Un superviviente del naufragio del Villa de Pitanxo contradice de nuevo la versión del patrón

• El marinero Samuel Kwesi afirma que no se les ordenó ponerse los trajes de supervivencia y que el motor no se paró
• El patrón del buque asegura que actuó al detenerse el motor y que les pidió que se pusieran el chaleco salvavidas

El superviviente del naufragio del Villa Pitanxo, Samuel Kwesi

Uno de los tres supervivientes del naufragio del Villa de Pitanxo en aguas de Terranova (Canadá), el ghanés Samuel Kwesi, ha ratificado este jueves su versión sobre lo ocurrido en la catástrofe marítima, diferente a la del patrón del buque, Juan Padín, y su sobrino, Eduardo Rial.

Padín sostiene que el motor del buque se paró a las cuatro de la madrugada y que las condiciones meteorológicas existentes provocaron la sucesiva entrada de agua por la aleta de babor, ocasionando una cada vez mayor escora. Fue entonces, según su testimonio, cuando dio a la tripulación la orden para que se colocaran el traje térmico de supervivencia, el chaleco salvavidas y abandonaran el buque, tras lo cual, a las 4:24 horas de la madrugada, realizó la llamada de emergencia.

Sin embargo, Kwesi ha vuelto a declarar ante la Guardia Civil algo muy diferente. El ghanés ha asegurado que el motor no se paró, sino que las maquinillas que recogen el aparejo dejaron de funcionar bien, tensando, pero no recogiendo y provocando la escora. Asimismo, ha explicado que el resto de la tripulación exigió a gritos al patrón que soltara los aparejos, pero este se negó y, ya con el buque muy ladeado, se paró el motor y se incrementó la escora de babor.

Kwesi afirma que no se les ordenó ponerse los trajes de supervivencia

Además, el marinero ha afirmado que en ningún momento se dio la orden de ponerse los trajes de supervivencia, aunque el patrón y su sobrino sí los llevaban cuando fueron rescatados en aguas de Terranova.

Tras producirse la catástrofe, la declaración de Kwesi sí respaldó la versión aportada por el patrón y la armadora del pesquero gallego. No obstante, días después trascendió que había cambiado su testimonio, denunciando presiones para no contradecir a sus compañeros.

Ahora, el informe del ministerio público sostiene que, tras analizar las actuaciones realizadas hasta el momento sobre esta causa, hay "indicios de que la versión primeramente ofrecida puede no ajustarse a la realidad, tratando con ello de eludir las posibles responsabilidades".

Pontevedra insta al Gobierno a localizar el Pitanxo

La reclamación de los familiares de los 21 fallecidos en el naufragio del pesquero para que se retomen las tareas para localizar el barco y obtener imágenes sobre su estado ha resonado este jueves en el pleno de la corporación municipal de Pontevedra. Lo ha hecho a través de la declaración institucional que esta mañana han apoyado de manera unánime BNG, PP, PSOE y el concejal no adscrito, Goyo Revenga.

En el texto aprobado, la corporación ha hecho constar su desacuerdo con la decisión del Gobierno de no descender hasta el pecio hundido y ha instado a España y a Canadá a coordinar esfuerzos para impulsar una operación de trabajo subacuático que permita localizar el buque. Documentar mediante vídeos e imágenes su estado y reconocer el terreno en el que se encuentra el barco, según han añadido los concejales, podría servir para verificar si están allí los cuerpos de los 12 tripulantes que permanecen desaparecidos.

"El argumento de no encontrar los cuerpos o la imposibilidad de acceder al interior de la nave no es obstáculo para descender hasta el barco hundido y poder obtener imágenes de la situación y circunstancias en las que se encuentra", ha continuado la declaración institucional.

Ante la existencia de indicios de homicidio imprudente en el naufragio, según la Fiscalía, el visionado del barco "arrojaría datos para el buen discurrir de la investigación y, por lo tanto, para el esclarecimiento de la verdad".