Macron y Le Pen se miden en un cara a cara decisivo en la recta final de las elecciones francesas
- Los candidatos vuelven a enfrentarse en la segunda vuelta de unas elecciones presidenciales, esta vez más ajustadas que en 2017
- Sigue el debate en directo a las 20:50 en RTVE.es y en el Canal 24 Horas
- Especial elecciones en Francia | Resultados de las elecciones
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, y la candidata de Agrupación Nacional, Marine Le Pen, celebran este miércoles por la noche su único cara a cara en un debate televisado que puede ser decisivo para las elecciones presidenciales. El encuentro, que se emitirá a partir de las 20:50 en RTVE Play y el Canal 24 Horas, será el único cara a cara entre los dos candidatos clasificados para la segunda vuelta de las elecciones presidenciales francesas, que se juega el próximo domingo 24 de abril.
Cinco años después, ambos vuelven a verse las caras en la recta final de la carrera hacia la Presidencia de la República. Macron opta a una reelección tras un primer mandato que no todos los ciudadanos ven con buenos ojos; Le Pen protagoniza su tercer intento por llegar al Elíseo, esta vez con más posibilidades que nunca de alzarse con la victoria.
El tenso debate que ambos protagonizaron en 2017, en vísperas de la segunda vuelta de las pasadas elecciones, estuvo marcado por múltiples interrupciones y cruces de acusaciones. Aquel encuentro consolidó al actual jefe del Estado como claro favorito de cara a una votación que acabó convirtiéndole en el mandatario francés más joven desde Napoleón.
Macron también parte de nuevo como favorito para renovar un mandato marcado por una profunda crisis económica, pero esta vez la distancia entre ambos candidatos se acorta, según los sondeos. A cuatro días de la votación final, las encuestas otorgan en torno al 56% de los votos para Macron y el 44% para Le Pen, un resultado que dista mucho del cosechado por el líder de La República en Marcha en las pasadas elecciones, cuando atrajo el 66% de los votos de una población que quiso evitar a toda costa el acceso de la ultraderecha al Elíseo.
La campaña ha girado en torno a temas sociales y económicos en mitad de una crisis financiera agravada por el estallido de la guerra en Ucrania. Ambos candidatos apuestan por la mejora del poder adquisitivo de los franceses y Le Pen, de hecho, ha hecho de este asunto su prioridad, dejando de lado otras cuestiones como la inmigración o la seguridad. La guerra también ha sacado a flote otras cuestiones internacionales como la pertenencia de Francia a la OTAN. Mientras que Macron defiende que la guerra ha otorgado "clarificación estratégica" a la Alianza Atlántica, Le Pen apuesta por sacar al país del mando integrado.
Por otro lado, Macron propone retrasar la edad de jubilación de la población; Le Pen, por el contrario, aboga por mantenerla o incluso adelantarla. Además, en los últimos días, Macron ha optado por inclinar su discurso hacia la cuestión medioambiental y ha prometido transformar Francia en una "gran nación ecológica" y ha calificado el proyecto electoral de su contrincante como "climatoescéptico".
El reto de los candidatos: convencer a los indecisos
La cita de este miércoles, que suele cosechar altos índices de audiencia, podría inclinar la balanza en favor de un candidato u otro. El reto, por lo tanto, es conquistar a los indecisos y a aquellos votantes que en la primera vuelta se decantaron por una de las diez opciones que se quedaron en el camino.
Macron
Le Pen
Mélenchon
Zemmour
Pécresse
Hidalgo
Jadot
Poutou
Candidatos como la socialista Anne Hidalgo, la republicana Valérie Pécresse, o el ecologista Yannick Jadot han pedido el voto para Emmanuel Macron. Le Pen, por su parte, cuenta con el apoyo del ultraderechista Éric Zemmour, del partido Reconquista, que ha incitado a sus votantes decantarse por la candidata de República en Marcha.
El candidato de extrema izquierda, Jean-Luc Mélenchon, no se pronunció de manera directa en favor de Macron, pero lanzó un claro alegato: "Ni un voto para Le Pen". Los sondeos, sin embargo, prevén que parte de sus votantes estarán divididos entre la candidata de ultraderecha y el actual presidente, mientras que otros muchos optarán por la abstención. Por ello, conquistar al electorado de La Francia Insumisa, que obtuvo el 22% de los votos emitidos en la primera vuelta, podría ser clave para alcanzar la victoria.
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