos sin receta y más de un 40 % de los pacientes que sufren dolor de cabeza con cierta recurrencia está aún sin diagnosticar.