El FMI eleva el déficit de España para este año al 5,3% y la deuda se situará en el 116,4% del PIB
- En su informe prevé que el déficit se reduzca a un 4,3% del PIB en 2023 y a un 3,9% en 2024
- En lo relativo a la deuda pública, el organismo internacional calcula que se mantendrá por encima del 114% del PIB hasta 2027
El Fondo Monetario Internacional (FMI) prevé que la tasa de inflación para la economía española, que el pasado mes de marzo se disparó al 9,8% y alcanzó su nivel más alto en 37 años, se moderará durante la segunda mitad de 2022, lo que permitiría reducir el alza de los precios a una media del 5,3% para el conjunto del año y al 2,7% al final del ejercicio.
Con respecto a la deuda pública, espera que al cierre de 2022 se sitúe en el 116,4% del PIB, que baje hasta el 115,9% en 2023 y hasta el 114,7% un año después. No obstante, se mantendrá en el 114,5% durante todo el horizonte de las proyecciones del FMI.
Así, la entidad internacional estima que la economía española seguirá creciendo los próximos años sustancialmente por encima de la zona euro, lo que permitirá al país reducir la tasa de paro hasta el nivel más bajo desde 2008, aunque los niveles de deuda y déficit seguirán superando los registrados antes de la pandemia. Estas son las proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), que anticipa una brusca corrección a la baja de la inflación hacia finales de 2022.
Estima que la inflación española caerá hasta el 1,3% en 2023
Las proyecciones a más largo plazo del FMI contemplan que la tasa de inflación promedio para España caerá hasta el 1,3% en 2023 y repuntará una décima un año después, hasta el 1,4%, subiendo al 1,6% en 2024 y hasta el 1,7% en promedio cada uno de los dos años siguientes, 2025 y 2026.
La moderación esperada de las presiones inflacionistas y el impulso de la recuperación en curso, junto con la inyección de los fondos europeos previstos, permitirán a España crecer a un ritmo significativamente más alto que la zona euro durante todo el horizonte de las previsiones del Fondo.
En concreto, si para 2022 y 2023 el FMI anticipa un crecimiento del PIB español del 4,8% y del 3,3%, respectivamente, en el caso de la eurozona se espera una expansión del 2,8% este año y del 2,3% en 2023.
A más largo plazo, el FMI pronostica que la economía española crecerá aún un 3,1% en 2024, moderando el ritmo de expansión al 1,9% en 2025; al 1,7% en 2026 y al 1,6% en 2027, mientras que la actividad de la zona euro aumentará un 1,8% en 2024 y un 1,6% en 2025, moderándose al 1,4% un año después y al 1,3% en 2027.
El déficit se mantendrá en el 3,9% anual a partir de 2023
Sin embargo, la institución internacional es menos optimista respecto de la posición fiscal de España, que reducirá este año su déficit al 5,3% desde el 7% de 2021 y hasta el 4,3% en 2023. A partir de ese año, según las estimaciones del FMI, el déficit permanecería estancado en el 3,9 % anual hasta 2027.
Asimismo, la deuda pública, que se espera al cierre de 2022 estará en el 116,4% del PIB, bajará hasta el 115,9% en 2023 y al 114,7% un año después, pero se mantendrá en el 114,5% durante todo el horizonte de las proyecciones del FMI.
Prevé que España supere los 20 millones de ocupados
La recuperación de la actividad en España permitirá una reducción paulatina del desempleo, que cerraría este año en el 13,4%, por debajo del 14,1% anterior a la pandemia, tras lo que el FMI confía en que la tasa de paro se modere al 13% el próximo año y al 12,7% en 2024, para reducirse al 12,6% un año después y al 12,5% en los dos últimos ejercicios del horizonte de previsiones.
De este modo, el Fondo anticipa que España logrará este año por primera vez desde 2008 superar el umbral de los 20 millones de ocupados, con una previsión de 20,263 millones para 2022, frente a los 19,779 de 2019, que el próximo año aumentarán hasta los 20,448 millones.
España deberá emprender en el futuro una "consolidación fiscal gradual"
Las cifras de déficit que calcula el FMI son habitualmente superiores a las publicadas por el Gobierno español al incluir en su cómputo el apoyo al sector financiero.
"Cuando la pandemia golpeó, España, como otros países, respondió con una política fiscal muy agresiva para ayudar a mitigar el impacto", ha comentado en una entrevista con Efe Paulo Medas, jefe de división del Departamento de Asuntos Fiscales del FMI. "Eso derivó en un deterioro significativo del déficit fiscal, del 11% en 2020. Ahora estamos viendo una reducción gradual de ese déficit", ha añadido.
El estancamiento del déficit y la deuda a partir de 2024 resultan de la asunción del "escenario pasivo" que el Fondo contempla al hacer estas estimaciones -es decir, que hace los cálculos como si nada fuese a cambiar respecto a la situación fiscal actual- por la falta de planes específicos y detallados a medio y largo plazo.
"Las autoridades (españolas) han anunciado compromisos generales para reorganizar el sistema impositivo y mejorar la eficiencia del gasto público, por ejemplo, pero no han especificado cómo van a hacerlo y, por tanto, no lo reflejamos en nuestras proyecciones", ha explicado Medas.
Sin embargo, en el FMI no se han mostrado particularmente preocupados ante un posible retraso en la llegada de estas medidas e indicaron que, si bien España deberá emprender en el futuro una "consolidación fiscal gradual", el momento para hacerlo será cuando la economía del país esté en una senda de crecimiento sostenido.
"Lo que sí aconsejamos al Gobierno es que presente planes a medio plazo más concretos para ganar credibilidad y ayudar a construir un consenso social y nacional, además de señalar a los mercados que existe un plan", ha concluido el economista.