María Salmerón: "Mi hija no entiende que todavía se siga protegiendo a un maltratador"
- Está acusada de haber incumplido el régimen de visitas de su hija con su exmarido, condenado por maltrato
- Si no recibe el indulto en los próximos días, María Salmerón deberá entrar en prisión
En las últimas horas, se han celebrado concentraciones en distintas ciudades para pedir al Gobierno que impida que María Salmerón entre en prisión. Está acusada de haber incumplido el régimen de visitas de su hija con su exmarido, condenado a 21 meses de cárcel por los malos tratos físicos y psicológicos que le infligió. Según ella, los ha incumplido porque su hija tenía pánico a estar con su progenitor. Si no se le concede el indulto en los próximos días, María Salmerón debería entrar en prisión.
"Por muchas leyes que hagan, los jueces machistas no van a acatarlas"
María Salmerón ha relatado cómo fue la etapa de los puntos de encuentro con su expareja: "Mi hija se negaba en rotundo a entrar en la habitación donde estaba su padre. El punto de encuentro en los casos violencia funciona así: el padre está en una habitación y la madre está en otra con el niño o la niña. Y la niña se negaba, no quería. A la fuerza no se la podían entregar", ha explicado.
Su hija Míriam, que ya es mayor de edad, en los últimos días se ha pronunciado sobre este tema y ha explicado cómo lo vivió: "A mi hija solo le han escuchado dos juezas en todo este periplo. Ellas nos han dado la razón, pero el juzgado que me condena ahora no ha tenido en cuenta las resoluciones judiciales de estas dos juezas", ha relatado.
María ha afirmado que actualmente Míriam está estudiando en el extranjero gracias al trabajo y esfuerzo de su madre, no de su padre: "Mi hija es brillante en todo y ahora su padre quiere quitarle la pensión de alimento. Ella está mal porque no entiende que en 2022 todavía se siga protegiendo a un maltratador. Por muchas leyes que hagan, los jueces machistas no van a acatarlas. Habrá buenos jueces, pero yo no he tenido la suerte de tener un juez que tenga perspectiva en estos temas", ha concluido Salmerón.
Dos décadas de sufrimiento
Sobre la espalda de María Salmerón pesan más de dos décadas de sufrimiento. Se separó en el año 2000 porque sufría malos tratos por parte de su expareja. Pero esto no supuso el punto y final.
En 2008 su expareja fue condenado a 21 meses de prisión, aunque nunca llegó a entrar. Al ser la pena menor a dos años y carecer de antecedentes, el hombre no ingresó en la cárcel. Fue entonces cuando María decidió respetar la decisión de su hija: ella no quería ver a su padre, dice que sentía pánico. Cada vez que se incumplía el régimen de visitas, su exmarido la demandaba, comenzando así su periplo judicial.
Míriam, la hija de María, tuvo que pasar dos años en casa de su padre sometida a malos tratos, según cuenta, aunque no lo denunció. Ahora dice que la única misión de su padre es "destruir a su madre" y que con ella se la va a llevar por delante.
Salmerón recibió hasta tres indultos del Gobierno, aunque el último fue anulado. El 29 de marzo el Juzgado de lo Penal n.º 6 de Sevilla pidió su ingreso en prisión. Espera un cuarto indulto que no llega mientras su abogado intenta ganar tiempo.